El mundo capitalista tambalea con la recesión de EEUU

EL MUNDO CAPITALISTA TAMBALEA CON LA RECESION DE EEUU

La crisis que va camino a la recesión económica, convulsiona a los Estados Unidos lo que amenaza con arrastrar consigo a las grandes potencias imperialistas y a los países dependientes y atrasados, resquebrajando aún más al mundo capitalista, responsable de la miseria y la hambruna global.

Desde julio del año pasado, cuando reventará la denominada “burbuja inmobiliaria” que ha llevado a enormes pérdidas económicas de una serie de grandes y pequeños bancos de Estados Unidos y de Europa, la crisis se ha profundizado hasta convertirse en una nueva crisis financiera, pues la alta morosidad de las personas que adquirieron créditos de alto riesgo (subprime) para vivienda, ha conducido a la iliquidez y restricción de los créditos, a la caída de los indicadores de las distintas bolsas de valores de los principales países capitalistas, a lo que se suma, el encarecimiento de las materias primas, principalmente del petróleo que ha superado ya la barrera de los 100 dólares el barril, así como la imparable desvalorización del dólar y el aumento de los precios de los metales apreciados como el oro, platino, plata, etc.

En el objetivo iluso de contener la quiebra de los bancos, aseguradoras y empresas, la Reserva Federal (FED –siglas en inglés) banco central de EE. UU se ha visto obligada a bajar las tasas de interés pasando en este año desde 4.25 a 3%, así mismo, Bush envío al Congreso de su país un paquete de reducciones tributarias por el monto de más de 150 millones de dólares. Además el gobierno yanqui, tratando de buscar otros caminos de solución a su crisis, ha decidido invertir más recursos para mantener la agresión y ocupación de los territorios de Afganistán e Iraq, amenazando a otros países, ricos en fuentes energéticas, con someterlos bajo la denominadas “guerras preventivas”.

Esta crisis de los EE. UU. Que no se resuelve ni resolverá desde el punto de vista estratégico, va camino a la recesión, lo que se expresará, como se esta viviendo ya, a un mayor estancamiento de la economía yanqui, con expresiones entre otros aspectos, de aumento del desempleo y de la inflación.

Esta situación se ha irradiado como reguero de pólvora por Europa, donde muchos bancos compraron las deudas de algunas instituciones financieras, buscando entrar en el reparto de la torta en el mundo de la especulación, pero la tortilla se les volteó y hoy sufren grandes pérdidas, esto ocurre, principalmente, en España, Gran Bretaña, Italia, Francia y Alemania, ésta última afectada por las denuncias de graves fraudes fiscales de bancos y empresas transnacionales.

¿POR QUÉ ESTA NUEVA RECESION?

Las enormes cantidades de recursos monetarios que ha dejado el aumento de las materias primas, sobretodo, de los elevados precios del petróleo, fueron a parar a los bancos de los países imperialistas, los mismos que buscaron colocarlos a crédito para continuar con la especulación y la explotación de los trabajadores y los pueblos. Pues como se conoce, el capital sin movimiento se desvaloriza y se pierde, sólo se reproduce si está en circulación, extrayendo plusvalía de los trabajadores esclavizados por los monopolios internacionales, por ello, entregaron créditos sin mayores garantías, a diestra y siniestra, (sub prime o denominados “basura”), lo que a la postre no se pudieron cancelar por los sucesivos aumentos de las tasas de interés y la paulatina pérdida adquisitiva de los ingresos de los trabajadores y de todos aquellos que adquirieron viviendas en esas condiciones.

Hoy frente a la disminución de la demanda (entiéndase del consumo), están alarmados y tomando medidas económicas que a la larga no hacen otra cosa que preparar y alentar nuevas crisis, que seguirán manifestándose como financieras (dinero, crédito, acciones, etc.), pero que en esencia tienen su raíz en la propiedad privada capitalista, porque sobre esa base se organiza la producción de manera anárquica, llegando a la sobreproducción relativa de mercancías que no pueden ser adquiridas por la cada vez mayor insolvencia de la demanda de los trabajadores y pobladores en general.

DE LA TOS A LA NEUMONIA GENERAL

Esa pestilente corriente de aire que sacude a la economía de EE. UU. y de otros países imperialistas, llegará a otras economías como gran tempestad, que afectará como siempre a los trabajadores y pobres del mundo. China e India y otros países que han dado en llamar “emergentes” sufrirán las consecuencias de esta crisis, de igual manera las economías de América Latina y el Caribe.

Por ejemplo, Centroamérica, México, Colombia, Ecuador, y otros, sentirán los efectos, cuando se reduzcan sus exportaciones como consecuencia de la poca demanda norteamericana, de la que dependen en tal grado, serán sacudidos también por la caída de las acciones en el mundo bursátil, por la desvalorización del dólar (particularmente, Ecuador, El Salvador, Panamá).

Esa crisis que ha devenido en recesión será como un remolino, atrapara a toda la economía mundial o global, como gusta llamar a algunos analistas serviles a los imperialistas y burgueses criollos. La misma traerá mayores angustias, desesperanzas, hambre, miseria y epidemia social para las masas populares.

ES UN AXIOMA QUE LA CRISIS SOLO SE RESOLVERA CON LA REVOLUCION SOCIAL

Primero, es justo señalar que las tesis de Lenin sobre el carácter de la época están vigentes. Vivimos la etapa del imperialismo y de las revoluciones sociales. Es un acierto por tanto, afirmar que la crisis del imperialismo sólo puede ser resuelta por la revolución social del proletariado. ESTA TAREA ES INAPLAZABLE, ESTA AL ORDEN DEL DIA, NO ESPERA MAS DILATORIAS Y MOMENTOS.

Sin embargo, es menester señalar, que por más crisis y profunda que ésta sean no se resolverá de por si, por anhelos o decretos. Sólo será cierta y efectiva tal solución, cuando los trabajadores y los pueblos eleven su conciencia antiimperialista y anticapitalista, se organicen en su partido de vanguardia, preparen sus fuerzas para la lucha y avancen en la construcción de su ejército revolucionario, para asumir la honrosa tarea de derrotar a los responsables y beneficiarios de la crisis, en otras palabras, de liquidar el sistema capitalista, que es hoy el mundo de la depredación, de la explotación y la desigualdad social y de todo tipo, para sobre sus ruinas iniciar la edificación de una vida nueva, que será posible con la instauración de la sociedad socialista, que nos brindará trabajo para todos, vivienda, educación salubridad, bienestar y felicidad para hombres y mujeres del planeta.
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Artículo de Semillero Insurgente, revista de los Grupos de Combatientes Populares