Rindamos tributo al camarada Alfondo Cano fortaleciendo la unidad popular

EN EL PRIMER ANIVERSARIO DE SU MUERTE: RINDAMOS TRIBUTO AL CAMARADA ALFONSO CANO FORTALECIENDO LA UNIDAD POPULAR

Se cumple ya un año sin la presencia física de nuestro comandante Alfonso Cano, egregio conductor de guerrillas revolucionarias, constructor de organización popular, y maestro de los hombres y mujeres libres que luchamos por un nuevo país, enarbolan do las banderas de la auténtica democracia, la paz y la justicia social.

Transcurrido este primer aniversario, el dolor que sentimos los revolucionarios de Colombia por su ausencia aún no se ha apagado: la partida de Alfonso, nuestro camarada y amigo, constituye una pena para todos los que queremos la Patria Nueva.

Alfonso se vinculó pronta mente a la lucha revolucionaria y en su accionar supo aunar los mejores adjetivos que le puedan caber a un revolucionario y a un comunista. Siempre fue enemigo de la charlatanería, de la soberbia y de los devaneos pseudo – revolucionarios con la que muchos de sus contemporáneos pretendieron darse lustre.

Representante destacadísimo de una generación dorada de pensadores revolucionarios vinculados con el movimiento popular, Alfonso tomó la decisión de unir se a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia – Ejército del Pueblo como prueba de la consecuencia e integralidad de su ser rebelde.

No fue esta decisión fruto de decisiones apresuradas o de modas intelectuales, sino del convencimiento profundo de que el Estado colombiano cerraba todas las vías para la expresión de quienes luchaban por un país distinto.

Ya en las filas guerrilleras, se hizo acreedor prontamente de un merecido lugar dentro de los espacios de dirección y, posteriormente, del Secretariado del Estado Mayor Central. Recorrió cordilleras, llanuras, selvas y manglares construyendo nuestro proyecto revolucionario. Definitivo fue su accionar en la construcción y el surgimiento de frentes, bloques, columnas y compañías de combate; así como su labor de educador popular, organizador comunista y luchador por la paz.

La Uribe, Caracas, Tlaxcala y el Caguán fueron testigos de su altura como representante de las FARC-EP en diversos episodios de búsqueda de la paz con justicia social. Para Alfonso, el logro de una paz real y duradera era el mayor anhelo del pueblo colombiano, y se comprometió a su consecución con las mayores energías.

En Alfonso Cano se hacían uno pensamiento y acción, y por ello mismo fue que bajo su batuta se pudo cristalizar el sueño del Movimiento Bolivariano por la Nueva Colombia que Jacobo Arenas vislumbrar a años atrás.

Los hombres y mujeres que conformamos las FARC-EP somos conscientes de que el mejor homenaje que le podemos hacer a nuestro comandante Alfonso Cano está en ser cada día mejores guerrilleros, mejores revolucionarios, mejores seres humanos y mejores patriotas.

La labor iniciada con el Movimiento Bolivariano sigue siendo una tarea a cumplir. Miles de compatriotas se lanzan todos los días a librar una lucha por sus diversas reivindicaciones en el marco de un orden injusto y criminal.

Unificar y potenciar todo ese torrente popular era el principal anhelo y la principal preocupación del comandante Alfonso Cano y a eso dedicó los mejores años de su vida. Por ello ratificamos hoy sus llamados a la unidad de los que luchan, a la unidad popular de todos los oprimidos, que tanto requiere nuestro pueblo.

El ejemplo del comandante Alfonso Cano, ejemplo de consecuencia, de entrega, de unidad, de sacrificio, ilumina el camino de la revolución colombiana y será la forja de los ciudadanos de la Nueva Colombia, soberana, democrática y socialista.

Con los fusiles en la mano y la moral en alto, todas las unidades farianas gritamos hoy:

¡Comandante Alfonso Cano: Presente y Combatiendo!
¡Hemos jurado vencer y venceremos!

Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia – Ejército del Pueblo.

Montañas de Colombia, 4 de noviembre de 2012.