Respuesta a inquietudes y preguntas de la Comunidad de la Universidad del Valle

RESPUESTA A INQUIETUDES Y PREGUNTAS DE LA COMUNIDAD DE LA UNIVERSIDAD DEL VALLE

La Delegación de Paz de las FARC-EP agradece y saluda profundamente a los organizadores del Foro “Vení, enterate de la paz” realizado en la Universidad del Valle, en Cali, el pasado 31 de mayo.

A todos los asistentes, a los estudiantes, trabajadores, profesores y personal administrativo, va un saludo fraterno. Para nosotros el poder participar a través del video-chat en directo desde La Habana con toda la comunidad universitaria, constituye un privilegio, y es un aliciente más para continuar por la senda del diálogo y de la búsqueda de una paz duradera y justa para todos los colombianos.

Por cuestiones de tiempo, y limitaciones técnicas, no pudimos dar respuesta en vivo a todas las inquietudes que la comunidad univalluna. Aprovechamos este medio para hacerlas públicas.

Igualmente queremos saludar efusivamente a todos los compañeros y compañeras que siguieron el video-chat en vivo desde diversos lugares y que se comunicaron por el chat. Muchas gracias por su aliento y por sus preguntas, que también se responden en esta comunicación. Un abrazo a los compañeros del Partido Comunista de Argentina, a la comunidad de Villagorgona (Candelaria-Valle del Cauca), Cali y Medellín, y a los estudiantes de la Universidad del Tolima, la Universidad Nacional sede Bogotá y la Universidad Tecnológica de Pereira.

Que sea éste también el espacio para ofrecer disculpas públicas a los organizadores del Foro Regional Universitario por la Paz de la Universidad de la Amazonía que se realizó el día 29 de mayo en Florencia - Caquetá. Por compromisos derivados de la Mesa de Diálogos, nos resultó imposible participar en vivo desde La Habana. Esperamos que un evento posterior nos permita enmendar nuestro error y responderle como es pertinente a la valiosa comunidad universitaria del sur del país.

Preguntas realizadas por los asistentes al auditorio:

1) Dado el caso en que ustedes decidan constituirse como partido político, ¿Cómo piensan lograr todas las reivindicaciones para el pueblo colombiano por la vía de la votación popular? Después de la severa desacreditación mediática, ¿no temen convertirse en la siguiente UP?

R/ Para el accionar de las FARC-EP lo fundamental siempre será la lucha de las masas populares, su movilización y organización. Eso está por encima de cualquier escenario electoral, pues es el pueblo organizado y movilizado el que logra imponer los cambios. Nosotros hacemos parte de ese mismo pueblo, somos pueblo en armas, y por ello mismo sabemos del tremendo descrédito que entre todos los colombianos tiene la maquinaria electoral del régimen. No nos desvivimos por pensar en curules, como a querido presentar la prensa burguesa. Sobre la experiencia de la Unión Patriótica, en las FARC-EP hemos reflexionado y discutido bastante, y tenemos muy claro que no existen condiciones para la actividad política abierta de los revolucionarios colombianos. Por ello impulsamos el Movimiento Bolivariano por la Nueva Colombia, y el Partido Comunista Clandestino Colombiano, iniciativas para la acción y organización de masas, pero que por su carácter clandestino, permiten la salvaguarda de la militancia de los ataques del enemigo.

2) ¿Qué tan importante creen que sea la participación directa del pueblo colombiano en los diálogos?

R/ Es definitiva. Nosotros no creemos que la paz va a surgir simplemente de los acuerdos entre un gobierno y la insurgencia. De ser así, las problemáticas estructurales del país seguirían latentes y no se habría logrado nada. Lo hemos planteado varias veces: la paz sin pueblo no es paz. Por eso mismo llamamos a todos los compatriotas a que se apropian del proceso, a que sean parte deliberante y activa de los puntos en discusión. Con ese pueblo que es constituyente primario, con su fuerza, creatividad, heterogeneidad, sabemos que vamos por caminos ciertos.

3) ¿Cuáles son los ideales de la FARC-EP respecto al desarrollo, progreso y modernización del país, y porque tomaron el método de la vía armada para alcanzar tales ideales?

R/ Hace 49 años el Estado colombiano le cerró el horizonte de la participación democrática a 46 campesinos y dos campesinas en Marquetalia. Ellos debieron alzarse en armas ante una ofensiva militar injustificada contra la que protestó el estudiantado rebelde y la comunidad internacional. Ese clamor marquetaliano, y ese ejemplo de resistencia, se reprodujo y multiplicó ante la sistematicidad de las políticas anticampesinas y antipopulares del Estado. Y así llegamos hasta hoy: las armas han sido la única opción para miles de compatriotas acorralados por la violencia política y económica. Nosotros somos marxistas-leninistas y bolivarianos, esa es la guía de nuestros ideales que no son otros que la paz, la democracia, la justicia y el socialismo. Somos conscientes de las inmensas potencialidades de nuestro país, de sus grandes riquezas y del talante trabajador de nuestros compatriotas. Por eso sabemos que han sido las élites las que han puesto inmensas talanqueras para el desarrollo de nuestro país: son las mezquindades de la oligarquía las que no han permitido superar nuestro atraso y desencadenar las fuerzas de un país que se merecer ser soberano y digno.

