El día 4 de diciembre hemos castigado la delación que un sereno de la empresa IPAKO hizo contra cuatro compañeros de una organización hermana que se aprestaban a operar en la zona de Ensenada el 2 de noviembre pasado.
Este señor, Fiorentino, sirviente de los intereses capitalistas como integrante de la guardia de IPAKO traicionó la causa del pueblo delatando a cuatro patriotas que se aprestaban a operar en una de tantas acciones por liberarnos de la explotación del hombre por el hombre y de la injusticia de un sistema que solo deja vivir a unos pocos privilegiados.
El pueblo ya está en guerra contra este sistema sostenido por el régimen dictatorial de Mr. Levingston, el ejército y la policía. El pueblo en armas es el único camino que nos queda, el mismo camino del 17 de octubre y de nuestro Comandante el CHE.
Las declaraciones del señor Fiorentino no se ajustan a la verdad, puesto que en ningún momento se le habló de libros ajenos a su ideología: no hacemos terrorismo ideológico sino luchamos por nuestra liberación y, como en este caso, castigamos a los delatores de los patriotas.
Aclaramos también que los compañeros que ocuparon la casa de Fiorentino fueron cuatro y no dos.
No actuamos con violencia por la violencia misma, sino que a ella nos obliga la violencia del régimen que nos oprime a todos.