A los organizadores y convocantes de la conmemoración del “Día del Joven combatiente” en Chile
Al pueblo chileno, sus organizaciones políticas, sociales y culturales de carácter popular, democrático, progresista, revolucionario, libertario y socialista
Hermanos y hermanas, compañeros y compañeras:
El 21 de diciembre de 1907, alrededor de las 2 de la tarde, poco antes de la luctuosa matanza de la Escuela Santa María de Iquique en Chile, el cónsul peruano en la ciudad, señor Forero, se dirigió a los más de 1200 obreros peruanos y familiares presentes. Frescas aún las heridas de la guerra del Pacífico, les dijo que los chilenos eran sus enemigos, que debían salir de la escuela para no perecer a manos del ejército que la rodeaba. Los obreros peruanos le contestaron: “con los hermanos chilenos hemos venido, con ellos hemos luchado y si toca morir con ellos, pues moriremos”. Lo cual cumplieron.
Desde antes, en la revolución de Túpac Amaru y las luchas de independencia, y desde entonces hasta hoy, innumerables hijos de nuestros pueblos han sostenido este deber de solidaridad y construcción de nuestra irrenunciable Patria Grande continental. Prueba de ello, son los hermanos chilenos que aún hoy comparten esperanzas y sacrificios en las cárceles peruanas, negra herencia de la dictadura fujimontesinista impresentablemente sostenida por el actual mal gobierno peruano.
En esa tradición y en ese deber, reciban nuestro más entrañable saludo y enhorabuena por esta nueva jornada de conmemoración y lucha que ustedes preparan. “El día del joven combatiente” donde recuerdan y actualizan el ejemplo de los inmortales hermanos Vergara Toledo, es también nuestro día, y sepan, hermanos, que los Vergara Toledo viven y marchan también, de muchas formas, en nuestras filas.
Nuestra rebeldía no ha envejecido; como tampoco envejecen los que, en la lucha por un mundo mejor, entregan lo más preciado. Las ansias de liberación de los pueblos renuevan su juventud pues se nutren de los sueños sin fronteras que crecen en las poblaciones, barriadas, aulas, campos.
Ellos son hijos de un pueblo que ha sabido y sabe producir héroes, hombres y mujeres dignos, que saben amar a sus pueblos, dolerse agazapados con él, y levantarse dignos y fieros para conseguir la libertad y la justicia. Un pueblo que ha entregado figuras tan enormes y que no paran de crecer, como las del presidente mártir Salvador Allende, las del secretario general de la esperanza Miguel Enriquez, las de las combatientes del futuro Araceli Romo y Cecilia Magni, las de los inmortales hijos de un pueblo: Rafael, Eduardo y Pablo Vergara Toledo.
Hoy, los viejos y nuevos administradores de la noche neoliberal y genocida en Perú, golpean arteramente a nuestro pueblo, a nuestros luchadores sociales. Decenas de campesinos, trabajadores y jóvenes, han sido asesinados en represiones desatadas contra la legítima protesta popular, tan solo en año y medio del actual gobierno.
En medio de estas luchas, saber y compartir las de ustedes, nos revitaliza y nos renuevas las esperanzas y las fuerzas.
Entonces, adelante queridos hermanos y hermanas, con todas las fuerzas de la historia, con el ejemplo de nuestro comandante obrero Néstor Cerpa Cartolini, el de los inmortales hermanos Vergara Toledo y de todos y todas nuestros mártires y héroes,
Viva el día del Joven Combatiente
¡Todos/as somos los hermanos Vergara Toledo!
!Sin luchas no hay victorias!
¡CON LAS MASAS Y LAS ARMAS… PATRIA O MUERTE, VENCEREMOS!