Colección
Archivo digital
Tipo
Documento
País
Organizaciones
Fecha
2009-05-28
Categoría
Documento Público
Aclaracion pública a casi una semana de la muerte de Mauricio
ACLARACIÓN PÚBLICA A CASI UNA SEMANA DE LA MUERTE DE MAURICIO
Santiago. Jueves 28 de mayo, 2009.
A horas de cumplir una semana de la muerte del compa Mauricio Morales, las organizaciones firmantes hemos acordado dirigir a toda la población la presente Aclaración, para hacer público nuestro homenaje a su vida, a sus convicciones, a sus principios.
La muerte de Mauricio no ha sido dudosa, no, todos sabemos las circunstancias. Le encontró en momentos en que se aprontaba a bombardear la factoría clonadora de carceleros, o Escuela de Gendarmería, como reza su letrero. Una acción loable, que esta vez apuntó sus fuerzas contra el Estado y su condenable atribución de encarcelar seres humanos desechados por sus leyes esclavistas. Una acción fundada en ideales de libertad que no callan, que se sacuden de la inmovilidad a la que somos condenados desde nuestro nacimiento. Ideales por los que entregó su vida, mas no sus sueños.
Esperamos que la población comprenda el acto realizado por Mauricio. Que reflexione siguiendo sus principios de libertad dormidos (o vendidos) en alguna parte de sus vidas, que centre su visión en la mirada del joven que expone su vida enfrentando a los defensores de este orden dirigido por aquellos que viven del trabajo ajeno, aterrorizando a la población con políticas asesinas y declaraciones gansteriles que justifican actos matonescos de sus pandillas uniformadas. Que la población siga sus intuiciones acerca de quienes son los verdaderos culpables del peligroso y valiente acto de Mauricio. Que no se trague las cucharadas desinformativas de discursos dirigidos desde las baterías comunicacionales de la institucionalidad y el silencio cómplice de la izquierda estatista. Que la población no justifique ni se sume a la oleada represiva que se cierne sobre todo aquel que comprende y denuncia esta dictadura empresarial que nos afecta.
Los personajes que por estos días han exteriorizado la visión del gobierno de la PS Michelle Bachelet no ocultan su satisfacción y alegría por la muerte de Mauricio. Aciertan a enmarcarla dentro de acciones directas anti-institucionales realizadas por múltiples organizaciones anarquistas. Pero apuestan a la confusión pública asegurando que estas se iniciarían en el año 2004, que a la fecha se contabilizarían 96 de estas acciones, que Mauricio formaba parte de los 20 “sospechosos” definidos por las policías, que su muerte permitirá “poner fin” a esta seguidilla de bombardeos, que la “investigación va por buen camino”, que sus pesquisas han logrando bajar la periodicidad de los “malvados” anarquistas que “utilizan” al movimiento Okupa, entre otras bravatas que llenarían las posibilidades de análisis de las escuelas de psiquiatría.
Respondemos diciendo que los directores de esta institucionalidad liderada por la hija de un militar asesinado por sus leales camaradas, exponen un absoluto despilfarro de oxígeno basado en severos e irreparables episodios de amnesia histórica y delirios crónicos de omnipotencia circense.
Primero que todo, al declarar una cuenta oficial de 96 atentados desde 2004 a la fecha, evidencian la peligrosa mezcla de un olvido limítrofe de la básica operación matemática de sumar con la utilización de criterios para definir lo que sería un atentado contra la autoridad dignos de cualquier pseudoanálisis realizado por comentaristas deportivos, analistas internacionales de tv o “catedráticos” fascistas de ocasión (ejemplos Solabarrieta, Buitrago y esos sociólogos charlatanes que no destacan ni para recordar sus nombres, respectivamente). Asumimos que estas “genialidades”, en su afán de infundir terror entre la población pobre, cuentan las explosiones de fuegos artificiales de años nuevos y los petardos que deleitan los deseos sónicos de las barras de fútbol. Para que la investigación acierte en algo debieran contar cada acción realizada desde que la humanidad intenta sacudirse de las mafias directivas que hoy gobiernan, o si eso es pedir demasiado esfuerzo intelectual, solo contabilizar los estallidos sucedidos en estos 19 años de falsa-democracia. Pero todos sabemos que no les alcanza.
