Comunicado Nº 17

Comunicado Nº 17


…Los ricos ya nos echaron a la policía del estado y de seguridad;
ellos también están temblando porque se les ha llegado la hora…
(Parte del discurso pronunciado por el Prof. Lucio Cabañas, en la plaza
central de Atoyac, la mañana del 18 de mayo de 1967).


Al pueblo de México.
A los pueblos del mundo.

La arenga que el Comandante y Maestro Lucio Cabañas Barrientos pronunciara la mañana del 18 de mayo de 1967 hace temblar todavía a los poderosos, al tiempo que nuevas voces dignas, ciertas y rebeldes vuelven a resonar en los caminos del sur y otros rincones de la patria, llamando a redoblar la lucha iniciada por nuestro Comandante.

A 42 años de la masacre perpetrada en la plaza central de Atoyac de Álvarez, Gro., esta reactivación de la autodefensa popular, pacífica y armada, nos permite afirmar que en el Estado de Guerrero siguen reinando parecidas -y hasta peores- condiciones de represión, impunidad e injusticia, como aquellas que dieran lugar al levantamiento del Prof. Lucio Cabañas Barrientos y al accionar del Partido de los Pobres.

O sea, en 42 años la situación política, económica y social en el estado de Guerrero ha cambiado muy poco, salvo que hoy son los perredistas, con Zeferino Torreblanca a la cabeza, quienes dirigen y administran las corrompidas instituciones estatales, en franca alianza con el figueroismo y con los cárteles regionales de la droga, sean estos “pelones”, “zetas” o de “la familia michoacana”.

Lo no tan nuevo en el estado de Guerrero es que dichos cárteles de la droga, amparados en la profunda descomposición de la actual clase gobernante, controlan numerosos municipios en las siete regiones del estado mediante la compra de “plazas” y la inyección de dinero sucio en las campañas político-electorales; controlan con armas y sicarios -incluso de las propias corporaciones policiacas- el territorio municipal o regional, previamente comprado; ayudan a formar los grupos paramilitares con los que el gobierno estatal persigue a los luchadores sociales –como lo constata el hostigamiento desplegado de manera permanente contra los ecologistas de Petatlán y Tierra Caliente, los campesinos de Costa Grande, en Atoyac y Coyuca de Benítez, los indígenas de La Montaña, en Ometepec, Xochistlahuaca, etc.–; establecen retenes narco-militares donde detienen y asesinan, realizan “levantones” contra gente inocente, amenazan a quienes cuestionan la política represiva y las prácticas inhumanas del gobierno; apoyan la política de terror que instrumenta Zeferino Torreblanca contra la lucha social, como lo muestra la reciente detención y desaparición del perredista Álvaro Rosas Martínez, en Petatlán, a quien pretenden involucrar con un ajuste de cuentas entre bandas de narcotraficantes; o como lo muestra el hostigamiento y las amenazas de muerte contra campesinos de Xochipala, por defender sus tierras de la voracidad de compañías mineras como la Gold Corp; o como lo muestra la detención del dirigente de la colonia ampliación Puerto Marques Daniel Morales que defiende un pedazo de tierra para vivir dignamente, y que los grandes consorcios turísticos pretenden acaparar, etc., etc., todo esto en el contexto de una falsa lucha del gobierno contra el crimen organizado.

Al amparo del poder federal, el narco-gobierno estatal está articulando una nueva guerra sucia contra el pueblo, bajo una lógica claramente contrainsurgente. De ello dan pruebas las permanentes violaciones a los derechos humanos como desapariciones forzadas, asesinatos, torturas, violaciones sexuales y detenciones arbitrarias. Sin embargo, la vieja guardia priista y el gobierno autoritario estatal, se rasgan las vestiduras ante el señalamiento hecho por los compañeros del Ejército Revolucionario del Pueblo Insurgente (ERPI), de que en el país y particularmente en Guerrero, la nueva clase en el poder, con “el señor Z” Torreblanca a la cabeza, protege a capos de la droga: como Rogaciano Alba en Petatlan, el “Yei” en Atoyac, “la Barbie” en Acapulco, los Montufar en Tierra Caliente, los Figueroa en la zona norte, los hermanos Aguirre en Ometepec, etc., convirtiéndose no sólo en cómplices, sino en autores materiales e intelectuales de los crímenes que a diario cometen contra el pueblo.

