Comunicado número 3 del Ejército de Liberación Nacional de Bolivia
Al pueblo boliviano
El día 8 de mayo, en la zona guerrillera de Ñacahuasu, fueron emboscadas tropas de una compañia mixta al mando del subteniente Henry Laredo. En la acción resultaron muertos el citado oficial y los alumnos de la escuela de clases Román Arroyo Flores y Luis Peláez y prisioneros los siguientes soldados:
José Camacho, Reg. Bolívar
Nestor Cuentas, Reg. Bolívar
Waldo Veizaga, Esc. de clases
Hugo Soto Lora, Esc. de clases
Max Torres León, Esc. de clases
Róger Rojas Toledo, Reg. Braun
Javier Mayan Corella, Reg. Braun
Néstor Sánchez Cuéllar, Reg. Braun
Los dos últimos heridos al no responder al alto cuando se les interceptó en una operación previa. Como siempre, se les dejó en libertad tras explicarles los alcances y fines de nuestra lucha. Se capturaron 7 carabinas M-1 y 4 fusiles Mauser. Nuestras fuerzas salieron indemnes.
Son frecuentes los comunicados del ejército represivo en que anuncian muertes guerrilleras; mezclando cierta verdad sobre sus bajas reconocidas con fantasías sobre las nuestras y, desesperado en su impotencia, recurriendo a mentiras o ensañándose con periodistas que, por sus características ideológicas son adversarios naturales del régimen, imputándoles todos los males que sufre.
Dejamos expresa constancia de que el E.L.N. de Bolivia es el único responsable de la lucha armada en que encabeza a su pueblo y que no podrá acabar si no con la victoria definitiva, oportunidad en que sabremos cobrar todos los crímenes que se cometan en el curso de la guerra, independientemente de las medidas de represalia que el mando de nuestro Ejército juzgue oportuno tomar ante cualquier vandalismo de las fuerzas represivas.