Colección
Archivo digital
Tipo
Documento
País
Fecha
2003-09-01
Categoría
Comunicado
Panamá: Elecciones y Demagogia
Panamá: Elecciones y Demagogia
Con la definición, hasta el presente, de cuatro candidaturas presidenciales por parte de los partidos políticos burgueses, se va configurando el escenario electoral, se entra a una etapa decisoria en cuanto a la puja y repuja que determinará, finalmente, las alianzas electorales.
A la par de ello, se acentúan las protestas de diversos sectores sociales en demanda de sus reivindicaciones, mientras el Gobierno, la clase empresarial y los partidos burgueses, en su conjunto, aprueban medidas que restringen los espacios de protestas de los sectores populares, bajo la argumentación de que éstas promueven el terrorismo y crean un clima desfavorable a las inversiones.
Candidaturas burguesas: Oficialmente, se han presentado cuatro candidaturas presidenciales, luego de las primarias y convenciones realizadas por los partidos burgueses que dominan por completo las ofertas electorales.
Estas candidaturas son las de Martín Torrijos, Guillermo Endara, José Miguel Alemán y Ricardo Martinelli.
Martín Torrijos: Martín Torrijos, del PRD (Partido Revolucionario Democrático), apoyado por el Partido Popular (Democracia Cristiana), ha tenido que enfrentar en los últimos tiempos las desavenencias internas surgidas por la conducción del CEN (Comité Ejecutivo Nacional) y el cambio de varios de sus legisladores a las filas del oficialismo, provocando una crisis que le ha significado una nueva derrota en el Legislativo, por el control de la Presidencia de ese órgano del Estado.
A la par de ello, luego de las primarias para escoger los candidatos a los distintos puestos de elección, ha surgido descontento entre grupos derrotados que han
denunciado diversas irregularidades, a la vez que varias fichas del CEN no pudieron alcanzar la ansiada postulación.
A pesar de que al PRD las encuestas le dan la primera opción, lo cual siempre ha sido así en la antesala de cada una de las elecciones en las que ha participado, le cuesta a éste atraer a otros sectores a una alianza electoral. Salvo el caso del Partido Popular, que se ve amenazado con desaparecer en el próximo torneo, no ha podido entrar en negociaciones con algunas fuerzas de importancia.
Incluso la alianza con el Partido Popular le ha supuesto el descontento de varias figuras que fueron relegadas en las primarias, al saberse de antemano que uno de los puestos en varios circuitos plurinominales estaba reservado a miembros del Partido Popular.
A ello se agrega la ausencia de un discurso convincente y la falta de propuestas concretas sobre los más álgidos problemas que enfrenta el país, por parte de Martín Torrijos. Igual, no puede dejarse de lado que bajo la conducción de Torrijos, el PRD en la práctica se ha convertido en la oposición leal a Mireya Moscoso, aprobando en la Asamblea medidas lesivas a los sectores populares, callando en otros casos y si acaso levantando tímidamente la voz, pero sin realizar acciones concretas ni movilizar a los más de 400 mil adherentes que se jactan poseer.
En todo caso, Torrijos se la juega a la maniobra publicitaria, al clientelismo electoral, a la estrategia de imagen, a ofrecer su candidatura como la mejor mercancía en el mercado electoral, para lo cual, eso sí, cuenta con los grandes recursos que posee el poderoso frente empresarial del PRD y personajes vinculados al capital financiero como, por ejemplo, Federico Humbert hijo (Banco General), además del apoyo de importantes medios de comunicación, principalmente, MEDCOM.
José Miguel Alemán: Por el lado del Partido Arnulfista, se proclama la candidatura del ex canciller, José Miguel Alemán, en una convención donde el dedo de la Presidenta Mireya Moscoso fue determinante, dejando en evidencia la falta de democracia interna y los mecanismos de imposición que persisten de parte de los gamonales del partido.
La candidatura de Alemán no logra despertar mayor simpatía, ni en la ciudadanía y ni siquiera a lo interno del partido. Ha creado descontento en ciertos elementos, como el caso de uno de los derrotados en la convención, el legislador Marco Ameglio, quien luego de fracasar en su intento por obtener la candidatura presidencial del Partido Arnulfista, pretendió la Presidencia de la Asamblea Legislativa, pero la línea oficial del partido se decidió por el veterano Jacobo Salas en alianza con los partidos Movimiento Liberal Republicano Nacionalista (Molirena) y Liberal, o sea, los mismos partidos con los que el arnulfismo pretende conformar la nómina presidencial.
Ameglio y su hermano se abstuvieron de votar. No nos debe sorprender si el ex liberal y ex Morena (Movimiento de Renovación Nacional) se convierte ahora en ex arnulfista y dé el salto a otra tolda.
