FARC saludan al Papa Francisco

La Habana, Cuba, sede de los Diálogos de Paz, 21 de septiembre de 2015

Querido Papa Francisco

Desde las montañas de Colombia, traemos para el Papa hermano de los pobres, misionero de la paz y la concordia, al pontífice que ama y custodia la creación, el saludo de miles de guerrilleros y guerrilleras de las FARC, que hoy libran en La Habana la más hermosa de las batallas que pueda librar un combatiente: la de la paz para todo un pueblo.

Aunque algunos nos perciban como soñadores, o demasiado optimistas, creemos, o mejor, tenemos fe, Su Santidad, en que nos estamos acercando a la reconciliación de Colombia, luego de seis décadas tristes de conflicto armado. Efectivamente: “No tenemos derecho a permitirnos otro fracaso más en este camino de paz y reconciliación”.

Tenemos razones poderosas para la esperanza. Tras la aprobación de tres acuerdos parciales referidos a reforma rural integral, ampliación de la democracia, y solución al problema de las drogas de uso ilícito, estamos próximos a convenir una jurisdicción especial para la paz.

Lo convenido acelerará sin duda el entendimiento en la Mesa en torno a temas como el Cese al Fuego y de Hostilidades, el desmonte del paramilitarismo, la dejación de las armas, y la transformación de las FARC en movimiento político legal. Queremos redoblar la marcha hacia una Nueva Colombia sin exclusiones ni desigualdad, donde el ser humano pueda vivir con dignidad.

La VERDAD es el elemento central de la jurisdicción especial para la paz; la verdad en el sentido de la prédica de Jesús -la que nos hará libres-, la verdad que sane las heridas de las víctimas del conflicto y de toda la sociedad, en el marco de una concepción restaurativa, de perdón y convivencia.

No queremos que las futuras generaciones, tengan que volver a sufrir y padecer lo que hemos vivido: No más despojo violento de tierras a campesinos, no más desplazamientos forzados, ni hornos crematorios, ni descuartizamiento con motosierras de personas vivas por paramilitares. Nunca más el exterminio de una fuerza política, nunca más el asesinato de dirigentes del movimiento social, ni políticas económicas deshumanizadas, no más persecución ni más exilio… Paz y reconciliación para la familia colombiana.

El perdón está por encima de la Ley del Talión, del sentimiento de venganza que nubla la razón; él debe ser la base de la convivencia y de la instauración de la no violencia y de la solidaridad. Por eso quisiéramos pedirle, hoy, Papa Francisco, que siga difundiendo la buena nueva de la paz en Colombia, que contribuya a realizar una jornada nacional de contrición en el que todos los actores del conflicto-combatientes y no combatientes-, ofrezcamos verdad, reconozcamos responsabilidades y nos comprometamos en un NUNCA MÁS.

Por intercesión de la Virgen de la Caridad del Cobre y la limpia conducción de su dirigencia revolucionaria que se inspira en la libertad, ha de seguir el pueblo cubano construyendo su sociedad digna y soberana,que solidaria con los pueblos del mundo ahora ofrece con absoluta disposición su gestión altruista, incluso su territorio, para ayudar a buscar la paz de Colombia. “El que siembra amor cosecha amor, y el que siembra amor, amor tendrá”.

La presencia del misionero de la misericordia en esta tierra de gente bondadosa, profundamente espiritual y solidaria, es aliento para acrecentar la esperanza en un mundo mejor, en el que los lazos de amistad entre los pueblos se fortalezcan, superando murallas y bloqueos. Con seguridad, el paso del Papa Francisco por las Antillas y por las Américas renovando la fe, el respeto, la misericordia y la reconciliación, es una ofrenda invaluable y una motivación enorme, para los corazones de quienes escuchamos su palabra anhelando la paz.

DELEGACIÓN DE PAZ DE LAS FARC-EP