Contra el cretinismo parlamentario, más guerra popular

CONTRA EL CRETINISMO PARLAMENTARIO MÁS GUERRA POPULAR

En "¡Contra las ilusiones constitucionales y por el Estado de Nueva Democracia!", el Partido dijo:
"SOBRE LAS ELECCIONES. Marx destacó: 'A los oprimidas se les autoriza para decidir una vez cada varios años; ¡qué miembros de la clase opresora han de representarlos y aplastarlos en el parlamento!. Esto es más válido aún tratándose de elecciones para sancionar cartas constitucionales. Así, si las elecciones son el orden regular de renovación de los gobiernos en las dictaduras burguesas de las sociedades capitalistas, incluidas las más democráticas que se pueda imaginar, el medio normal de su funcionamiento político para la preservación y el desarrollo del capitalismo; en los estados terrateniente-burocráticos, como los de América Latina, cuando han cumplido su función de cambio de gobiernos y en los momentos en que más han respetado las normas del sistema demoburgués, las elecciones sólo han sido instrumento de dominio de terratenientes feudales y grandes capitalistas, ya se trate de una periódica renovación, como en Colombia en los últimos años, o del término de un gobierno militar como en Argentina, también en los últimos años, para tomar un ejemplo de los muchos en que es pródiga nuestra América.

En el país fácilmente se comprueba lo dicho. Aun que con importantes interrupciones de los periódicos procesos electorales por gobiernos militares, especialmente interrupciones ligadas, por un lado al desarrollo de la lucha popular y, por otro, a las contradicciones entre terratenientes feudales y gran burguesía y entre la burguesía compradora y la burguesía burocrática y, resaltando que los propios gobiernos militares han servido a implementar elecciones ya sea para regularizar su propia situación, terminar su gobierno o garantizarlas, las elecciones en el Perú han servido para preservar o desarrollar el Estado Peruano, la república formal, la dictadura de terratenientes feudales y grandes burgueses. Así las elecciones han sido, como no podía ser de otro modo dentro del orden social imperante, un instrumento en manos de la burguesía compradora primero y después de la burguesía burocrática. Esto ha sido lo principal en los procesos electorales del estado peruano en este siglo y es lo que ha determinado el carácter de clase de las elecciones en el país.

Estas cuestiones fundamentales nos plantean:

1) El Estado Peruano es terrateniente-burocrático, una dictadura de terratenientes feudales y de grandes burgueses bajo control del imperialismo norteamericano; contra éste, el pueblo lucha por la construcción de un Estado de nueva democracia que requiere la destrucción del viejo orden existente.

2) El Estado Peruano, como todo Estado, se sustenta, defiende y desarrolla utilizando la violencia; frente a ésta el pueblo necesita de la violencia revolucionaria siguiendo el camino de cercar las ciudades desde el campo.

3) Las elecciones son un medio de dominación de terratenientes y grandes burgueses; no son para el pueblo instrumento de transformación ni medio para derrocar el poder de los dominantes, de ahí la justa orientación de usarlas sólo con fines de agitación y propaganda."

Esto dicho en 1978 es plenamente válido; y destaquemos que las elecciones del 80 al 2006 lo han comprobado fehacientemente. Así, dentro de esta función de las elecciones en el Perú, se torna crucial para el imperialismo, la reacción y el revisionismo hoy abiertamente electorero de Gonzalo y los capituladores, las elecciones generales del 2010 se presentan y desenvuelven como defensa del caduco orden existente y presevación del viejo Estado burocrático y terrateniente sometido al imperialismo.

La democracia en el seno del imperialismo yanqui, dirigido por el criminal de guerra Barack Obama (Premio Nobel de la "paz" de los muertos por los bombardeos de sus mercenarios y políticas guerreristas); enviará 30 000 soldados adicionales a Afganistán; además de los 10 000 soldados extra de la OTAN, dirigiendo a más de 150 000 genocidas, y anunció sus planes de robustecer sus guerras de expansión y saqueo en Irak, Colombia, así como apadrinar a sus chumbeques de India, Pakistán, Israel, Colombia y otros perros cancerberos del imperialismo.

La democracia imperialista significa para los pueblos del tercer mundo, miseria, explotación, bombardeos y guerras imperialistas. La respuesta popular es guerra justa de resistencia antiimperialista, de liberación nacional. Así se entiende las encarnizadas acciones de resistencia armada en Irak, al circo electoral que se llevará a cabo en marzo del 2010. Participar en las elecciones burguesas en Irak y Afanistán muestran la evidente naturaleza de ese proceso burgués, quinquenal para prservar este inicuo orden de explotación.

En nuestro país, la contrarrevolución emplea las elecciones y el mecanismo del cretinismo parlamentario para garantizar la exhorbitante plusvalía de las transnacionales mineras, petroleras, financieras e industria bélica que operan en nuestro país.

A partir del 1992, el revisionismo capitulador se manifiesta en su integridad, y hoy degenerados y reinsertados al sistema que preserva el viejo Estado terrateniente burgués, se organizan para fortalecer al régimen constituyendo movimientos y poniendo a su Partido a la cola de los seculares partidos burgueses.

Nuestro pueblo nada ha conseguido por la democracia burguesa-terrateniente; todo lo ha conseguido por medio de su trabajo, organización y lucha armada. Corresponde por lo tanto al militarizado PCP, aniquilar las fuerzas vivas del imperialismo, la reacción y del revisionismo capitulador y electorero de Gonzalo; para instaurar por medio del triunfo de la revolución comunista en el Perú, una sociedad con democracia verdadera.

¡VIVA LA GUERRA POPULAR, DE RESISTENCIA ANTIIMPERIALISTA, PRINCIPALMENTE YANQUI!
¡DESARROLLAR LA GUERRA POPULAR EN TODO EL PAÍS!

¡VIVA EL PARTIDO COMUNISTA DEL PERÚ!

¡GLORIA Al MARXISMO-LENINISMO-MAOISMO!

PCP - CRM