Colección
Archivo digital
Tipo
Documento
País
Organización
Fecha
2007-09-06
Categoría
Comunicado
Comunicado # 37
COMUNICADO # 37
AL PUEBLO DE MÉXICO
A LA OPINIÓN PÚBLICA INTERNACIONAL:
Frente a los rumores y mentiras; la verdad de nuestra lucha
Arturo Duque Alvarado no es militante del ERPI
La intensa criminalización de las luchas sociales y políticas de nuestro pueblo por parte del Estado en sus diferentes niveles de gobierno tiene ahora en todo el país, pero especialmente en Guerrero, un muestrario de impunidad. Sumado a los retenes y cateos policíacos-militares contra la población, ilegales por anticonstitucionales, y a la ocupación militar de comunidades, se vive ahora un clima de amenaza, hostigamiento, desaparición y abierta persecución a luchadores sociales, pueblos originarios, organizaciones no gubernamentales, medios comunitarios y alternativos y movimientos de oposición a los proyectos depredadores, de privatización y saqueo de recursos por parte del régimen y ahora, ciudadanos en general. Es notable la participación organizada y pagada desde la cúpula del poder de periodistas y medios que enturbian y contaminan la información para justificar tales agresiones.
Es el caso reciente en Coyuca de Catalán, Guerrero donde “detuvieron a un presunto integrante del Ejército Revolucionario del Pueblo Insurgente (ERPI), Arturo Duque Alvarado”, y a quien se dice “le decomisaron armas de diversos calibres y uniformes tipo militar con las siglas del ERPI”.
Porque nos debemos al pueblo y respetamos los procesos de organización y lucha de este, y luego de una investigación a fondo de la información que divulgan algunos lacayos y francotiradores del periodismo de Estado, negamos rotundamente que Arturo Duque Alvarado milite o participe en cualquiera de las formas de organización de nuestro ERPI y que tan peligroso arsenal decomisado sea de nuestra propiedad.
Es sabido por nuestro pueblo y también por los órganos contrainsurgentes coludidos con el narcotráfico de presencia insurgente de nuestra estructura revolucionaria en la región de la tierra caliente y es algo común que se detengan a muchas personas con cualquier tipo de arma (lo cual es muy común en esta violenta región) para que de inmediato se les cuelgue el Sambenito de “guerrilleros” para luego someter a los detenidos y sus familias a vulgares extorsiones y en algunos casos el compromiso de que los liberen a cambio de que colaboren como informantes del ejercito y la policía. Los compañeros responsables en Tierra Caliente informan que el joven Arturo Duque Alvarado no es parte de nuestra estructura revolucionaria y que de buena fuente se sabe que la ropa y armas presentadas ante los medios no son sino “pruebas sembradas” para inculpar a varias personas. Es decir: el material “bélico” no es propiedad del ERPI.
Es sabido que no vivimos en el país de los sueños de Felipe Calderón –y anteriormente de Vicente Fox– que han buscado dar golpes espectaculares, sobretodo en el ánimo de nuestro Pueblo, al publicar detenciones en algunos casos de delincuentes comunes y en otros de evidente abuso de autoridad y violación de derechos fundamentales, queriendo hacer creer que sus detenidos son miembros de las organizaciones revolucionarias y para “persuadir” –al pueblo– de no organizarse y ejercer su derecho a la autodefensa integral ante el ataque impune de los poderes fácticos en contra de nuestro país.
Sabemos también que el Estado quiere demostrar el control que no tiene con el fin de recibir más dólares de las Transnacionales y del gobierno de Estados Unidos de América, EUA, sus verdaderos jefes, en el contexto de la Alianza para la Seguridad y Prosperidad de América del Norte, ASPAN y su engendro el “Plan México”. Además buscan que la propuesta de ley panista de (espionaje) seguridad y justicia desaparezca las garantías individuales y los derechos de organización y manifestación de nuestro pueblo.
En el hecho que nos ocupa, la prensa honesta y alternativa sigue relatando el clima de hostigamiento a las actividades diarias de los habitantes (ya no sólo de la región de Tierra Caliente, sino en todo el estado de Guerrero y en general en el país, con énfasis en el sur-sureste), por grupos mixtos de “seguridad” en los que participan AFI (PFP), PIM y policías municipales con la coordinación y complicidad del Ejército mexicano, demostrando nuevamente que junto a Felipe Calderón, tanto Zeferino Torreblanca como los partidos políticos (subordinados exclusivamente a sus intereses particulares) crean un clima de impunidad a conveniencia.
Dicha campaña de terror del Estado es producto del reconocimiento de que el pueblo organizado avanza, decide por él mismo y defiende sus derechos, sus recursos y sus proyectos con lo que, paso a paso ejerce su soberanía efectiva. Una muestra patente de ello es el secuestro y desaparición forzada de los compañeros del EPR Edmundo Reyes Amaya y Gabriel Alberto Cruz Sánchez, los cuales seguramente siguen cautivos como prisioneros de guerra en instalaciones militares del narcoestado mexicano.
Como hemos venido actuando, seguiremos respetando la dinámica y el desarrollo organizativo del pueblo de México y nos solidarizamos con particulares como el caso del joven Duque Alvarado, luchadores y luchadoras sociales, ONG y organizaciones hermanas que sean víctimas del “Estado de Derecho” mexicano, pero además saludamos las victorias que obtienen en sus luchas contra el poder del Estado, el capital financiero, las transnacionales y demás poderes opresores.
CON EL PODER POPULAR
EL PUEBLO UNIDO VENCERÁ
DIRECCIÓN NACIONAL DEL EJÉRCITO REVOLUCIONARIO DEL PUEBLO INSURGENTE
ERPI
República Mexicana a los 6 días de Septiembre de 2007.
