Al día internacional de la resistencia armada de los pueblos

AL DÍA INTERNACIONAL DE LA RESISTENCIA ARMADA DE LOS PUEBLOS

Hermes Aguilar
Miembro del EMC de las FARC-EP

Majestuosamente hermosa como lo es, la gran cordillera Andina: con sus estribaciones, sus variados climas y dentro de el, rica en especies de fauna y flora. Tan prodiga que hizo viable la existencia humana y de ahi sus luchas, por la independencia o el mejoramiento de la vida; desde la epoca de los aborigenes hasta la actualidad.Ahí se hizo, a su justa dimensión, el grandioso héroe, el guerrillero en resistencia; se levantó más de mil veces, de entre los muertos, para direccionar caminos a la justicia social en Colombia. Y he ahí, su morada. Allí vive, enseña, organiza, dirige, combate; la naturaleza Andina silenciosa es cómplice activa, lo permite su suelo, sus aguas, sus palmas dan cobijo, las semillas germinan en laboriosas cosechas, maderas secas sirven de calor en las horas frías: en sus hornos para asar el pan, hacer el café, el chocolate, asar la carne o el pescado, o cocinar un agradable sancocho.

Hizo de lo simple, una ciencia para ser aplicada; hizo de lo simple, una de las fuerzas guerrilleras pródigamente fuertes, en estos tiempos modernos. Superó con creses la capacidad estratégica, operacional y táctica a los hombres de academia militar nacional y extranjera; airoso se puede decir en 60 años de su carrera profesional como guerrillero.

Seguramente también, en los departamentos de inteligencia colombiana y norteamericana tendrán minuciosamente registradas sus magistrales acciones: estratégicas, operacionales y tácticas; donde aplicó el método de análisis para que fueran victoriosas. La toma de decisiones que trascienden en la historia en beneficio de la resistencia de los pueblos, pobres y oprimidos.

Las consignas revolucionarias de nuestro legendario y héroe Manuel Marulanda Vélez están firmadas con la fuerza que dejó su ejemplar conducción, signadas para la posteridad revolucionaria.

El mejor revolucionario que emule está ciencia, es justamente hacer como él lo hacía, al calor del marxismo leninismo: como método de análisis y método de organización. La ciencia política o militar aplicada al método marxista, es científica. La organización política o militar leninista bien aplicada, sigue siendo no solo científica sino marxista indestructible.

Para el héroe guerrillero la lucha armada, fue siempre, una forma superior de lucha; 60 años los expuso conscientemente en la confrontación de clase, no hay hasta ahora conocido, quien lo haya superado en este campo.

Pareciera como si su muerte, le pre-destinara un pedestal eterno al lado de los grandes próceres invencibles de la historia. Y se harán más monumentos en su hora y por su obra, por el pueblo revolucionario de reivindicación sublime.

Seguirá creciendo su pensamiento, como crece la palma velluda para hacer arcos, la palma araña y el albarico o chonta para hacer las lanzas como lo hicieron los llaneros de Bolívar y de Sucre. Y el bejuco ancla seguirá siendo el tensor de los arcos.

Los hijos de los grandes cedros, guayacanes, erizas y miles de árboles más, darán sus hijos su sombra y trinchera a nuestros hijos para la victoria final. Los ríos sus peces; la semilla de palma milpesos, dará su delicioso sabor, cuando hombre y naturaleza sean uno solo, en unidad perfecta.

Nuestro comandante estará ahí, con cada hombre de pueblo en la acción política o militar, cada fusil en la trinchera revolucionaria, en la fuerza conductora, en el curso de especialidades; en la escuela de filosofía, de organización, el curso político o militar, en los entrenamientos, en las líneas de combate, en los diálogos políticos y militares.

En las aulas, en las tardes de fiesta revolucionaria, bailará la múcura y la araña peluda.

Se alegrará en cada victoria sea política o militar en cada conquista popular.

Sentirá… cada vez, que la represión del estado repita su macabra acción de muerte contra los desprotegidos, cuando sigan produciendo malas leyes contra el pueblo colombiano; se continúe entregando la dignidad de la nación y la soberanía a las multinacionales y países extranjeros.

Seguirá exigiendo las carreteras, las escuelas, los hospitales; la tierra para el que la trabaje y prestamos con bajos intereses; la libertad de los presos y luchadores revolucionarios. Y sobre todo, seguirá diciendo que quiere la paz para las mayorías de Colombia y no la guerra. Eso sí, con justicia social.

Y mantendrá siempre el grito de resistencia:

¡Contra el imperialismo por la patria!
¡Contra la oligarquía por el pueblo!
¡Hasta la victoria final, somos FARC-EP!