República mexicana, 11 de noviembre de 1996

COMUNICADO A LA ORGANIZACION DE LAS NACIONES UNIDAS Y A ORGANISMOS INTERNACIONALES DEFENSORES DE LOS DERECHOS HUMANOS


A LA ORGANIZACION DE LAS NACIONES UNIDAS
A LOS ORGANISMOS INTERNACIONALES DEFENSORES
DE LOS DERECHOS HUMANOS


A las 21:15 horas del día 25 de octubre del presente año, en las afueras de la ciudad de Zumpango del Río, en el estado de Guerrero, fue detenido por agentes de inteligencia militar del Ejército Mexicano, un combatiente del Ejército Popular Revolucionario, al que en el interior de nuestras filas conocemos como Rafael.

A partir de ese momento nuestro compañero, en vez de ser presentado ante las autoridades competentes para ser juzgado legalmente por los posibles delitos que hubiera cometido, está siendo sometido a brutales torturas por parte de sus captores, con el fin de obtener de él información acerca de nuestras fuerzas.

Estos hechos fueron denunciados ante la opinión pública por el EPR y por el Partido Democrático Popular Revolucionario, desde el día 3 de noviembre, calificándolos desde ese momento como anticonstitucionales y violatorios de los derechos humanos, por lo que exigimos al gobierno mexicano la presentación inmediata de nuestro combatiente y que se le diera un trato justo y digno, acorde con su condición de prisionero de guerra.

Ante esta denuncia pública nuestra, la actitud gubernamental fue la de reconocer, por voz de Angel Aguirre Rivero, Gobernador del estado de Guerrero, la detención del compañero Rafael, pese a lo cual no ha sido presentado públicamente, hasta el momento.

Esta situación puede calificarse como una desaparición forzada y se agrega a la de otros luchadores sociales, que como Gilberto Romero y el Profesor Gregorio Alfonso Alvarado, han sido desaparecidos recientemente en el estado de Guerrero y a la de los más de 800 casos que han sucedido en nuestra patria durante las últimas tres décadas. Esta es una muestra fehaciente de la violación cotidiana de los derechos humanos en México y de que es necesario que los organismos internacionales estén al tanto de lo que sucede aquí, donde el ser opositor es sinónimo de estar bajo la mira asesina del gobierno mexicano, que con el incremento de sus acciones represivas es el único responsable de un mayor escalamiento en el conflicto interno que hoy existe en nuestro país.

Por lo anterior, pedimos a la Organización de las Naciones Unidas y, en particular, a sus organismos encargados de la defensa de los derechos humanos, que retomen la exigencia que hemos hecho al gobierno mexicano para que presente con vida a nuestro compañero, y para que respete su integridad física, psicológica y moral.


PARTIDO DEMOCRATICO POPULAR REVOLUCIONARIO
PDPR

COMANDANCIA GENERAL DEL EJERCITO POPULAR REVOLUCIONARIO
CG-EPR

República mexicana, 11 de noviembre de 1996.