AL PUEBLO DE MÉXICO
A LA OPINIÓN PÚBLICA INTERNACIONAL:
Frente a los rumores y mentiras; la verdad de nuestra lucha
Arturo Duque Alvarado no es militante del ERPI
La intensa criminalización de las luchas sociales y políticas de nuestro pueblo por parte del Estado en sus diferentes niveles de gobierno tiene ahora en todo el país, pero especialmente en Guerrero, un muestrario de impunidad. Sumado a los retenes y cateos policíacos-militares contra la población, ilegales por anticonstitucionales, y a la ocupación militar de comunidades, se vive ahora un clima de amenaza, hostigamiento, desaparición y abierta persecución a luchadores sociales, pueblos originarios, organizaciones no gubernamentales, medios comunitarios y alternativos y movimientos de oposición a los proyectos depredadores, de privatización y saqueo de recursos por parte del régimen y ahora, ciudadanos en general. Es notable la participación organizada y pagada desde la cúpula del poder de periodistas y medios que enturbian y contaminan la información para justificar tales agresiones.
Es el caso reciente en Coyuca de Catalán, Guerrero donde “detuvieron a un presunto integrante del Ejército Revolucionario del Pueblo Insurgente (ERPI), Arturo Duque Alvarado”, y a quien se dice “le decomisaron armas de diversos calibres y uniformes tipo militar con las siglas del ERPI”.
Porque nos debemos al pueblo y respetamos los procesos de organización y lucha de este, y luego de una investigación a fondo de la información que divulgan algunos lacayos y francotiradores del periodismo de Estado, negamos rotundamente que Arturo Duque Alvarado milite o participe en cualquiera de las formas de organización de nuestro ERPI y que tan peligroso arsenal decomisado sea de nuestra propiedad.
Es sabido por nuestro pueblo y también por los órganos contrainsurgentes coludidos con el narcotráfico de presencia insurgente de nuestra estructura revolucionaria en la región de la tierra caliente y es algo común que se detengan a muchas personas con cualquier tipo de arma (lo cual es muy común en esta violenta región) para que de inmediato se les cuelgue el Sambenito de “guerrilleros” para luego someter a los detenidos y sus familias a vulgares extorsiones y en algunos casos el compromiso de que los liberen a cambio de que colaboren como informantes del ejercito y la policía. Los compañeros responsables en Tierra Caliente informan que el joven Arturo Duque Alvarado no es parte de nuestra estructura revolucionaria y que de buena fuente se sabe que la ropa y armas presentadas ante los medios no son sino “pruebas sembradas” para inculpar a varias personas. Es decir: el material “bélico” no es propiedad del ERPI.
Es sabido que no vivimos en el país de los sueños de Felipe Calderón –y anteriormente de Vicente Fox– que han buscado dar golpes espectaculares, sobretodo en el ánimo de nuestro Pueblo, al publicar detenciones en algunos casos de delincuentes comunes y en otros de evidente abuso de autoridad y violación de derechos fundamentales, queriendo hacer creer que sus detenidos son miembros de las organizaciones revolucionarias y para “persuadir” –al pueblo– de no organizarse y ejercer su derecho a la autodefensa integral ante el ataque impune de los poderes fácticos en contra de nuestro país.
Sabemos también que el Estado quiere demostrar el control que no tiene con el fin de recibir más dólares de las Transnacionales y del gobierno de Estados Unidos de América, EUA, sus verdaderos jefes, en el contexto de la Alianza para la Seguridad y Prosperidad de América del Norte, ASPAN y su engendro el “Plan México”. Además buscan que la propuesta de ley panista de (espionaje) seguridad y justicia desaparezca las garantías individuales y los derechos de organización y manifestación de nuestro pueblo.
En el hecho que nos ocupa, la prensa honesta y alternativa sigue relatando el clima de hostigamiento a las actividades diarias de los habitantes (ya no sólo de la región de Tierra Caliente, sino en todo el estado de Guerrero y en general en el país, con énfasis en el sur-sureste), por grupos mixtos de “seguridad” en los que participan AFI (PFP), PIM y policías municipales con la coordinación y complicidad del Ejército mexicano, demostrando nuevamente que junto a Felipe Calderón, tanto Zeferino Torreblanca como los partidos políticos (subordinados exclusivamente a sus intereses particulares) crean un clima de impunidad a conveniencia.
Dicha campaña de terror del Estado es producto del reconocimiento de que el pueblo organizado avanza, decide por él mismo y defiende sus derechos, sus recursos y sus proyectos con lo que, paso a paso ejerce su soberanía efectiva. Una muestra patente de ello es el secuestro y desaparición forzada de los compañeros del EPR Edmundo Reyes Amaya y Gabriel Alberto Cruz Sánchez, los cuales seguramente siguen cautivos como prisioneros de guerra en instalaciones militares del narcoestado mexicano.
Como hemos venido actuando, seguiremos respetando la dinámica y el desarrollo organizativo del pueblo de México y nos solidarizamos con particulares como el caso del joven Duque Alvarado, luchadores y luchadoras sociales, ONG y organizaciones hermanas que sean víctimas del “Estado de Derecho” mexicano, pero además saludamos las victorias que obtienen en sus luchas contra el poder del Estado, el capital financiero, las transnacionales y demás poderes opresores.
CON EL PODER POPULAR
EL PUEBLO UNIDO VENCERÁ
DIRECCIÓN NACIONAL DEL EJÉRCITO REVOLUCIONARIO DEL PUEBLO INSURGENTE
ERPI
República Mexicana a los 6 días de Septiembre de 2007.