La poca receptividad de la candidatura de José Miguel Alemán, que tiene tras de sí el apoyo de fuertes sectores económicos, no le ha permitido consolidar una alianza con el resto de los partidos de Gobierno (Molirena y Liberal), que aguardan hasta el último momento para definir su situación. Pesa contra esta candidatura el hecho de ser claramente la continuidad del desgastado y desprestigiado gobierno de Mireya Moscoso.
Guillermo Endara: Una de las muestras de la crisis que afronta la llamada "clase política panameña", es el resurgimiento, y con ciertas posibilidades, de la candidatura presidencial de Guillermo Endara. El presidente post invasión, luego de enfrentamientos a lo interno del Partido Arnulfista, con la Presidenta Mireya Moscoso, decidió postularse por el Partido Solidaridad, al venirse abajo la candidatura de Arturo Vallarino en este conglomerado político. Por ende, Endara pretende ser el heredero del caudal de la llamada "tercera fuerza".
El representante de un gobierno pasado, reconocido como incapaz, abiertamente pro patronal y entreguista, se presenta con un nuevo discurso, procurando canalizar el desprestigio de los principales bloques burgueses y atraer a la mayoría de los partidarios del arnulfismo y del resto de los partidos de gobierno, así como de alguno que otro peerredista.
Aún no logra concretar una alianza, pero sectores disidentes de diversos partidos de gobierno, e, incluso, de fracciones burguesas de oposición, le vienen brindando apoyo.
Ricardo Martinelli: Por último, tenemos la candidatura del empresario Ricardo Martinelli, por el partido Cambio Democrático (CD), de su propiedad. El ex director de la Caja de Seguro Social durante el gobierno de Ernesto Pérez Balladares (a quien apoyó en su fracasado intento reeleccionista) y el hasta hace poco Ministro de Asuntos del Canal, ha decidido correr como candidato de su propio partido.
Aislado del resto de los partidos burgueses, es incapaz de ofrecerse como candidatura independiente, por su participación muy reciente en sucesivos gobiernos. Su cálculo está basado en el hecho de que en las alianzas los partidos grandes se tragan a los pequeños, por lo que ante la posibilidad de desaparecer ha preferido correr solo, procurando reunir los votos que le permitan mantenerse como partido legalmente reconocido, recuperar su inversión con el subsidio electoral que por ley da el gobierno, y lograr algunas curules en la Asamblea Legislativa, con las que podría negociar su participación en el nuevo gobierno o en los bloques burgueses que deberán definirse en el futuro.
Todas estas candidaturas (Torrijos, Alemán, Endara y Martinelli) tienen como denominador común haber sido denunciadas por actos de corrupción de diversa índole y por haber sido partícipes de decisiones contrarias a las aspiraciones e intereses del pueblo panameño en distintas épocas y administraciones.
Se profundiza la política neoliberal: mientras arrecia la campaña electoral, el gobierno profundiza su política neoliberal en desmedro de los intereses de las grandes mayorías y de la nación en general. Así se firma un TLC (Tratado de Libre Comercio) con Taiwan y El Salvador, se aplican las reformas tributarias, se legisla a favor del gran capital financiero internacional, se busca un TLC con Estados Unidos y se insiste en los proyectos del Alca y Plan Puebla Panamá.
Estos proyectos constituyen una ofensiva contra los derechos de la clase trabajadora y significarán mayor miseria y atraso. Colocan los intereses de las transnacionales por encima de los intereses de la nación y procuran destruir los mecanismos de negociación regional colectiva, destruir los sectores productivos, eliminar aranceles, mayor flexibilización laboral, eliminación de puestos de trabajo y desmantelamiento de sindicatos de orientación clasista e independientes, entre otros objetivos.
En ese empeño existe homogeneidad de criterios por parte de los sectores empresariales, el gobierno, los partidos burgueses y todas las candidaturas que se han presentado en la actualidad.
Fracaso del diálogo del Seguro Social: Por otra parte, el llamado "diálogo del Seguro Social", ha entrado en un punto muerto al no existir consenso en el tema del programa más polémico: el de Invalidez, Vejez y Muerte.
La crisis financiera del Seguro Social pretende ser resuelta por los capitalistas y el gobierno, privatizando diversas áreas del Seguro Social, aumentando la edad de jubilación (particularmente de las mujeres), incrementando la cuota obrero patronal con recargo en los trabajadores, y dejando por fuera del régimen de seguridad social a amplios sectores de la población.
Y es que la seguridad social está fuera de la lógica del neoliberalismo. Por ello, para los sectores populares es importante comprender que se hace necesario un plan de desarrollo nacional y un modelo alternativo que permita preservar estas conquistas y evitar mayores sacrificios a la clase trabajadora.
Agotado el diálogo, el escenario se debe trasladar a las calles y, más aún, cuando el gobierno ya ha anunciado su decisión de adoptar medidas con relación a la crisis de la CSS, mientras la patronal presiona por su privatización.
