Ecuador en este último trimestre ha soportado una permanente movilización y lucha de los pueblos y la juventud, como consecuencia de la crisis que aumenta las necesidades de hombres y mujeres pobres de todos los rincones del país. De hecho esta crisis tiene como responsables directos a los gringos que permanentemente pretenden imponen tratados, contratos, leyes y demás argucias jurídicas para beneficiar a sus transnacionales como es el caso de la Occidental (OXY), negando a las desatendidas ciudades de la Amazonía, a los indígenas de los páramos andinos y los agricultores de la costa la posibilidad de ser beneficiados con los recursos económicos que deja la venta de nuestro petróleo.
Sin lugar a dudas que lo que imponen los gringos siempre lo hacen aparecer como acuerdos conciliados entre un grupo de empresarios imperialistas y otro grupo de ineficaces empresarios ecuatorianos, que ni siquiera saben defender sus propias empresas, peor la suerte de la soberanía, la independencia y el desarrollo científico y tecnológico del país.
La situación se complica mucho más al tener un presidente sin capacidad mental, política y administrativa que frente a las presiones no tiene capacidad de pensar y busca palear, el reclamo, el paro y el combate popular con fondos económicos que al final no llegan a su destino, ni son utilizados para invertir en vialidad, créditos, y otras demandas sociales de la pobladores del Ecuador.
Este gobierno débil, incapaz, manipulados por los grupos económicos de Fidel Egas, Paz, Febres Cordero, Noboa, Isaías, sostenido en la actualidad por el general de defensa del Plan Colombia El General en retiro Jarrín y su Comando Conjunto y la Embajada gringa, para que firme el Tratado de Comercio con Bush y sus empresas por demás injusto, incoherente, que bajo ningún concepto beneficiará a las mayorías de campesinos y agricultores de las regiones de nuestro país. Agudizará la crisis y aumentará el desempleo que hoy bordea el 11% de la Población Económicamente Activa. Aumentara los precios de las medicinas y reducirá la producción nacional y genérica de las mismas. La carne, los lácteos, el pollo, el maíz, el arroz, serán productos que un futuro inmediato ya no produciremos sino solo importaremos porque así lo determina el gobierno del profacista de Bush.
Por todos estos elementos la bronca popular se atizo en este último mes, los secundarios, los universitarios, los obreros tercerizados petroleros, los pobladores de las provincias de Napo, Cotopaxi, Tungurahua, Chimborazo, Pastaza, arrinconaron al gobierno, la movilización y el cierre de carreteras de los indígenas y campesinos agrupados en la Ecuarunari, filial de la CONAIE, bloquearon el comercio, y la movilización a distintos puntos del país.
La lucha social en el país tiene características importantes, primero esta la masividad, el llamado a luchar por sus reivindicaciones económicas y políticas convocan grandes contingentes humanos de todas la edades. Segundo, esta la radicalidad que tiene como protagonista a la juventud, que delinea objetivos, blancos y logra resultados en medio de la acción, las formas, son retención de militares y policías, de buses urbanos, recuperación de materiales y en medio del combate de calles se afirma la solidaridad y el compañerismo entre los combatientes. Tercero, la unidad entre las distintas fuerzas que buscamos hacer un puño más grande para golpear la política terrorista del imperialismo y la sumisión del gobierno de Palacio, buscando afirmar la necesidad de la lucha por la nueva sociedad.
Los Grupos de Combatientes Populares, estamos concientes que va a crecer el sentido antiimperialista, en la conciencia del pueblo se afirma el concepto que la lucha es el camino para conseguir sus demandas y necesidades. Esto nos reclama prepararnos cada día mejor para estar a la altura de esta creciente oleada de lucha popular.