En segundo lugar, declaramos que el gobierno miente descaradamente cuando afirma con tufo triunfalista que Mauricio era investigado desde antes de su muerte. El Estado cuenta con aparatos de “inteligencia” que disponen de enormes sumas de dinero y recursos técnicos para intervenir las comunicaciones de todos (teléfonos, correos electrónicos, bandas privadas, etc.), comprar a las policías equipos militares de última generación tecnológica, utilizar medios de comunicación para satanizan todo reclamo social, usar vehículos y personal legal e ilegal para hacer seguimientos a cualquiera que tenga “cara de sospechoso”, desplegar fuerzas represivas para militarizar regiones completas como es el caso del territorio mapuche, entre otros recursos propios de la asociación ilícita terrorista llamada Estado. Con toda estos recursos, con todo este poder, ¿qué tienen?, nada!. Hoy los vemos desesperados cargando una inoperancia que en el terreno de la guerra social solo se llama DERROTA. A principios de este año anunciaron con orgullo que en 60 días nos tendrían encarcelados, pues bien, nos reímos en sus caras de tal delirio y lo seguimos haciendo. Todo lo que tienen hasta ahora se lo han topado fortuitamente y hasta el más retrasado aspirante a paco lo sabe. Nos pueden ver y filmar todo lo que quieran, pero lo que han podido encontrar hasta ahora significa menos que cero mérito para sus labores “profesionales”. Asesinos, ladrones, torturadores y además giles. Aseguramos que Mauricio no estaba siendo investigado por el Estado y que en el caso de ser cierto este supuesto monitoreo policial, surgen dos líneas que debiesen llamar la atención de todos, una es que tuvieron nula capacidad de anticiparse a los hechos y la otra es que lo dejaron actuar para conocer sus redes de contacto. En el primer caso se evidenciaría la inoperancia estatal y el segundo solo confirmaría la profundidad patológica de esta inoperancia tras ver los fallidos intentos de encontrar a los compas de Mauricio después su muerte. Para ambos casos no hay otra conclusión que el Estado y sus defensores se encuentran absolutamente sobrepasados, derrotados.
Para ocultar estos hechos, durante estos últimos años los fiscales faranduleros no han podido hacer más que atacarnos a quienes desechamos en la práctica el modo de vida capitalista, recurriendo a un terrorismo propio de pinochet, afirmándose en los delirios de un desconocido payaso que la prensa identifica como Gustavo Fuentes. Han vendido mentiras y hoy festinan sobre el cadáver de un compañero, hostilizando la casa de su madre y las de sus amigos y preparado una fallida agresión sin límites el día del funeral de Mauricio. Esto lo vimos en el cementerio de San Bernardo, cercado por policía militarizada y prensa policíaca, en una demostración del odio terrorista que el Estado (y sus dueños empresarios) sienten hacia todo lo que signifique o busque la libertad de todo y todos, en una demostración más del miedo que les provocamos.
En este momento el Estado elabora sus golpes dictatoriales, pero deben saber que no nos amedrentamos, que nuestro accionar no se ha detenido ni se detendrá, que el destello de Mauricio llegará a quienes estaba destinado, que la libertad no muere para los que no tenemos amo.
Enviamos un mensaje a toda la población a raíz de los últimos acontecimientos derivados de la investigación policial que nos pretende identificar. El lunes pasado “encontraron” una munición de mortero instalada en Santiago (Conchalí) que produjo evidente temor entre los residentes de esta comuna obrera. También “detectaron” un supuesto explosivo en Viña del Mar. Ayer miércoles detuvieron a un joven y hablaron directamente de un apoyo de ex militantes del desaparecido movimiento Lautaro. Ante estos hechos declaramos responsablemente que asistimos al inicio de una serie de montajes policíacos para sembrar el terror y rechazo de pobladores pobres hacia los anarquistas, en un intento desesperado por validar esta cacería de brujas que busca justificar socialmente la ciega violencia estatal que se desencadena. Esto lo hemos visto en el pasado, es parte de las técnicas que utilizan los Estados para justificar los órdenes asesinos que pretenden encerrar a quienes los padecemos, sobreviviendo en una eterna crisis económica, con temor a reclamar las injusticias cotidianas, intentando aniquilar cualquier ímpetu de libertad. Reiteramos que nuestros enemigos son los dueños y defensores de este orden asesino que nos enseña su desprecio convirtiéndonos en esclavos asalariados de sus propios intereses, que cobra con sangre la búsqueda de un presente y futuro digno para todos. Solo ellos son nuestros objetivos. Desde aquí les decimos que pagarán cada gota de sangre que ha brotado de los cuerpos de los explotados. Cada gota.
Saludamos la vida de Mauricio Morales. Saludamos a su familia. Saludamos a los compas que se oponen activamente al Estado y el capital. Saludamos a todos quienes comprenden el significado de las acciones contra toda autoridad. Los saludamos en este momento, desde nuestro más profundo amor por la Libertad.
DESPECIAMOS EL ESTADO DE ESCLAVITUD Y LO ENFRENTAMOS HASTA NUESTRO ÚLTIMO SEGUNDO DE VIDA!
VIVA LA ANARQUÍA!!
