Que la bandera tupacamarista guíe las luchas del pueblo en su marcha victoriosa por el pan y la belleza

QUE LA BANDERA TUPACAMARISTA GUIE LAS LUCHAS DEL PUEBLO EN SU MARCHA VICTORIOSA POR EL PAN Y LA BELLEZA

Nosotros comprendimos que si amábamos la justicia y la libertad, había que confrontarla,
para ello, había que oponer a la violencia reaccionaria de los opresores: la violencia revolucionaria».
Cmdte. Néstor Cerpa

A los Tupacamaristas del Perú y la Patria Grande,
A los Hombres y Mujeres que construyen la Patria de Todos,

Camaradas:

Hoy, 4 de noviembre, los revolucionarios juramos tejer el abrigo multicolor, de la nueva sociedad donde debe confluir la América de color, la América india y mestiza, esa América de todas las sangres que debe cerrar las venas abiertas de la Patria Grande, del que Eduardo Galeano nos hablara.

Y no lo decimos premunidos de lirica sistémica, porque ella, anida en el estercolero de una sociedad, vieja, caduca, anquilosada y que se resiste a desaparecer de la historia; lo decimos convencidos y definidos que si deseamos la libertad, la justicia social y la belleza, debíamos conquistarla, arrebatarla al enemigo de clase y, esta conquista debía tener como condicionantes: el ejemplo de Túpac Amaru II, Micaela Bastidas y las enseñanzas del Amauta José Carlos Mariátegui, que dio acerada textura a la bandera del Tupacamarismo.

Y nuestro Tupacamarismo es nacional, patriótico, continental y antiimperialista. Es Socialista, es Marxista – Leninista, que plantea hacer del Congreso, una verdadera tribuna de agitación revolucionaria, que organice, eduque y movilice al pueblo, a las masas trabajadoras, que sea capaz de acompañar al pueblo en la creación de su aparato, de su sistema organizativo, popular, propios, que con su presencia, garantice el derecho de la autodeterminación. El Tupacamarismo, postula que al socialismo no se avanza, con aparatos, con economía capitalista y mucho menos con organizaciones políticas que mantienen en su accionar un criterio de mercado, una práctica pro capitalista. El Tupacamarismo, reivindica esa necesidad de la autodeterminación política, que rompe con el criterio de organizaciones sometidas a la dependencia del capital. Para avanzar, en este proceso de crear poder popular, la autogestión es fundamental.

El Tupacamarismo, sostiene que es preciso llevar adelante un proceso sostenido de planificación, de autogestión, autodeterminación y auto organización revolucionaria, vista ésta y comprendida como medidas de defensa social y política del pueblo que permita proteger lo conquistado. Sin la Autogestión, la Autodeterminación y la Auto organización la decisión de conquistar el porvenir, de querer la libertad, no sirve, si esta no crea su Autodefensa. Ahí, el papel del Tupacamarismo.

La autogestión entendida como contra poder, nos permitirá disputar los espacios políticos al sistema de dominación, permitirá cohesionar y formar una bancada de acero, permitirá homogenizar línea, permitirá crear un frente común que vele y luche por los intereses de las mayorías nacionales.

Hace 11 años, un 4 de noviembre como hoy, con motivo de conmemorar la revolución emprendida por Túpac Amaru II, concluimos que para nuestros pueblos y para los revolucionarios, la gesta por la independencia política y la reafirmación de nuestra identidad y nuestras raíces, constituye el hito más importante de nuestra historia, por su significado social, su contenido político reivindicativo, de nacionalidad, identidad, raza, cultura y perspectiva histórica, por ello, DECIDIMOS retomar la consigna de unidad, acción y lucha, enarbolada por quiénes resumen años de esfuerzo sostenido, permanente, incansable por construir una patria con paz y justicia social; COMPRENDIMOS entonces que era necesario buscar la vía para el desmonte de un sistema elitista, COMPRENDIMOS que para salvar al Perú de la ruina social, política, económica y moral en la que nos sume la derecha peruana, su partidocracia y su cleptócrata clase política, debemos derrocar al gobierno, derrocar del poder a la burguesía. COMPRENDIMOS que si queríamos vivir y ejercer nuestro derecho a ser, era necesario sacrificar lo querido y multiplicar el amor revolucionario.

