La paz es la fuente de su mandato y el porvenir de su nombre en la historia de nuestro país, y es en este horizonte de reconciliación donde se fragua en el alma nacional, al borde del abismo, de nuevo la esperanza. El último cuarto de hora para el reencuentro de los colombianos palpita en nuestras manos y reclama una ejecución digna y certera que permita construir por fin, en la solución política al conflicto nacional, una victoria de los colombianos. Hemos respaldado sin sombras, sin dudas, la iniciativa de paz del doctor Leyva por cuanto encontramos en ella un mecanismo apto para iniciar con pie seguro el camino hacia un nuevo pacto que redima el destino nacional de las oscuras amenazas que lo rondan. En el mismo sentido hemos trabajado con rectitud buscando gestar un clima nacional de convivencia a lo largo y ancho del país.
La Comisión de Convivencia Nacional, los diálogos regionales en el Cauca y Tolima, las conversaciones sostenidas con los más diversos sectores de la vida nacional, los encuentros con los delegados del Gobierno para la reconciliación y la paz, los acuerdos al interior de la Coordinadora Simón Bolívar, que sustentan una apuesta enérgica a la solución de nuestros antagonismos; la decisión de tregua unilateral de las FARC y el M-19 conforman una estructura impecable de hechos, palabras y gestos, y expresan con claridad nuestro espíritu y nuestra voluntad.
Señor presidente, en sus manos están depositadas distintas propuestas que la sociedad colombiana le ha ido entregando. Desde ellas surge la responsabilidad de hallar la síntesis realista que le entrega a Colombia la certeza de la paz. La nación toda aguarda expectante la respuesta del Gobierno, la presencia activa en la empresa de la paz del partido de Gobierno y los hechos y gestos de paz de las Fuerzas Armadas.
Tenga usted la seguridad de encontrar en la Coordinadora Guerrillera Simón Bolívar un interlocutor de estatura histórica para asumir el desafío de pactar con flexibilidad y audacia un camino que abra las compuertas de la democracia y lo lance hacia la grandeza de nuestro destino nacional.
Señor presidente, indique simplemente dónde y cuándo se inicia la cita con la historia y nosotros acudiremos de inmediato a ella.
Carlos Pizarro Leongómez
Comandante general del M -19