4) ¿Por qué creen que fallaron los anteriores diálogos de paz; a este dialogo que lo hace diferente; y si el gobierno no garantiza su ejercicio político, como responderán, retoman las armas?

R/ Fallaron, según nuestro análisis, porque en Colombia la única política de paz que ha existido es la guerra. Los gobiernos “dialogantes” han llevado a cabo agendas paralelas a los diálogos, implementando planes militares contrainsurgentes, fortaleciendo el aparato militar, entregando la soberanía a los Estados Unidos. Sin voluntad política gubernamental es imposible avanzar hacia la solución política al conflicto social y armado. Creemos que en los actuales diálogos hemos podido avanzar bastante trecho, pero aún faltan temas cardinales por discutir, así que no podemos dar aún una lectura generalizadora. De lo que sí no puede caber duda es de que seguiremos en la Mesa defendiendo nuestras banderas y escuchando el clamor nacional por la paz.

5) ¿Qué proponen para reivindicar o reparar a las víctimas de su accionar?

R/ Las víctimas son hoy un tema clave en la Colombia de hoy. Respetamos profundamente a todas las víctimas del conflicto, a sus organizaciones y sus reivindicaciones. Somos partícipes de su dolor, pues la inmensa mayoría de la militancia fariana ha sido víctima de las diferentes manifestaciones del terrorismo de Estado. Hemos indicado que estamos dispuestos a la conformación de una comisión de veeduría sobre la integralidad de la problemática de las víctimas en Colombia en donde participen las mismas víctimas, organismos humanitarios internacionales e integrantes de nuestra organización.

6) ¿Qué les dirían a los jóvenes que creen en el cambio social y que aún sin identificarse con las FARC-EP ven en ustedes un horizonte de lucha, en tanto representan el único foco de resistencia real frente a las políticas de turno?

R/La juventud ha dado aportes inmenso a la resistencia popular colombiana, como se ha venido demostrando en las últimas jornadas de movilización y lucha. Nos alienta profundamente en nuestro accionar ver que los más jóvenes hijos de Colombia no se conforman con ser espectadores de la realidad que los circunda y que emprenden diversos caminos para el logro de sus reivindicaciones. Desde las FARC-EP les decimos a todos los jóvenes que estudien, luchen y trabajen todos los días pensando en la transformación social. La revolución colombiana requiere de una juventud inquieta, crítica, deliberante, propositiva, dispuesta para la batalla de ideas y para los combates que han de venir en nuestro camino. Prepárense para la lucha, que en el camino habremos de encontrarnos, construyendo hombres nuevos y mujeres nuevas en las trincheras de la movilización social.

7) El gobierno ha aclarado que no se va a tocar la propiedad privada, entonces ¿Cómo se logrará un acceso equitativo a la tierra, siendo que la mayoría está en manos de poderosos terratenientes y otras grandes están siendo vendidas a países extranjeros?

R/ El acuerdo parcial frente al primer punto apunta a la constitución de un Fondo de Tierras destinado a la provisión gratuita de tierras a comunidades campesinas, afrodescendientes e indígenas. Igualmente contempla la formalización de las tierras cuya propiedad le ha sido negada durante años a procesos de colonización campesina bastante significativas; así como el respeto e incentivo a la formalización de los procesos de constitución de las Zonas de Reserva Campesina. Creemos que estos puntos son primeros pasos para el logro de una estructura rural mucho más democrática y justa. Son, además, logros históricos para las luchas de las comunidades rurales colombianas.

Preguntas enviadas vía chat:

1) ¿Cuál es el próximo punto a tocar en la mesa de conversaciones de La Habana?

R/ Es el punto de participación política y democracia. Nos parece que es un punto importantísimo dentro del actual debate nacional. Esperamos poder nutrirnos con todas las propuestas que los ciudadanos y organizaciones sociales de Colombia quieran hacernos llegar. Para las FARC-EP lo fundamental es la instauración de una verdadera democracia popular, participativa e incluyente. Quedamos atentos a las iniciativas populares sobre el tema.

2) En estos momentos, ¿cuál es la misión y la visión de las FARC-EP?

Las FARC-EP somos el resultado de la negación violenta de la democracia por parte de las élites de Colombia. El terrorismo de Estado nos obligó a practicar la guerra de guerrillas móviles y la lucha revolucionaria clandestina, ligadas a la resistencia de masas que lleva a cabo nuestro pueblo contra la ofensiva existente en su contra. Nuestro objetivo es el logro de una Nueva Colombia que sea democrática, digna, soberana, y que garantice el buen vivir de todos sus habitantes.

3) ¿Cuál es la posición de las FARC-EP respecto a la reelección de Santos?

R/ Que no la respaldamos. Varios medios han intentado tergiversar nuestra política al respecto, que es muy clara: no apoyamos a Santos ni a su gobierno. Consideramos que el presidente siguiente, sea quien sea, deberá darle continuidad a los Diálogos de Paz: ese es el clamor nacional. Lo anterior no implica apoyar a Santos, pues resulta obvio que no lo hacemos: sería paradójico apoyar a un gobierno al que se está combatiendo militarmente todos los días en toda la geografía nacional.