Es importante mantener una actitud vigilante, sobre todo, respecto a sectores de la dirigencia de (Consejo Nacional de los Trabajadores Organizados (Conato) que, en busca de nuevas canonjías, intentan presentarse como interlocutores de los sectores populares y negociar una salida a la crisis de la CSS a espaldas del pueblo, tal como ocurrió con el alza del pasaje en mayo 2,001 y a propósito de las reformas al Código de Trabajo en 1995. Ya Mariano Mena, de la CGTP (Confederación General de Trabajadores de Panamá), y Leandro Ávila, de la Fenasep (Federación Nacional de Empleados Públicos), vinculados al Partido Popular (Democracia Cristiana) y al PRD, respectivamente, han dado muestras de esa intención en declaraciones públicas.
ACP sigue adelante con proyecto de embalses: Por otra parte, persiste el enfrentamiento entre los campesinos y la Autoridad del Canal de Panamá (ACP), por la pretendida ampliación de la llamada "Cuenca Occidental del Canal", megaproyecto que significará la desaparición de cientos de comunidades, un daño ecológico sin precedentes y el hecho de que el Estado se verá obligado a contraer nuevos empréstitos con lo que aumentará aún más la deuda externa y obligará a que los ingresos del Canal, en vez de utilizarse para apoyar el desarrollo nacional, se destinarán al pago de dicha deuda.
Este nocivo proyecto, que en el fondo responde a los intereses del gran capital internacional y de las multinacionales navieras, tiene que ser sometido a un referéndum, de acuerdo a la norma constitucional, y desde ya existe la intención de la casta de privilegiados que conforman los puestos directivos y de alto nivel de la ACP, de sorprender al pueblo sometiéndolo a consulta en las próximas elecciones presidenciales.
Sólo la capacidad combativa del pueblo, la solidaridad con las comunidades directamente afectadas y la conciencia que tome la población de que no se trata de una situación aislada que no les afecta, podrá frenar esta gigantesca obra al servicio de los intereses imperialistas.
Ley antiterrorista: El gobierno y los partidos burgueses insisten en restringir la participación ciudadana y establecer barreras a la protesta social. En eso se inserta la recién aprobada Ley Antiterrorista, que es un intento por penalizar la protesta social y legalizar la represión selectiva contra dirigentes y organizaciones populares, en momentos en que se vislumbra un ascenso de la lucha de masas en virtud de la problemática del Seguro Social, los embalses, etc.
A la par de esta medida se sigue reprimiendo la protesta popular, se conduce a los tribunales a estudiantes, obreros, padres de familia, desempleados, etc., que bloquean calles como medida para hacer oír su voz y son penalizados con multas y cárcel.
Prueba de lo anterior es la condena a ocho (8) meses de prisión de dos dirigentes universitarios del FER-29 (Frente Estudiantil Revolucionario 29 de Noviembre), por su participación en las jornadas contra el alza del pasaje en mayo de 2,001, y más recientemente, la represión y arresto de que fueron víctimas trabajadores afiliados al SUNTRACS (Sindicato Único Nacional de los Trabajadores de la Construcción y Similares) y moradores de los terrenos adyacentes a la segunda fase de la construcción del Corredor Norte, quienes protestaban por el incumplimiento de PYCSA y las autoridades gubernamentales de sus deberes y compromisos laborales y sociales.
Vale señalar que esta denominada Ley Antiterrorista forma parte de acuerdos adquiridos por el gobierno dentro del GAT, para ser sacado de la lista negra y responde también a presiones que viene ejerciendo el imperialismo a nivel regional. A ello hay que agregar el recién firmado tratado entre Estados Unidos y Panamá, que debe ser ratificado por la Asamblea Legislativa, donde se brinda inmunidad a las tropas norteamericanas que se encuentren en Panamá.
Dichos acuerdos también han sido adoptados por el gobierno como condición impuesta por Estados Unidos para futuras negociaciones comerciales (TLC, Alca), y se suman a los acuerdos Salas-Becker, al convenio firmado por la ACP sobre seguridad del Canal y los compromisos adquiridos dentro del llamado "Plan Colombia" y el respaldo a la política yanqui en Irak y Medio Oriente, como parte del orden creado a partir de los sucesos del 11 de septiembre de 2,001.
Sigue la corrupción: La corrupción gubernamental continúa creciendo. A los sonados casos conocidos por todos se suman los desfalcos al Banco Nacional, la Lotería Nacional y el Ministerio de Educación. Se sigue derrochando dinero en viajes improductivos por parte de la Mandataria y su séquito, y en eventos sin trascendencia en el marco de los actos de conmemoración del centenario de la República, contribuyendo esto a erosionar la imagen del gobierno y a aumentar su desprestigio.