Federación Insurreccionalista
Grupos de Ataque Antiautoritario
Miguel Arcángel Roscigna
Tamayo Gavilán
Federación Revuelta 14F - Brigada Gaetano BresciF
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Fuente: Hommodolars.org
Santiago. Jueves 28 de mayo, 2009.
A horas de cumplir una semana de la muerte del compa Mauricio Morales, las organizaciones firmantes hemos acordado dirigir a toda la población la presente Aclaración, para hacer público nuestro homenaje a su vida, a sus convicciones, a sus principios.
La muerte de Mauricio no ha sido dudosa, no, todos sabemos las circunstancias. Le encontró en momentos en que se aprontaba a bombardear la factoría clonadora de carceleros, o Escuela de Gendarmería, como reza su letrero. Una acción loable, que esta vez apuntó sus fuerzas contra el Estado y su condenable atribución de encarcelar seres humanos desechados por sus leyes esclavistas. Una acción fundada en ideales de libertad que no callan, que se sacuden de la inmovilidad a la que somos condenados desde nuestro nacimiento. Ideales por los que entregó su vida, mas no sus sueños.
Esperamos que la población comprenda el acto realizado por Mauricio. Que reflexione siguiendo sus principios de libertad dormidos (o vendidos) en alguna parte de sus vidas, que centre su visión en la mirada del joven que expone su vida enfrentando a los defensores de este orden dirigido por aquellos que viven del trabajo ajeno, aterrorizando a la población con políticas asesinas y declaraciones gansteriles que justifican actos matonescos de sus pandillas uniformadas. Que la población siga sus intuiciones acerca de quienes son los verdaderos culpables del peligroso y valiente acto de Mauricio. Que no se trague las cucharadas desinformativas de discursos dirigidos desde las baterías comunicacionales de la institucionalidad y el silencio cómplice de la izquierda estatista. Que la población no justifique ni se sume a la oleada represiva que se cierne sobre todo aquel que comprende y denuncia esta dictadura empresarial que nos afecta.
Los personajes que por estos días han exteriorizado la visión del gobierno de la PS Michelle Bachelet no ocultan su satisfacción y alegría por la muerte de Mauricio. Aciertan a enmarcarla dentro de acciones directas anti-institucionales realizadas por múltiples organizaciones anarquistas. Pero apuestan a la confusión pública asegurando que estas se iniciarían en el año 2004, que a la fecha se contabilizarían 96 de estas acciones, que Mauricio formaba parte de los 20 “sospechosos” definidos por las policías, que su muerte permitirá “poner fin” a esta seguidilla de bombardeos, que la “investigación va por buen camino”, que sus pesquisas han logrando bajar la periodicidad de los “malvados” anarquistas que “utilizan” al movimiento Okupa, entre otras bravatas que llenarían las posibilidades de análisis de las escuelas de psiquiatría.
Respondemos diciendo que los directores de esta institucionalidad liderada por la hija de un militar asesinado por sus leales camaradas, exponen un absoluto despilfarro de oxígeno basado en severos e irreparables episodios de amnesia histórica y delirios crónicos de omnipotencia circense.
Primero que todo, al declarar una cuenta oficial de 96 atentados desde 2004 a la fecha, evidencian la peligrosa mezcla de un olvido limítrofe de la básica operación matemática de sumar con la utilización de criterios para definir lo que sería un atentado contra la autoridad dignos de cualquier pseudoanálisis realizado por comentaristas deportivos, analistas internacionales de tv o “catedráticos” fascistas de ocasión (ejemplos Solabarrieta, Buitrago y esos sociólogos charlatanes que no destacan ni para recordar sus nombres, respectivamente). Asumimos que estas “genialidades”, en su afán de infundir terror entre la población pobre, cuentan las explosiones de fuegos artificiales de años nuevos y los petardos que deleitan los deseos sónicos de las barras de fútbol. Para que la investigación acierte en algo debieran contar cada acción realizada desde que la humanidad intenta sacudirse de las mafias directivas que hoy gobiernan, o si eso es pedir demasiado esfuerzo intelectual, solo contabilizar los estallidos sucedidos en estos 19 años de falsa-democracia. Pero todos sabemos que no les alcanza.
