Colección
Archivo digital
Tipo
Documento
País
Fecha
2006-12-24
Categoría
Comunicado
Fichero Adjunto
Saludo a los Guerrilleros
SALUDO A LOS GUERRILLEROS
Ha concluido un año de fuertes combates políticos y militares por una Colombia nueva, un nuevo Estado, por la democracia verdadera, la mayor suma de felicidad posible para el pueblo, la paz y la soberanía.
Como parte al pueblo de Colombia, le entregamos un Plan Patriota fracasado, con un Gobierno, que abrumado por la ausencia de resultados militares, quiere tapar su frustración cambiándole el nombre a dicho plan. Aún no decide si a la continuidad de ese fracaso lo llama “Plan Victoria” o “Consolidación”. Lo cierto es que cada vez está más enredado en las profundidades de la selva.
Hasta allá dijo Uribe que iba a llegar… Y llegó, pero desconociendo que la táctica de guerra de guerrillas móviles no tiene cuarteles generales en la selva que puedan ser copados, sino guerrillas fluidas que atacan con comandos sorpresivos o envuelven con sus compañías de combate al enemigo. Esto no tiene por qué saberlo el ministro de Defensa Santos, y es por ello que no respondemos a los dictados de su ignorancia.
Más de cuatro décadas ha perdido esta oligarquía gobernante intentando la derrota militar de la inconformidad social y el alzamiento armado, desechando la solución diplomática del conflicto por la egoísta ambición de mantener las riendas del poder, y sus privilegios a toda costa, contra el bien común, la estabilidad política, la soberanía, y la dignidad de todos y cada uno de los colombianos.
La mayor parte del presupuesto nacional fue invertido en la guerra dejando vacías las arcas de la nación y en cero los programas sociales.
El gobierno de Uribe, basado en la “Narco-Para-Política”, se hunde irremediablemente en su peor crisis de legitimidad y legalidad. Esa mafia que se ha tomado el Capitolio Nacional y el Palacio de Nariño a punta de narcotráfico y masacres, debe hacerse a un lado, previo castigo judicial, para que las fuerzas democráticas de la nación busquen la reconstrucción del país.
El irrespeto y la provocación a los hermanos ecuatorianos y a su gobierno con la aspersión adrede de sustancias tóxicas en la frontera, es una vergonzosa humareda artificial que no alcanza para encubrir la grave crisis institucional colombiana. El desprestigio internacional de este gobierno camina a marchas forzadas.
Al frente tenemos un gran horizonte de lucha que presagia victorias populares. Debemos trabajar resueltamente por la unidad de los colombianos en esta hora de la Patria, levantar la bandera política y social de la plataforma de diez puntos, proseguir la lucha por el canje de prisioneros de guerra, convertido hoy en itinerario obligado de la aspiración colectiva de la paz y la solución política.
A los caídos en combate nuestro homenaje póstumo y la certeza de que su lucha continúa en nuestros fusiles e ideas. A los heridos y lisiados el cálido saludo y el anhelo del colectivo fariano por su pronta recuperación. A los prisioneros en las cárceles del Régimen y el Imperio nuestro abrazo y la determinación que no afloja, de buscar el acuerdo de canje para tenerlos aquí, de nuevo, en su trinchera de lucha política. Y a los militantes comunistas clandestinos, al Movimiento Bolivariano, y a las milicias en campos y ciudades, nuestro abrazo guerrillero, combativo, bolivariano, y el llamado a primer grado de alistamiento para las batallas decisivas por la Patria y por el Pueblo.
¡Venceremos! Somos FARC, Ejército del Pueblo.
Secretariado del Estado Mayor Central, FARC-EP
Montañas de Colombia, diciembre 24 de 2006
Ha concluido un año de fuertes combates políticos y militares por una Colombia nueva, un nuevo Estado, por la democracia verdadera, la mayor suma de felicidad posible para el pueblo, la paz y la soberanía.
Como parte al pueblo de Colombia, le entregamos un Plan Patriota fracasado, con un Gobierno, que abrumado por la ausencia de resultados militares, quiere tapar su frustración cambiándole el nombre a dicho plan. Aún no decide si a la continuidad de ese fracaso lo llama “Plan Victoria” o “Consolidación”. Lo cierto es que cada vez está más enredado en las profundidades de la selva.
Hasta allá dijo Uribe que iba a llegar… Y llegó, pero desconociendo que la táctica de guerra de guerrillas móviles no tiene cuarteles generales en la selva que puedan ser copados, sino guerrillas fluidas que atacan con comandos sorpresivos o envuelven con sus compañías de combate al enemigo. Esto no tiene por qué saberlo el ministro de Defensa Santos, y es por ello que no respondemos a los dictados de su ignorancia.
Más de cuatro décadas ha perdido esta oligarquía gobernante intentando la derrota militar de la inconformidad social y el alzamiento armado, desechando la solución diplomática del conflicto por la egoísta ambición de mantener las riendas del poder, y sus privilegios a toda costa, contra el bien común, la estabilidad política, la soberanía, y la dignidad de todos y cada uno de los colombianos.
La mayor parte del presupuesto nacional fue invertido en la guerra dejando vacías las arcas de la nación y en cero los programas sociales.
El gobierno de Uribe, basado en la “Narco-Para-Política”, se hunde irremediablemente en su peor crisis de legitimidad y legalidad. Esa mafia que se ha tomado el Capitolio Nacional y el Palacio de Nariño a punta de narcotráfico y masacres, debe hacerse a un lado, previo castigo judicial, para que las fuerzas democráticas de la nación busquen la reconstrucción del país.
El irrespeto y la provocación a los hermanos ecuatorianos y a su gobierno con la aspersión adrede de sustancias tóxicas en la frontera, es una vergonzosa humareda artificial que no alcanza para encubrir la grave crisis institucional colombiana. El desprestigio internacional de este gobierno camina a marchas forzadas.
Al frente tenemos un gran horizonte de lucha que presagia victorias populares. Debemos trabajar resueltamente por la unidad de los colombianos en esta hora de la Patria, levantar la bandera política y social de la plataforma de diez puntos, proseguir la lucha por el canje de prisioneros de guerra, convertido hoy en itinerario obligado de la aspiración colectiva de la paz y la solución política.
A los caídos en combate nuestro homenaje póstumo y la certeza de que su lucha continúa en nuestros fusiles e ideas. A los heridos y lisiados el cálido saludo y el anhelo del colectivo fariano por su pronta recuperación. A los prisioneros en las cárceles del Régimen y el Imperio nuestro abrazo y la determinación que no afloja, de buscar el acuerdo de canje para tenerlos aquí, de nuevo, en su trinchera de lucha política. Y a los militantes comunistas clandestinos, al Movimiento Bolivariano, y a las milicias en campos y ciudades, nuestro abrazo guerrillero, combativo, bolivariano, y el llamado a primer grado de alistamiento para las batallas decisivas por la Patria y por el Pueblo.
¡Venceremos! Somos FARC, Ejército del Pueblo.
Secretariado del Estado Mayor Central, FARC-EP
Montañas de Colombia, diciembre 24 de 2006