Incremento de la lucha de los sectores populares: En el período, aunque dispersas, se observa un incremento en las luchas de los sectores populares. Es importante anotar entre ellas la serie de protestas que se han desencadenado a nivel nacional por estudiantes, profesores y educadores por el deterioro de los centros escolares, falta de pago a educadores y el desmejoramiento cada vez mayor de las condiciones de estudio.
A estas alturas, a mitad del tercer bimestre, las escuelas no han recibido las partidas correspondientes para hacer frente a la situación, mientras se suceden denuncias de malos manejos por parte de algunos directores en complicidad con las autoridades educativas.
Muchas de estas manifestaciones han sido duramente reprimidas por la Fuerza Pública, interviniendo escuelas y llegando a arrestar a cientos de estudiantes, que son esposados, humillados y maltratados públicamente, en abierta violación a la Ley de Protección al Menor. Las protestas estudiantiles en el caso del Artes y Oficios, fueron las más connotadas al verse afectado este plantel en su normal funcionamiento al darse un enfrentamiento entre la Ministra y el Director del colegio, producto de las pugnas políticas partidarias a lo interno del partido Molirena.
Igualmente, sobresale la huelga de los trabajadores del Seguro Social que defendieron la solicitud de partida extraordinaria que garantizaría su incremento salarial y las protestas de Conusi (Comité Nacional de Unidad Sindical) y el SUNTRACS contra la violación del fuero sindical, contra la corrupción de las autoridades del Ministerio de Trabajo y contra la complicidad de éste con la patronal.
Así mismo hay que agregar la lucha de los productores agropecuarios contra la política del MIDA (Ministerio de Desarrollo Agropecuario) y de comunidades a lo largo del país que reclaman obras de infraestructuras y servicios básicos. Las protestas contra proyectos que atentan contra el medio ambiente se han hecho sentir, como la oposición a la construcción de la carretera Boquete – Cerro Punta y el puente Multicentro en la Avenida Balboa; también debe mencionarse la lucha de las comunidades de Coclé del Norte, Capira y Colón contra los proyectos de embalses de la ACP, así como las de Tabasará y Veraguas contra la construcción de hidroeléctricas que atentan contra la población, sus tierras de cultivo y la ecología de la región.
Acciones para el período: Ante estos hechos corresponde para el período tratar de articular todos estos esfuerzos en un frente común. En medio de la campaña electoral corresponde a los sectores más avanzados del movimiento popular y patriótico alentar a la población a mantener en alto y agitar sus propias banderas de lucha.
Ello supone desarrollar una verdadera campaña nacional que permita desenmascarar el carácter antidemocrático y antipopular del sistema electoral excluyente hecho a la medida de los partidos burgueses; divulgar el contenido de clase contrario a los intereses populares, de las candidaturas en juego y frenar las aspiraciones de los eternos oportunistas de sembrar falsas alternativas e ilusiones acerca de la viabilidad de participar en estas viciadas y tramposas elecciones burguesas.
Debe propiciarse una amplia discusión y debate en centros de trabajo, comunidades, centros educativos, organizaciones populares acerca de la necesidad de desplegar las banderas de lucha del movimiento popular en medio de las elecciones, lo que pasa por exigir una salida a la crisis de la CSS cónsona con las aspiraciones del pueblo, rechazar los proyectos de embalses que afectarán a cientos de comunidades y a la ecología del país, luchar por un modelo alternativo al neoliberalismo, rechazar las medidas y leyes que buscan penalizar la protesta social (caso de la Ley Antiterrorista); denunciar los TLC, el Alca y el Plan Puebla Panamá que favorecen los intereses del imperialismo y las transnacionales; y luchar contra la corrupción del gobierno, la empresa privada y los partidos burgueses.
En el caso muy particular de la CSS, es importante hacer conciencia de la necesidad de librar la batalla en las calles, para evitar el colapso del sistema de seguridad social, impedir la privatización de la CSS y estar alerta frente a la posibilidad de que la causa del pueblo sea una vez más traicionada por los sectores de la dirigencia burocrática, amarilla y entreguista del Conato.
Es importante en ese sentido, difundir de la manera más amplia el documento titulado "Propuesta del Movimiento Popular a los desafíos que enfrenta la Caja de Seguro Social", para que se conozcan los acuerdos alcanzados y evitar negociaciones tras bastidores que, como en el pasado, burlen el sentir y las aspiraciones de las grandes mayorías.
Hoy, más que nunca, se hace imperioso fortalecer las organizaciones de lucha del pueblo y elevar la conciencia de las masas acerca de la necesidad de levantar una auténtica alternativa de poder popular, clasista y revolucionaria que tenga como objetivo central de su estrategia y razón de ser, la toma del poder político por el pueblo trabajador.