En esta lógica del capitalismo salvaje, la clase gobernante se empeña en negar lo innegable. Niega que la crisis económica que enfrenta el pueblo trabajador afecte los bolsillos de los trabajadores, llegando al absurdo de plantear de que si las empresas están siendo afectadas, también el salario mínimo se reduzca; niega que el virus de la influenza A-H1N1 que se desarrolló entre enero y marzo –según la revista Sciencie-, sea información que las autoridades federales ya sabían, y que éstas esperaron a que Barack Obama saliera del país para dar la alerta sanitaria; niega la cantidad exacta de muertos causados por dicho virus de influenza; niega las declaraciones del ex presidente Miguel De la Madrid -que ¡oh sorpresa¡ de un día para otro padece demencia senil- en el sentido de que los Salinas son unos corruptos, ladrones y narcotraficantes; niega que Genaro García Luna sea protector de algún cartel, cuando la propia SEDENA entregó un informe detallado de las actividades delictivas del susodicho al finado Camilo Mouriño, antes de ser nombrado secretario de Seguridad Pública por Calderón; niega el complot orquestado contra Manuel López Obrador para impedir con todos los recursos del estado su triunfo en las urnas; niega la responsabilidad del Estado mexicano como autor material e intelectual de los cientos de detenidos-desaparecidos de la guerra sucia de los 60 y 70, y de las masacres cometidas a lo largo de las ultimas 4 décadas, etc., etc.,.

Frente a todos estos crímenes y atrocidades cometidos contra el pueblo mexicano a lo largo de su historia, ¿qué no van a negar -y seguir negando- los gobernantes corruptos, los oligarcas financieros, los empresarios derechistas, los jefes policiacos y militares represivos, los capos de la droga -que aprovechan la crisis económicas y de salud para seguir enriqueciéndose- bajo la bendición del clero venal?

A pesar del tiempo, ante este nuevo –y viejo- estado cosas, consideramos que los esfuerzos por la transformación radical del país, iniciada por el Comandante y Profesor Lucio Cabañas, siguen siendo legítimos y necesarios.

Hoy podemos afirmar que el pueblo mexicano y sus diversas organizaciones democráticas, pacíficas y armadas, continuamos en el esfuerzo por consolidar los cimientos de una nueva sociedad humana, digna y justa, fundada en principios éticos y políticos que fundamenten el respeto y el reconocimiento a la vida, la dignidad y el trabajo de todos, independientemente de la trinchera donde se luche. Sea la trinchera familiar, escolar, fabril, agraria, de género, étnica, cultural, pacífica, armada, etc., lo fundamental es contribuir a la justa solución de los diversos problemas que la realidad nos pone enfrente, fortalecer nuevas relaciones sociales que pongan en cuestión las prácticas y relaciones capitalistas que decimos combatir y que lamentablemente acabamos reproduciendo, contribuir con prácticas liberadoras y reproducirlas de manera que enriquezcan nuestro conocimiento de la realidad y aporten en la solución de la lucha contra la dominación capitalista, y en pos de la construcción, desde abajo, de una nueva patria socialista, democrática, libre y soberana.

Quienes no aprendamos de la historia y de la experiencia escrita -con fuego, coraje y sangre- por nuestros viejos abuelos y abuelas, padres y madres, hermanos y hermanas; quienes no reflexionemos sobre los resultados de nuestra propia actividad en la construcción de una nueva comunidad humana, digna y justa, estaremos condenados al fracaso.

Hoy, 18 de mayo del 2009, los militantes y simpatizantes del Comando Popular Revolucionario La Patria es Primero (CPR-LPEP), refrendamos nuestro compromiso de continuar la lucha revolucionaria armada, retomando el legado político y moral que nos dejo el Comandante Lucio Cabañas Barrientos.

¡¡CONTRA EL NEOLIBERALISMO, EL PODER POPULAR!!
¡¡POR EL SOCIALISMO: VIVIR, LUCHAR, VENCER!!
¡¡SER PUEBLO, HACER PUEBLO, ESTAR CON EL PUEBLO!!

COMANDO POPULAR REVOLUCIONARIO LA PATRIA ES PRIMERO
CPR–LPEP

TENDENCIA DEMOCRÁTICA REVOLUCIONARIA–EJÉRCITO DEL PUEBLO
TDR–EP

Campamento revolucionario, Estado de Guerrero, a 17 de mayo de 2009