Saludo de las FARC-EP al FMLN por la muerte de Schafik Handal

Saludo de las FARC-EP al FMLN

Compañeros Partido Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional de El Salvador
San Salvador.

Al enterarnos de la muerte del compañero Comandante Schasfik Handal, nos unimos al profundo dolor y pesar de todos ustedes, de los familiares y amigos de Shchafik. Con la desaparición física del compañero Schafik pierde el pueblo, los trabajadores y su Partido a uno de sus más esclarecidos como aguerridos cuadros revolucionarios. Quien en procura de conquistar la paz definitiva y duradera para su pueblo, desde muy temprana edad, se vinculó a las filas del ejército libertador de su patria con el firme compromiso de luchar hasta la muerte al lado de los más necesitados, opuesto a las políticas de explotación, expoliación, chantajes, calumnias y guerra infame del imperialismo de los Estados Unidos de América, avalado por la complacencia cómplice de la oligarquía salvadoreña.

Con la muerte de Schafik Haldal han perdido los pueblos de América Latina Caribeña a uno de sus mejores conductores, pensadores y fieles representantes de las luchas emancipadores, en un momento en que avanza exitosa la batalla antimperialista, por la integración, por la paz con justicia social, y la dignidad para nuestros pueblos, expresada en el rechazo generalizado a la política neoliberal del Fondo Monetario Internacional.

Desde de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia Ejército del Pueblo, FARC-EP estamos seguros que la fortaleza ideológica y política del camarada desaparecido nos compromete más en los postulados libertarios que harán posible la conquista del poder político para nuestros pueblos a fin de construir la nueva sociedad libre de explotadores y explotados, independiente y soberana.

Ante nuestros camarada muertos ni un minuto de silencio, sino toda una vida de combate.

Paz en la tumba Schafik Handal.

Por el Secretariado de las FARC-EP

Raúl Reyes
Integrante del Secretariado y Jefe de la Comisión Internacional

Montañas de Colombia, enero 26 de 2006