República Mexicana, 23 de diciembre de 1997

SOBRE LA MATANZA DE ACTEAL, CHIAPAS. NUESTRA SOLIDARIDAD Y REPUDIO ANTE LOS HECHO.


¡ALTO A LAS MASACRES GUBERNAMENTALES CONTRA LA POBLACIÓN CIVIL!
¡ALTO A LA GUERRA PSICOLOGICA Y A LA GUERRA SUCIA!
¡ALTO A LA GUERRA DE BAJA INTENSIDAD!


AL PUEBLO DE MEXICO.
A LOS PUEBLOS DEL MUNDO.


El incumplimiento gubernamental de los acuerdos de San Andrés, la profundización de la Guerra de Baja Intensidad en Chiapas, Oaxaca y Guerrero, la imposición de las políticas neoliberales mediante la renovada alianza legislativa PRI-PAN y las recientes reformas penales promovidas por el ejecutivo federal, son algunas de las principales medidas con las que el Estado mexicano pretende liquidar la lucha popular, democrática y revolucionaria, existente en nuestro país frente al crimen y la impunidad como forma de gobierno.

La Guerra de Baja Intensidad constituye el instrumento más importante desplegado por el gobierno antipopular, el partido de Estado, las cúpulas militares, empresariales y religiosas, así como los grupos de poder local. Guerra sucia de la que este bloque dominante pretende deslindarse, desde el jefe del ejecutivo hasta el último priísta, mediante un falso discurso, pero de la que dan cuenta los encarcelamientos, torturas, asesinatos y desapariciones cometidas contra las organizaciones democráticas, luchadores sociales, combatientes revolucionarios y la población civil en distintos puntos del territorio nacional.

Prueba de ello fue la masacre del pasado 22 de diciembre en Acteal municipio de Chenalhó Chiapas, donde fueron arteramente asesinados 45 indígenas mexicanos (21 mujeres, 15 niños y 9 campesinos) y resultaron heridos de gravedad un número indeterminado de indígenas desplazados de sus comunidades de origen. Masacre que constituye la culminación de una larga cadena de agresiones y crímenes desarrollada en este lugar contra la población civil. Evidentemente los autores materiales de esta acción criminal fueron los integrantes de uno de los grupos paramilitares de filiación priísta, organizados y entrenados por el Ejército Federal y los cuerpos policiacos de carácter local y federal quienes además les brindan apoyo y cobertura logística en este tipo de acciones. Pero los autores intelectuales de dicha masacre, y de otras acciones represivas cometidas contra la población civil, contra las comunidades zapatistas, contra luchadores sociales y personalidades democráticas, son el Gobierno de la república y el Ejército federal. Dichas acciones criminales forman parte de la GBI y más concretamente de la guerra sucia por medio de la cual el Estado mexicano pretende sembrar un permanente estado de terror en la población, quebrantar su voluntad de lucha y lograr así su sometimiento.

Pese a encontrarse aún fresca la masacre de Aguas Blancas Gro., los encargados de conducir la aplicación de la Guerra de Baja Intensidad en nuestro país han ordenado una nueva masacre contra el pueblo de México. Las apresuradas declaraciones del Gobierno de la república sólo constituyen una cortina de humo con la que pretende ocultar su responsabilidad frente a los hechos. Como en el estado de Guerrero, sólo chivos expiatorios serán puestos a disposición del inexistente estado de derecho, los verdaderos responsables de esta nueva masacre serán exonerados y la ocasión será aprovechada para profundizar la militarización y la represión contra nuestros hermanos campesinos chiapanecos, contra su lucha, su organización y su ejemplar resistencia.

A nuestros hermanos indígenas, víctimas de la más brutal represión gubernamental, les decimos ¡NO ESTAN SOLOS!

Al pueblo de México, a sus organizaciones progresistas, democráticas y revolucionarias les hacemos una llamado a mantenerse alertas frente a la embestida paramilitar dirigida desde el gobierno contra las comunidades campesinas e indígenas de Chiapas, Oaxaca y Guerrero, a detener dicha embestida mediante la más amplia movilización política y a apoyar los procesos de autodefensa armada revolucionaria existentes en estos lugares y los procesos armados que inevitablemente habrán de surgir en otros puntos del país frente a la guerra sucia, la creciente represión y la impunidad gubernamental.



¡POR LA VIA DEMOCRATICA REVOLUCIONARIA,
TODO EL PUEBLO AL PODER!

¡POR LA REPUBLICA DEMOCRATICA,
EL PUEBLO UNIDO TRIUNFARA!

¡CON LA LUCHA POPULAR,
EL EPR TRIUNFARA!

Fraternalmente:

PARTIDO DEMOCRATICO POPULAR REVOLUCIONARIO
PDPR.

COMANDANCIA GENERAL DEL EJERCITO POPULAR REVOLUCIONARIO CG-EPR.

República Mexicana, 23 de diciembre de 1997.