Bajo esa premisa, concedimos la entrevista al semanario Sucesos del Perú, sabiendo de antemano de la satanización de propios y extraños, y contrario al berrear de la coreografía mediática de los medios de desinformación masiva, del sicariato periodístico, señalamos que la opción revolucionaria es y será mientras no se resuelvan las cuestiones estructurales: una opción válida, justa e histórica, no fue, un programa terrorista, fue un acto de reivindicación al derecho de la insurgencia, a la revolución social.

No fue una entrevista vulgar, ni de poses militaristas, lo dijimos sin retractarnos que era imperiosa la unidad de las fuerzas revolucionarias, de recrear juntos un Programa Revolucionario, que sea capaz de disputar en el escenario democrático – burgués, la hegemonía política de la derecha, pero este planteamiento táctico de periodo no plantea la unilateralidad de uno de los elementos de la lucha política, lo reafirmamos porque esa está escrita en nuestra tradición de pueblo en lucha: la opción militar es y será una opción válida y es válida por tanto y por cuanto, el Perú del sicariato político, necesita de una lucha real donde se defina el Perú de los iguales o el Perú de la corrupción: Socialismo o barbarie, será nuestra divisa.

No fue una declaración de guerra en el terreno militar, fue y lo constituye una DECLARACION DE GUERRA POLITICA, de una verdadera batalla de ideas, de una guerra en el campo de la organización y la movilización social y popular.

Fue una DECLARACION DE GUERRA a la corrupción, al modelo económico que cada día conduce a casi 15 millones de peruanos a la desesperación ya que no existe en el bolsillo, moneda alguna para pagar gastos de luz, salud, alimentación y educación de los hijos.

Fue una DECLARACION DE GUERRA a la mafia fujimorista enquistada en el legislativo, cuyas acciones se orientan a obtener un INDULTO a quien sumió al Perú en la corrupción y el narcotráfico.

Fue una DECLARACION DE GUERRA a esa constitución de mercado, a esa constitución política convertida en biblia del capital extranjero y de los neoliberales del Perú, fue una DECLARACION DE GUERRA al seguidismo constitucional del saqueo, del robo y la descarada dictadura fujimorista.

La entrevista tupacamarista, fue un “acuérdese” señor PPK de la Pagina 11 y la subasta que Ud., hizo de nuestro petróleo y las refinerías, fue un “acuérdese” señor Fujimori y señor Alan García que junto a las hordas chilenas, USTEDES cometieron en épocas distintas, el genocidio en nuestra patria.

Fue una crítica y denuncia al legislativo peruano, por su vacilante voluntad política para mandar a prisión a todos incluidos a PPK por el Caso Odebrecht.

Fue una DENUNCIA a la clase gobernante que habla de crecimiento económico sostenido en la región y calla sobre los 2 millones de niños que realizan “trabajo infantil” y son explotados.

Fue la entrevista de Mayo, señores que fungen de políticos mientras saquean al país, una DENUNCIA a la profundización neoliberal que ustedes despliegan bajo el discurso de “combatir la informalidad laboral, hacia un mundo de trabajo más justo”.

La Entrevista de mayo, es y será un llamado al derecho de luchar por una ASAMBLEA CONSTITUYENTE
ORIGINARIA que nos lleve a refundar el Perú, una constituyente no de partidos políticos, sino, una ASAMBLEA CONSTITUYENTE ORIGINARIA de movimientos sociales y pueblos indígenas, una ASAMBLEA CONSTITUYENTE ORIGINARIA que genere las bases de un nuevo Estado, de una II Republica, del Nuevo Perú.

Fue una LLAMADA DE ATENCION desde el campo revolucionario al papel de perro faldero que hace el Estado
Peruano, cuando desarrolla el libreto injerencista gringo para buscar “una transición negociada” en la Venezuela Bolivariana. ¿Negociar con los Capriles? ¿Negociada con Leopoldo López? ¿Negociar con los guarimberos? Vade retro satán.

Que, el poder desdeñe a los revolucionarios y los tilde de terroristas, eso no es novedad, que la prensa tergiverse las entrevistas para llevarse un mendrugo de pan que el poder los arroja o quizás como en los videos de Montesinos vender su irrisoria dignidad, tampoco preocupa. Lo que la prensa peruana tiene en sus bocas es podre.

Nuestro Tupacamarismo, no es terrorista, es humanismo, es solidaridad militante y, nuestras acciones constituyen el sello de nuestra consecuencia, porque hacemos pedagogía con nuestra práctica cotidiana, y en ese caminar de pueblos, comprendimos que hacer praxis política de nuestra teoría, era integrar a nuestro marxismo – leninismo, el componente Patriagrandino para conquistar el Socialismo.