En segundo lugar, declaramos que el gobierno miente descaradamente cuando afirma con tufo triunfalista que Mauricio era investigado desde antes de su muerte. El Estado cuenta con aparatos de “inteligencia” que disponen de enormes sumas de dinero y recursos técnicos para intervenir las comunicaciones de todos (teléfonos, correos electrónicos, bandas privadas, etc.), comprar a las policías equipos militares de última generación tecnológica, utilizar medios de comunicación para satanizan todo reclamo social, usar vehículos y personal legal e ilegal para hacer seguimientos a cualquiera que tenga “cara de sospechoso”, desplegar fuerzas represivas para militarizar regiones completas como es el caso del territorio mapuche, entre otros recursos propios de la asociación ilícita terrorista llamada Estado. Con toda estos recursos, con todo este poder, ¿qué tienen?, nada!. Hoy los vemos desesperados cargando una inoperancia que en el terreno de la guerra social solo se llama DERROTA. A principios de este año anunciaron con orgullo que en 60 días nos tendrían encarcelados, pues bien, nos reímos en sus caras de tal delirio y lo seguimos haciendo. Todo lo que tienen hasta ahora se lo han topado fortuitamente y hasta el más retrasado aspirante a paco lo sabe. Nos pueden ver y filmar todo lo que quieran, pero lo que han podido encontrar hasta ahora significa menos que cero mérito para sus labores “profesionales”. Asesinos, ladrones, torturadores y además giles. Aseguramos que Mauricio no estaba siendo investigado por el Estado y que en el caso de ser cierto este supuesto monitoreo policial, surgen dos líneas que debiesen llamar la atención de todos, una es que tuvieron nula capacidad de anticiparse a los hechos y la otra es que lo dejaron actuar para conocer sus redes de contacto. En el primer caso se evidenciaría la inoperancia estatal y el segundo solo confirmaría la profundidad patológica de esta inoperancia tras ver los fallidos intentos de encontrar a los compas de Mauricio después su muerte. Para ambos casos no hay otra conclusión que el Estado y sus defensores se encuentran absolutamente sobrepasados, derrotados.
Para ocultar estos hechos, durante estos últimos años los fiscales faranduleros no han podido hacer más que atacarnos a quienes desechamos en la práctica el modo de vida capitalista, recurriendo a un terrorismo propio de pinochet, afirmándose en los delirios de un desconocido payaso que la prensa identifica como Gustavo Fuentes. Han vendido mentiras y hoy festinan sobre el cadáver de un compañero, hostilizando la casa de su madre y las de sus amigos y preparado una fallida agresión sin límites el día del funeral de Mauricio. Esto lo vimos en el cementerio de San Bernardo, cercado por policía militarizada y prensa policíaca, en una demostración del odio terrorista que el Estado (y sus dueños empresarios) sienten hacia todo lo que signifique o busque la libertad de todo y todos, en una demostración más del miedo que les provocamos.
En este momento el Estado elabora sus golpes dictatoriales, pero deben saber que no nos amedrentamos, que nuestro accionar no se ha detenido ni se detendrá, que el destello de Mauricio llegará a quienes estaba destinado, que la libertad no muere para los que no tenemos amo.
Enviamos un mensaje a toda la población a raíz de los últimos acontecimientos derivados de la investigación policial que nos pretende identificar. El lunes pasado “encontraron” una munición de mortero instalada en Santiago (Conchalí) que produjo evidente temor entre los residentes de esta comuna obrera. También “detectaron” un supuesto explosivo en Viña del Mar. Ayer miércoles detuvieron a un joven y hablaron directamente de un apoyo de ex militantes del desaparecido movimiento Lautaro. Ante estos hechos declaramos responsablemente que asistimos al inicio de una serie de montajes policíacos para sembrar el terror y rechazo de pobladores pobres hacia los anarquistas, en un intento desesperado por validar esta cacería de brujas que busca justificar socialmente la ciega violencia estatal que se desencadena. Esto lo hemos visto en el pasado, es parte de las técnicas que utilizan los Estados para justificar los órdenes asesinos que pretenden encerrar a quienes los padecemos, sobreviviendo en una eterna crisis económica, con temor a reclamar las injusticias cotidianas, intentando aniquilar cualquier ímpetu de libertad. Reiteramos que nuestros enemigos son los dueños y defensores de este orden asesino que nos enseña su desprecio convirtiéndonos en esclavos asalariados de sus propios intereses, que cobra con sangre la búsqueda de un presente y futuro digno para todos. Solo ellos son nuestros objetivos. Desde aquí les decimos que pagarán cada gota de sangre que ha brotado de los cuerpos de los explotados. Cada gota.
Saludamos la vida de Mauricio Morales. Saludamos a su familia. Saludamos a los compas que se oponen activamente al Estado y el capital. Saludamos a todos quienes comprenden el significado de las acciones contra toda autoridad. Los saludamos en este momento, desde nuestro más profundo amor por la Libertad.
DESPECIAMOS EL ESTADO DE ESCLAVITUD Y LO ENFRENTAMOS HASTA NUESTRO ÚLTIMO SEGUNDO DE VIDA!
VIVA LA ANARQUÍA!!
Federación Insurreccionalista
Grupos de Ataque Antiautoritario
Miguel Arcángel Roscigna
Tamayo Gavilán
Federación Revuelta 14F - Brigada Gaetano BresciF
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Fuente: Hommodolars.org