Movimiento de Liberación Nacional 29 de Noviembre,
MLN-29
Septiembre de 2003
Con la definición, hasta el presente, de cuatro candidaturas presidenciales por parte de los partidos políticos burgueses, se va configurando el escenario electoral, se entra a una etapa decisoria en cuanto a la puja y repuja que determinará, finalmente, las alianzas electorales.
A la par de ello, se acentúan las protestas de diversos sectores sociales en demanda de sus reivindicaciones, mientras el Gobierno, la clase empresarial y los partidos burgueses, en su conjunto, aprueban medidas que restringen los espacios de protestas de los sectores populares, bajo la argumentación de que éstas promueven el terrorismo y crean un clima desfavorable a las inversiones.
Candidaturas burguesas: Oficialmente, se han presentado cuatro candidaturas presidenciales, luego de las primarias y convenciones realizadas por los partidos burgueses que dominan por completo las ofertas electorales.
Estas candidaturas son las de Martín Torrijos, Guillermo Endara, José Miguel Alemán y Ricardo Martinelli.
Martín Torrijos: Martín Torrijos, del PRD (Partido Revolucionario Democrático), apoyado por el Partido Popular (Democracia Cristiana), ha tenido que enfrentar en los últimos tiempos las desavenencias internas surgidas por la conducción del CEN (Comité Ejecutivo Nacional) y el cambio de varios de sus legisladores a las filas del oficialismo, provocando una crisis que le ha significado una nueva derrota en el Legislativo, por el control de la Presidencia de ese órgano del Estado.
A la par de ello, luego de las primarias para escoger los candidatos a los distintos puestos de elección, ha surgido descontento entre grupos derrotados que han
denunciado diversas irregularidades, a la vez que varias fichas del CEN no pudieron alcanzar la ansiada postulación.
A pesar de que al PRD las encuestas le dan la primera opción, lo cual siempre ha sido así en la antesala de cada una de las elecciones en las que ha participado, le cuesta a éste atraer a otros sectores a una alianza electoral. Salvo el caso del Partido Popular, que se ve amenazado con desaparecer en el próximo torneo, no ha podido entrar en negociaciones con algunas fuerzas de importancia.
Incluso la alianza con el Partido Popular le ha supuesto el descontento de varias figuras que fueron relegadas en las primarias, al saberse de antemano que uno de los puestos en varios circuitos plurinominales estaba reservado a miembros del Partido Popular.
A ello se agrega la ausencia de un discurso convincente y la falta de propuestas concretas sobre los más álgidos problemas que enfrenta el país, por parte de Martín Torrijos. Igual, no puede dejarse de lado que bajo la conducción de Torrijos, el PRD en la práctica se ha convertido en la oposición leal a Mireya Moscoso, aprobando en la Asamblea medidas lesivas a los sectores populares, callando en otros casos y si acaso levantando tímidamente la voz, pero sin realizar acciones concretas ni movilizar a los más de 400 mil adherentes que se jactan poseer.
En todo caso, Torrijos se la juega a la maniobra publicitaria, al clientelismo electoral, a la estrategia de imagen, a ofrecer su candidatura como la mejor mercancía en el mercado electoral, para lo cual, eso sí, cuenta con los grandes recursos que posee el poderoso frente empresarial del PRD y personajes vinculados al capital financiero como, por ejemplo, Federico Humbert hijo (Banco General), además del apoyo de importantes medios de comunicación, principalmente, MEDCOM.
José Miguel Alemán: Por el lado del Partido Arnulfista, se proclama la candidatura del ex canciller, José Miguel Alemán, en una convención donde el dedo de la Presidenta Mireya Moscoso fue determinante, dejando en evidencia la falta de democracia interna y los mecanismos de imposición que persisten de parte de los gamonales del partido.
La candidatura de Alemán no logra despertar mayor simpatía, ni en la ciudadanía y ni siquiera a lo interno del partido. Ha creado descontento en ciertos elementos, como el caso de uno de los derrotados en la convención, el legislador Marco Ameglio, quien luego de fracasar en su intento por obtener la candidatura presidencial del Partido Arnulfista, pretendió la Presidencia de la Asamblea Legislativa, pero la línea oficial del partido se decidió por el veterano Jacobo Salas en alianza con los partidos Movimiento Liberal Republicano Nacionalista (Molirena) y Liberal, o sea, los mismos partidos con los que el arnulfismo pretende conformar la nómina presidencial.
Ameglio y su hermano se abstuvieron de votar. No nos debe sorprender si el ex liberal y ex Morena (Movimiento de Renovación Nacional) se convierte ahora en ex arnulfista y dé el salto a otra tolda.
