Compañeras ELENAS, hoy desde esta fuerza guerrillera, las abrazo a todas para unirme a esta conmemoración que nos trae al presente el heroísmo de la mujer luchadora y trabajadora. Esa batalla, que un día como hoy, se dio por parte de un puñado de trabajadoras en EE.UU, se ha seguido reproduciendo en todos los confines de la tierra y de mil maneras, lo que engrandece la causa libertaria y los ideales de justicia y de igualdad.
Colombia atestigua el heroísmo de las mujeres en todas las etapas de nuestra historia. La vida del ELN está llena de ejemplos revolucionarios, protagonizados por las compañeras que desde la ciudad y el campo, han nutrido las filas de esta organización revolucionaria. Su esfuerzo, su firmeza, su valentía y entrega a la lucha insurgente han sido y seguirán siendo definitivas para llegar a la meta.
Hoy, cuando el gobierno de extrema derecha, encabezado por Uribe, sigue escalando la guerra y sacrificando al pueblo y los sectores medios de Colombia, tiene mucho más valor el modesto esfuerzo de cada luchador, de cada luchadora.
Vamos entonces con más coraje y decisión, para asumir las tareas que el momento nos exige, emulando a hombres y mujeres en el compromiso, para tener en cuenta que a la lucha hemos de entregarnos hasta las últimas consecuencias.
Compañeras en la guerrilla rural y urbana, compañeras dedicadas al trabajo con las masas, compañeras, presas, compañeras que por circunstancias particulares de la vida o el trabajo están en el exterior, hagan todas de su lugar de trabajo la mejor trinchera para seguir una pelea que mantiene nuestras morales en alto.
Recuerden siempre que de los momentos difíciles se salta a los grandes desarrollos, así es la lucha de las sociedades. No hay duda de que el sistema capitalista es esencialmente machista, y tampoco que el influjo del sistema que combatimos nos permea a hombres y mujeres, imprimiendo esa conducta que, como revolucionarios, debemos reprochar y transformar.
No se trata entonces de distanciarnos o dividirnos por los problemas que el machismo produce, aquí debe imperar la madures para resolver las incomodidades y afecciones que esto nos genere, pues precisamente ser revolucionario implica dar la batalla a las desviaciones y vicios personales de un sistema des-humanizante, como parte de la lucha por el nuevo sistema socialista a construir.
Sigamos la lucha por superar esas desavenencias que aun existen entre nosotros y fortalezcámonos para enfrentar a los enemigos del pueblo.
Que esta fecha traiga nuevas fuerzas para reafirmar la sensibilidad por tantas y tantos humildes que en Colombia y el mudo padecen hoy las terribles injusticias a que los someten los poderosos. En esta lucha nuestra la mujer reivindica su esencia; su amor, su ternura, su sensibilidad, su belleza física y espiritual, se seguirán cultivando y profundizando en su ser de revolucionarias.
Motivados en este día y unidos en la causa popular y revolucionaria, ELENAS y ELENOS, Cumpliremos.
Marzo 8 de 2009
Primer comandante del ELN
Nicolás Rodríguez Bautista