A los estudiantes movilizados que con dignidad y tesón levantan y proyectan las luchas populares en nuestro país
A los profesores, profesoras y funcionarios de establecimientos educacionales
A las madres, padres y apoderados
A nuestros militantes, simpatizantes, y ayudistas.
Al pueblo pobre y marginado
Al pueblo de Chile
Hemos sido testigos estos días de la culminación de la primera fase de las masivas y radicales movilizaciones de los y las estudiantes secundarios en pos de la derogación de la LOCE y por la construcción de una educación al servicio de las masas populares.
El resultado de estas movilizaciones se ha traducido en la entrega de recursos para los problemas más urgentes de los estudiantes pobres, los que se encuentran cobijados en lo que los mismos estudiantes han denominado como “agenda corta”. Sin embargo, el gobierno ha insistido en la ausencia de recursos y ha llamado de manera constante a la “prudencia en las demandas” a los estudiantes movilizados. Para el presente año se calculan que los excedentes del cobre ascenderán a más de 7.000 millones de dólares. Los dineros asignados por el gobierno a la resolución de los problemas inmediatos de la educación solo representan un 0.48% de los excedentes calculados para el presente año. Las frías cifras traslucen la verdadera voluntad política del gobierno.
Como producto de las movilizaciones el gobierno yanacona de la señora Bachelet ha ofrecido la constitución de una mesa, que bajo la definición de un comité asesor, proponga y defina un nuevo marco regulatorio para la educación chilena en evidente y prolongada crisis.
Vemos en esta mesa una oportunidad táctica para estrechar lazos (organizacionales y programáticos) con otros actores y sectores populares vinculados al tema de la educación a fin de preparar una propuesta que permita la unificación de los sectores en pie de lucha tras un plan concreto. Nuestros objetivos se encuentran en la articulación con otros sectores para la definición de una alternativa educacional de carácter nacional que oriente y movilice los esfuerzos que cada organización pueda llevar a cabo.
No vemos en esta mesa un fin en si mismo. Le otorgamos un valor meramente instrumental y momentáneo que permita generar los vasos comunicantes a fin de hacer de la lucha por el derecho a la educación una problemática que vaya más allá de estudiantes y profesores, y que sea asumida por el conjunto del movimiento popular y de sus organizaciones. Somos los pobres en su conjunto a los que se nos niega la educación, de allí que los convocados a luchar por este derecho sean el conjunto de las fuerzas populares. Lo mas probable es que esta mesa muestre al poco andar su carácter inconducente, pero también valoramos la posibilidad de construcción colectiva que el bloque de organizaciones (colegio de profesores, confech, secundarios, co-docentes, padres y apoderados) sean capaces de llevar adelante. La voluntad política del gobierno se traducirá en la búsqueda de un aletargamiento del movimiento estudiantil y popular, mostrando su verdadera opción: construir mano de obra barata para la instalación de las trasnacionales en nuestro territorio. Las políticas concertacionistas tienen como norte estratégico constituir una cabeza de playa para las firmas comerciales imperiales, lo que requiere una mano de obra con baja calificación, escasos niveles culturales, y nulas matrices políticas y organizativas. Aquí encuentra su razón de ser la política educacional del gobierno: construir un pueblo dócil, manipulable, y fácilmente explotable.
La lección más importante que entregan nuestros hermanos y hermanas secundarias es que la articulación simultánea de todas las formas de lucha es el camino más viable y factible para poner sobre la mesa las demandas de los pobres y marginados. Tomamos y recogemos esta enseñanza y la implementamos de forma concreta: nuestros esfuerzos organizacionales van desde la participación en la mesa hasta impulsar las movilizaciones callejeras, las asambleas, las tomas de establecimientos, los cortes de ruta, las acciones de agitación, propaganda, y sabotaje, para extender y masificar y proyectar esta lucha que recién comienza a perfilarse.
Hacemos un llamado a las organizaciones hermanas del campo popular a sacarse las anteojeras y a no descartar a priori ninguna forma de lucha, superando la situación actual de luchas marginales y parceladas por un esquema que nos permita visibilidad y presencia en todos aquellos escenarios en los cuales se decide nuestro futuro. La ventaja estratégica que posee el enemigo se debe fundamentalmente a que opera bajo una lógica múltiple y multivariada, por su parte, la mayoría del campo popular sigue atada a enfoques principistas que privilegia el debate solo entre convencidos, enmarcados en refugios seguros, y con escasa capacidad de incidencia para coyunturas de carácter nacional.
L@s militantes de la rojaynegra nos encontraremos en todos los puestos de lucha y combate que la coyuntura requiera, no desestimando ninguno, y con nuestro norte puesto en la reconstrucción de la fuerza del gigante popular, que en un proceso creciente de acumulación de fuerzas vaya imponiendo y ejerciendo sus demandas y derechos.
¡¡Ni un Paso Atrás!!
¡¡Es Luchando como Avanza el Pueblo!!
¡¡La Lucha Continua!!