La poca receptividad de la candidatura de José Miguel Alemán, que tiene tras de sí el apoyo de fuertes sectores económicos, no le ha permitido consolidar una alianza con el resto de los partidos de Gobierno (Molirena y Liberal), que aguardan hasta el último momento para definir su situación. Pesa contra esta candidatura el hecho de ser claramente la continuidad del desgastado y desprestigiado gobierno de Mireya Moscoso.
Guillermo Endara: Una de las muestras de la crisis que afronta la llamada "clase política panameña", es el resurgimiento, y con ciertas posibilidades, de la candidatura presidencial de Guillermo Endara. El presidente post invasión, luego de enfrentamientos a lo interno del Partido Arnulfista, con la Presidenta Mireya Moscoso, decidió postularse por el Partido Solidaridad, al venirse abajo la candidatura de Arturo Vallarino en este conglomerado político. Por ende, Endara pretende ser el heredero del caudal de la llamada "tercera fuerza".
El representante de un gobierno pasado, reconocido como incapaz, abiertamente pro patronal y entreguista, se presenta con un nuevo discurso, procurando canalizar el desprestigio de los principales bloques burgueses y atraer a la mayoría de los partidarios del arnulfismo y del resto de los partidos de gobierno, así como de alguno que otro peerredista.
Aún no logra concretar una alianza, pero sectores disidentes de diversos partidos de gobierno, e, incluso, de fracciones burguesas de oposición, le vienen brindando apoyo.
Ricardo Martinelli: Por último, tenemos la candidatura del empresario Ricardo Martinelli, por el partido Cambio Democrático (CD), de su propiedad. El ex director de la Caja de Seguro Social durante el gobierno de Ernesto Pérez Balladares (a quien apoyó en su fracasado intento reeleccionista) y el hasta hace poco Ministro de Asuntos del Canal, ha decidido correr como candidato de su propio partido.
Aislado del resto de los partidos burgueses, es incapaz de ofrecerse como candidatura independiente, por su participación muy reciente en sucesivos gobiernos. Su cálculo está basado en el hecho de que en las alianzas los partidos grandes se tragan a los pequeños, por lo que ante la posibilidad de desaparecer ha preferido correr solo, procurando reunir los votos que le permitan mantenerse como partido legalmente reconocido, recuperar su inversión con el subsidio electoral que por ley da el gobierno, y lograr algunas curules en la Asamblea Legislativa, con las que podría negociar su participación en el nuevo gobierno o en los bloques burgueses que deberán definirse en el futuro.
Todas estas candidaturas (Torrijos, Alemán, Endara y Martinelli) tienen como denominador común haber sido denunciadas por actos de corrupción de diversa índole y por haber sido partícipes de decisiones contrarias a las aspiraciones e intereses del pueblo panameño en distintas épocas y administraciones.
Se profundiza la política neoliberal: mientras arrecia la campaña electoral, el gobierno profundiza su política neoliberal en desmedro de los intereses de las grandes mayorías y de la nación en general. Así se firma un TLC (Tratado de Libre Comercio) con Taiwan y El Salvador, se aplican las reformas tributarias, se legisla a favor del gran capital financiero internacional, se busca un TLC con Estados Unidos y se insiste en los proyectos del Alca y Plan Puebla Panamá.
Estos proyectos constituyen una ofensiva contra los derechos de la clase trabajadora y significarán mayor miseria y atraso. Colocan los intereses de las transnacionales por encima de los intereses de la nación y procuran destruir los mecanismos de negociación regional colectiva, destruir los sectores productivos, eliminar aranceles, mayor flexibilización laboral, eliminación de puestos de trabajo y desmantelamiento de sindicatos de orientación clasista e independientes, entre otros objetivos.
En ese empeño existe homogeneidad de criterios por parte de los sectores empresariales, el gobierno, los partidos burgueses y todas las candidaturas que se han presentado en la actualidad.
Fracaso del diálogo del Seguro Social: Por otra parte, el llamado "diálogo del Seguro Social", ha entrado en un punto muerto al no existir consenso en el tema del programa más polémico: el de Invalidez, Vejez y Muerte.
La crisis financiera del Seguro Social pretende ser resuelta por los capitalistas y el gobierno, privatizando diversas áreas del Seguro Social, aumentando la edad de jubilación (particularmente de las mujeres), incrementando la cuota obrero patronal con recargo en los trabajadores, y dejando por fuera del régimen de seguridad social a amplios sectores de la población.
Y es que la seguridad social está fuera de la lógica del neoliberalismo. Por ello, para los sectores populares es importante comprender que se hace necesario un plan de desarrollo nacional y un modelo alternativo que permita preservar estas conquistas y evitar mayores sacrificios a la clase trabajadora.
Agotado el diálogo, el escenario se debe trasladar a las calles y, más aún, cuando el gobierno ya ha anunciado su decisión de adoptar medidas con relación a la crisis de la CSS, mientras la patronal presiona por su privatización.
