Guerrero, 5 de febrero de 1997

COMUNICADO DEL COMITE ESTATAL DEL PARTIDO DEMOCRATICO POPULAR REVOLUCIONARIO Y DE LA COMANDANCIA MILITAR DE ZONA DEL EJERCITO POPULAR REVOLUCIONARIO.


Sobre la casa ubicada en la Calle Vicente Guerrero número 227 de la Unidad Habitacional Adolfo López Mateos, en el puerto de Acapulco, y reportada por la policía el día de ayer ante los medios de comunicación, queremos hacer las siguientes precisiones.

1. Esa casa fue atendida por nuestro combatiente RAFAEL hasta el 25 de octubre del 1996, día en que fue detenido-desaparecido por elementos de inteligencia militar.

2. Si no fuera porque tras todo esto está el drama que vive un ser humano víctima de las tortura y la desaparición forzada, así como el dolor de una familia, ante la ausencia de un ser querido, el “descubrimiento” de la casa y el “operativo” policiaco montado ayer nos moverían a risa pues esa sí fue una pantomima con fines propagandísticos.

3. Esa casa fue desalojada por la esposa del compañero Rafael y sus pequeños hijos el día 26 de octubre, esto es al día siguiente de la detención del compañero, desde hace tres meses con diez días. Desde entonces ningún compañero nuestro fue a ella.

4. Desde principios del mes de enero observamos vigilancia sobre la casa y el área donde se encuentra, por lo que estamos seguros que desde entonces la policía la tenía en observación constante para tratar de detener a quien tratara de entrar a ella, montando lo que se conoce desde hace mucho como una “Ratonera”.

5. Esto de dar a conocer un mes después el “hallazgo” de la casa, ya tiene su antecedente, pues el coche de “Rafael” fue retirado del estacionamiento con un despliegue propagandístico varios días después de que ya lo tenían vigilado con la misma intención de detener a quien fuera a recogerlo.

6. Las cosas que se encontraron en la casa, son las que la esposa de Rafael no pudo llevarse consigo cuando desalojó la casa y que nosotros decidimos dejar abandonadas ahí antes de poner en riesgo a algún compañero. Sabíamos que tarde o temprano los propietarios de la casa entrarían y las verían, pero para nosotros esas cosas no son de importancia.

7. Pese a la tortura y a su situación de detenido-desaparecido, a merced de la crueldad de sus verdugos militares, Rafael no proporcionó a sus torturadores los datos de esa casa, la cual solamente fue descubierta hasta que los dueños de ella entraron y vieron las cosas que dejamos abandonadas en el interior.

8. De todo esto una cosa si es muy clara, la denuncia que hemos hecho sobre la detención-desaparición de Rafael es cierta, inteligencia militar lo tiene a él, a su coche y ahora las cosas dejadas en la casa que rentaba con su familia. Otra cosa es cierta, en un principio la policía judicial y el Gobernador reconocieron saber de la detención de Rafael. También es cierto que el cuarto que Rafael tenía en Chilpancingo fue desalojado y vigilado por la policía. También es claro que al día siguiente de su detención elementos de inteligencia militar fueron a sacar las cosas del coche y le pusieron vigilancia como ya lo declaró públicamente el vigilante del estacionamiento. ¿Son necesarias mas pruebas para demostrar que el gobierno Mexicano se está ensañando con un prisionero de guerra, violando sus mas elementales derechos humanos?.

Reiteramos nuestro llamado a todas las organizaciones de derechos humanos no gubernamentales para que intercedan en este caso. Hacemos un llamado al humanismo de personalidades, dirigentes de organizaciones políticas y sociales para que alcen su voz contra la cruel realidad de la existencia en nuestro país, y concretamente en nuestro estado de Guerrero de los desaparecidos, pues Rafael no es el único. cada desaparecido es una herida profunda y dolorosa que no puede ya nunca ser cerrada, es un agravio a la humanidad entera.


¡TORTURA NUNCA MAS!.
!POR UN PAIS JUSTO Y LIBRE!
¡POR UN MEXICO SIN TORTURA!

COMITE ESTATAL DEL PDPR
COMANDANCIA MILITAR DE ZONA DEL EPR


5 de febrero de 1997, a un aniversario más de que los derechos de los mexicanos consagrados en la constitución no son respetados.