Un Comando Especial del Frente 48 de las FARC-EP ajustició a Julio Alexander Marean Ortiz, conocido como Olvani, el 3 de mayo a las 2 de la mañana del presente mes, en el casco urbano de Puerto Asís y en las propias narices del Ejército, quien permanentemente lo protegía.
Olvani fue un activo comandante guerrillero muy conocido en la región, pero su falta de solidez ideológica y revolucionaria lo llevó a traicionar la noble causa popular, pasándose a las filas del Ejército paramilitar de Uribe Vélez.
Con gran rapidez aprendió a descuartizar con motosierra, a cortar cabeza y destripar con la peinilla, lo mismo que a desfigurar con ácido sulfúrico el rostro de sus inocentes e indefensas víctimas, así como lo hizo con el ciudadano Jairo Tumaco, en el área de El Empalme.
Olvani se convirtió en un pájaro de mal agüero para la población: su solo nombre causaba pánico y su presencia anunciaba desgracias.
Muchas veces llegó, acompañado del Ejército, a humildes casas campesinas a cortar la mano conocida que un día se extendió para darle agua de beber, y a segar la vida, del que también un día le dio algo de comer.
El enemigo lo cuidaba como una reliquia y lo valoraba como un tesoro. ¡Lo tenía para mostrar! Enviando el falso mensaje de que es posible traicionar al pueblo y recibir como premio la impunidad.
¡Ya el Traidor pagó su traición! Los pobladores de Piñuña Negro, Piñuña Blanco, Puerto Asís, La Hormiga, Teteyé, Puerto Ospina, El Empalme, Pueblo Nuevo, Barrancas, Mestanza, y demás, ya pueden estar tranquilos. ¡Olvani el traídor, no les causará más daño! ¡La justicia popular es inexorable. Tarde o temprano llegará!