Es importante mantener una actitud vigilante, sobre todo, respecto a sectores de la dirigencia de (Consejo Nacional de los Trabajadores Organizados (Conato) que, en busca de nuevas canonjías, intentan presentarse como interlocutores de los sectores populares y negociar una salida a la crisis de la CSS a espaldas del pueblo, tal como ocurrió con el alza del pasaje en mayo 2,001 y a propósito de las reformas al Código de Trabajo en 1995. Ya Mariano Mena, de la CGTP (Confederación General de Trabajadores de Panamá), y Leandro Ávila, de la Fenasep (Federación Nacional de Empleados Públicos), vinculados al Partido Popular (Democracia Cristiana) y al PRD, respectivamente, han dado muestras de esa intención en declaraciones públicas.
ACP sigue adelante con proyecto de embalses: Por otra parte, persiste el enfrentamiento entre los campesinos y la Autoridad del Canal de Panamá (ACP), por la pretendida ampliación de la llamada "Cuenca Occidental del Canal", megaproyecto que significará la desaparición de cientos de comunidades, un daño ecológico sin precedentes y el hecho de que el Estado se verá obligado a contraer nuevos empréstitos con lo que aumentará aún más la deuda externa y obligará a que los ingresos del Canal, en vez de utilizarse para apoyar el desarrollo nacional, se destinarán al pago de dicha deuda.
Este nocivo proyecto, que en el fondo responde a los intereses del gran capital internacional y de las multinacionales navieras, tiene que ser sometido a un referéndum, de acuerdo a la norma constitucional, y desde ya existe la intención de la casta de privilegiados que conforman los puestos directivos y de alto nivel de la ACP, de sorprender al pueblo sometiéndolo a consulta en las próximas elecciones presidenciales.
Sólo la capacidad combativa del pueblo, la solidaridad con las comunidades directamente afectadas y la conciencia que tome la población de que no se trata de una situación aislada que no les afecta, podrá frenar esta gigantesca obra al servicio de los intereses imperialistas.
Ley antiterrorista: El gobierno y los partidos burgueses insisten en restringir la participación ciudadana y establecer barreras a la protesta social. En eso se inserta la recién aprobada Ley Antiterrorista, que es un intento por penalizar la protesta social y legalizar la represión selectiva contra dirigentes y organizaciones populares, en momentos en que se vislumbra un ascenso de la lucha de masas en virtud de la problemática del Seguro Social, los embalses, etc.
A la par de esta medida se sigue reprimiendo la protesta popular, se conduce a los tribunales a estudiantes, obreros, padres de familia, desempleados, etc., que bloquean calles como medida para hacer oír su voz y son penalizados con multas y cárcel.
Prueba de lo anterior es la condena a ocho (8) meses de prisión de dos dirigentes universitarios del FER-29 (Frente Estudiantil Revolucionario 29 de Noviembre), por su participación en las jornadas contra el alza del pasaje en mayo de 2,001, y más recientemente, la represión y arresto de que fueron víctimas trabajadores afiliados al SUNTRACS (Sindicato Único Nacional de los Trabajadores de la Construcción y Similares) y moradores de los terrenos adyacentes a la segunda fase de la construcción del Corredor Norte, quienes protestaban por el incumplimiento de PYCSA y las autoridades gubernamentales de sus deberes y compromisos laborales y sociales.
Vale señalar que esta denominada Ley Antiterrorista forma parte de acuerdos adquiridos por el gobierno dentro del GAT, para ser sacado de la lista negra y responde también a presiones que viene ejerciendo el imperialismo a nivel regional. A ello hay que agregar el recién firmado tratado entre Estados Unidos y Panamá, que debe ser ratificado por la Asamblea Legislativa, donde se brinda inmunidad a las tropas norteamericanas que se encuentren en Panamá.
Dichos acuerdos también han sido adoptados por el gobierno como condición impuesta por Estados Unidos para futuras negociaciones comerciales (TLC, Alca), y se suman a los acuerdos Salas-Becker, al convenio firmado por la ACP sobre seguridad del Canal y los compromisos adquiridos dentro del llamado "Plan Colombia" y el respaldo a la política yanqui en Irak y Medio Oriente, como parte del orden creado a partir de los sucesos del 11 de septiembre de 2,001.
Sigue la corrupción: La corrupción gubernamental continúa creciendo. A los sonados casos conocidos por todos se suman los desfalcos al Banco Nacional, la Lotería Nacional y el Ministerio de Educación. Se sigue derrochando dinero en viajes improductivos por parte de la Mandataria y su séquito, y en eventos sin trascendencia en el marco de los actos de conmemoración del centenario de la República, contribuyendo esto a erosionar la imagen del gobierno y a aumentar su desprestigio.