Nosotros comprendimos que si amábamos la justicia y la libertad, había que confrontarla, para ello, había que oponer a la violencia reaccionaria de los opresores: la violencia revolucionaria, nos dijo sin titubeo alguno el Comandante Néstor Cerpa y al contrastarla con la dolorosa realidad en que vive el pueblo peruano, comprendimos también que la revolución socialista, del cual muchos hablan y pocos la conocen no era una tarea a ser resuelta por la vía electoral, no podíamos decretarla desde el parlamento y, al amparo de la neoliberal y pizarresca Constitución Fujimontecinista, había que comprenderla y exponerla a los ojos de la clase y el pueblo, que nuestro socialismo, nuestra democracia, nuestro hombre del futuro, solo podía ser resultante de una ardua, dura y sostenida “creación heroica de nuestro pueblo”, la larga pléyade de hombres y mujeres que entregaron su vida, nos hizo comprender de la acertada apreciación de nuestro heroico Comandante; y su voluntad puesta al servicio del pueblo y las causas sociales, nos llevó a cerrar filas en torno al socialismo mariateguiano, tupacamarista, reivindicador y, antiimperialista.

Señalamos que solo el Tupacamarismo, elevada a doctrina de las transformaciones sociales, se constituye en la herramienta ideológica para resolver los problemas estructurales de desempleo, miseria, explotación, dependencia política y económica, que el capitalismo salvaje viene profundizando con su modelo económico, y su alianza con el gran capital.

En este periodo, quienes luchamos por la revolución y el socialismo, sabemos que nuestro accionar político – militar, se orienta a generar un vasto movimiento político de masas cuyos pasos tácticos se encaminan a disputar los espacios de poder político desde los cuales se debe fortalecer el movimiento popular y el poder popular con capacidad para arrancar a los explotadores lo que en años de dominación han usurpado al pueblo.

Nuestro Tupacamarismo, es una propuesta de visión de país, que postula una estrategia de poder favorable a las mayorías nacionales, que se desarrolla y nutre en el seno del pueblo que pregona en la Patria Grande QUE LA BANDERA TUPACAMARISTA DEBE GUIAR LAS LUCHAS DEL PUEBLO EN SU MARCHA VICTORIOSA POR EL PAN Y LA BELLEZA.

Nuestro Tupacamarismo, es una doctrina de la solidaridad, porque se identifica con los procesos de transformación en Venezuela, Bolivia, Ecuador, Nicaragua, que pregona la defensa solida ante la agresión imperialista de la Venezuela Bolivariana, convertida en centro de gravedad revolucionaria desde que el Comandante Hugo Chávez impusiera la democracia de los oprimidos.

Nuestro Tupacamarismo, que nos dejara como legado Túpac Amaru II, es la visión continental, integradora de la Patria, por eso hacemos el llamado a los revolucionarios de la Patria Grande a defender el ALBA – TCP, PETROCARIBE y la UNASUR, verdaderos espacios de integración económica y política de pueblos en resistencia.
Nuestro Tupacamarismo, es respetuoso del derecho de Autodeterminación de los pueblos, por eso condenamos el injerencismo del imperio en Bolivia y Ecuador.

Desde nuestras trincheras de resistencia y lucha, en este 4 DE NOVIEMBRE las FUERZAS ARMADAS REVOLUCIONARIAS – EJERCITO POPULAR TUPACAMARISTA (FAR – EPT), unen sus voces, esfuerzos y tareas con todos los revolucionarios de la Patria Grande y el mundo para hacer realidad la consigna de que Otro mundo es posible.

En este día de reafirmación revolucionaria, inclinamos banderas ante el ejemplo de lucha y sacrificio de quienes hacen posible estas voces: en el Perú a Túpac Amaru II, Micaela Bastidas y Néstor Cerpa, en la Colombia insurgente al Comandante rebelde Manuel Marulanda, en la Venezuela Bolivariana al Comandante Hugo Chávez y al Comandante de los Tupamaros Alberto “Chino” Carías” y, con sentida emoción a Fidel Castro el héroe de Sierra Maestra.

Porque sin luchas, no hay victorias¡¡¡
Túpac Amaru, Vive, Vuelve, Vencerá¡¡¡
Con las masas y las Armas, Patria o Muerte…Venceremos¡¡¡

Algún lugar de la Amazonia, noviembre 4 de 2017.

Camilo Reyes
Fuerzas Armadas Revolucionarias
Ejército Popular Tupacamarista FAR - EPT