LA LEGALIZACIÓN DE LOS PARAMILITARES:
UNA AMENAZA PARA LA PAZ
El Ejército de Liberación Nacional informa a la opinión nacional e internacional que continúa comprometido con la búsqueda de la paz para Colombia, entendida ésta como el proceso que habilite a todos los sectores de la sociedad para que participen en la búsqueda de soluciones a la crisis que vive el país y para que con dicha participación se creen nuevas dinámicas democráticas.
A partir de hoy iniciamos la preparación de 4ª ronda de diálogos con el Gobierno y nuevas jornadas de intercambio con la sociedad, en la perspectiva que siempre hemos tenido de construir un nuevo diseño del proceso de paz, que supere las deformaciones que hemos presenciado todos los colombianos, teniendo en cuenta que las dificultades para un proceso de paz siguen presentes.
Informamos al país que el día 14 de junio del presente año apareció muerto en las instalaciones de la SIJIN, el compañero Juan Francisco Gamboa, detenido días antes y acusado de pertenecer al ELN. Este asesinato ha tratado de encubrirse con un burdo montaje de suicidio. Al Gobierno nacional, a través del Comisionado de Paz, hemos solicitado explicación e investigación sobre el caso y hasta el presente no hemos tenido ninguna respuesta.
Todos miramos sorprendidos la manera como el Gobierno, violando su propia juridicidad, hace hasta lo imposible para legalizar a los paramilitares. El temor que tenía el país sobre la falsa desmovilización de los paramilitares, ha sido confirmada, pues proliferan el rearme y aparición de nuevos o retocados grupos paramilitares; los comandos clandestinos llamados "Águilas Negras" pertenecientes al Ejército Nacional ya realizan operaciones encubiertas en todo el territorio nacional, haciendo de las amenazas, los asesinatos de dirigentes sindicales y populares, las capturas indiscriminadas y atropellos la continuidad del terrorismo de estado y una manera de gobernar que dificulta un verdadero camino hacia la paz.
La paz para el gobierno sigue siendo buscar la desmovilización de la insurgencia de manera pública y encubierta, dejando intactas las estructuras obsoletas. Superar esta vieja visión de paz es el reto que tiene que enfrentar una visión de paz que cree democracia, participación social y nos conduzca a un nuevo país.
Pese a lo anterior seguimos intentando superar los obstáculos, y llamamos la atención a todos los colombianos para que hagamos conciencia que el gobierno nacional hace pocos esfuerzos en la dirección de la paz.
Un camino hacia la paz tiene que conducirnos a un país democrático, más equitativo, que supere la pobreza, que los desterrados dejen de ser perseguidos y se haga realidad la verdad, la justicia y la reparación de los incontables crímenes de lesa humanidad. En esencia la paz es una construcción colectiva que beneficie al conjunto de la sociedad.
Informamos que estamos estudiando la propuesta que nos envió el Gobierno, y que nuestra respuesta será llevada a la mesa de diálogo en la próxima ronda que estamos organizando.
El ELN se apresta a vivir nuevos momentos en la vida política de Colombia, el movimiento social y político encontrarán en nosotros una fuerza comprometida con sus luchas y sus búsquedas. Nuestro interés es aportar en hacer realidad las transformaciones negadas, por eso junto con las mayorías excluidas desplegaremos una Campaña Política por la Paz, para construir participación democrática que nos conducirá a la convocatoria de la Convención Nacional.
COLOMBIA PARA LOS TRABAJADORES
NI UN PASO ATRÁS LIBERACIÓN O MUERTE