Incremento de la lucha de los sectores populares: En el período, aunque dispersas, se observa un incremento en las luchas de los sectores populares. Es importante anotar entre ellas la serie de protestas que se han desencadenado a nivel nacional por estudiantes, profesores y educadores por el deterioro de los centros escolares, falta de pago a educadores y el desmejoramiento cada vez mayor de las condiciones de estudio.
A estas alturas, a mitad del tercer bimestre, las escuelas no han recibido las partidas correspondientes para hacer frente a la situación, mientras se suceden denuncias de malos manejos por parte de algunos directores en complicidad con las autoridades educativas.
Muchas de estas manifestaciones han sido duramente reprimidas por la Fuerza Pública, interviniendo escuelas y llegando a arrestar a cientos de estudiantes, que son esposados, humillados y maltratados públicamente, en abierta violación a la Ley de Protección al Menor. Las protestas estudiantiles en el caso del Artes y Oficios, fueron las más connotadas al verse afectado este plantel en su normal funcionamiento al darse un enfrentamiento entre la Ministra y el Director del colegio, producto de las pugnas políticas partidarias a lo interno del partido Molirena.
Igualmente, sobresale la huelga de los trabajadores del Seguro Social que defendieron la solicitud de partida extraordinaria que garantizaría su incremento salarial y las protestas de Conusi (Comité Nacional de Unidad Sindical) y el SUNTRACS contra la violación del fuero sindical, contra la corrupción de las autoridades del Ministerio de Trabajo y contra la complicidad de éste con la patronal.
Así mismo hay que agregar la lucha de los productores agropecuarios contra la política del MIDA (Ministerio de Desarrollo Agropecuario) y de comunidades a lo largo del país que reclaman obras de infraestructuras y servicios básicos. Las protestas contra proyectos que atentan contra el medio ambiente se han hecho sentir, como la oposición a la construcción de la carretera Boquete – Cerro Punta y el puente Multicentro en la Avenida Balboa; también debe mencionarse la lucha de las comunidades de Coclé del Norte, Capira y Colón contra los proyectos de embalses de la ACP, así como las de Tabasará y Veraguas contra la construcción de hidroeléctricas que atentan contra la población, sus tierras de cultivo y la ecología de la región.
Acciones para el período: Ante estos hechos corresponde para el período tratar de articular todos estos esfuerzos en un frente común. En medio de la campaña electoral corresponde a los sectores más avanzados del movimiento popular y patriótico alentar a la población a mantener en alto y agitar sus propias banderas de lucha.
Ello supone desarrollar una verdadera campaña nacional que permita desenmascarar el carácter antidemocrático y antipopular del sistema electoral excluyente hecho a la medida de los partidos burgueses; divulgar el contenido de clase contrario a los intereses populares, de las candidaturas en juego y frenar las aspiraciones de los eternos oportunistas de sembrar falsas alternativas e ilusiones acerca de la viabilidad de participar en estas viciadas y tramposas elecciones burguesas.
Debe propiciarse una amplia discusión y debate en centros de trabajo, comunidades, centros educativos, organizaciones populares acerca de la necesidad de desplegar las banderas de lucha del movimiento popular en medio de las elecciones, lo que pasa por exigir una salida a la crisis de la CSS cónsona con las aspiraciones del pueblo, rechazar los proyectos de embalses que afectarán a cientos de comunidades y a la ecología del país, luchar por un modelo alternativo al neoliberalismo, rechazar las medidas y leyes que buscan penalizar la protesta social (caso de la Ley Antiterrorista); denunciar los TLC, el Alca y el Plan Puebla Panamá que favorecen los intereses del imperialismo y las transnacionales; y luchar contra la corrupción del gobierno, la empresa privada y los partidos burgueses.
En el caso muy particular de la CSS, es importante hacer conciencia de la necesidad de librar la batalla en las calles, para evitar el colapso del sistema de seguridad social, impedir la privatización de la CSS y estar alerta frente a la posibilidad de que la causa del pueblo sea una vez más traicionada por los sectores de la dirigencia burocrática, amarilla y entreguista del Conato.
Es importante en ese sentido, difundir de la manera más amplia el documento titulado "Propuesta del Movimiento Popular a los desafíos que enfrenta la Caja de Seguro Social", para que se conozcan los acuerdos alcanzados y evitar negociaciones tras bastidores que, como en el pasado, burlen el sentir y las aspiraciones de las grandes mayorías.
Hoy, más que nunca, se hace imperioso fortalecer las organizaciones de lucha del pueblo y elevar la conciencia de las masas acerca de la necesidad de levantar una auténtica alternativa de poder popular, clasista y revolucionaria que tenga como objetivo central de su estrategia y razón de ser, la toma del poder político por el pueblo trabajador.
Movimiento de Liberación Nacional 29 de Noviembre,
MLN-29
Septiembre de 2003