A Néstor y a los hombres y mujeres que nunca mueren

A NESTOR Y A LOS HOMBRES Y MUJERES QUE NUNCA MUEREN

Homenaje de la Representación Internacional del MRTA al Comando Edgar Sanchez

El 22 de Abril de 1997, nuestra organización y nuestro pueblo recibió un duro golpe; una unidad de fuerzas especiales del Ejército Popular Tupacamarista (EPT), el Comando Edgar Sánchez dirigido por el obrero Comandante Huerta, cc. Néstor Cerpa Cartolini fueron asesinados con premeditación, alevosía, ventaja y sadismo por orden del Dictador Fujimori cumpliendo así ordenes de sus amos imperialistas: EEUU, Japón.

En el Perú, la clase obrera y el pueblo peruano se habían opuesto por más de una década y media a la aplicación del modelo Neoliberal. En el proceso electoral del 1990 la población mayoritariamente rechazo ese modelo económico votando contra el candidato de la derecha que la propiciaba: el escritor Mario Vargas Llosa. Sin embargo, el dictador, pese a la voluntad popular, lo aplicó de manera brutal y para garantizar su implementación hubo de recurrir al terrorismo de Estado y a los escuadrones de la muerte, que actúan con la mayor impunidad bajo la protección del gobierno. En este marco, de total violación de derechos humanos, de irrespeto de la voluntad popular, contraria al Neoliberalismo, a la falta absoluta de espacios democráticos -que no son un regalo de los gobiernos, sino conquistas del pueblo en largas jornadas de lucha-. Es que se inscribió la acción política del comando Edgar Sánchez y del obrero Comandante Néstor Cerpa Cartolini.

El cc. Néstor proviene de una familia proletaria y el mismo se hizo obrero a temprana edad, conociendo en carne propia la opresión y la explotación del sistema; por lo que se organizó en el sindicato para resistir y luchar contra el capitalismo en defensa de los derechos de la clase obrera. Como obrero consciente avanzó en el proceso de desarrollo de una posición clasista lo que lo lleva a asumir la secretaria General de su sindicato en la lucha contra FUE Neoliberalismo, que empezaba aplicarse ya en el Perú, en defensa de los derechos laborales y sus beneficios sociales, se opone a la quiebra fraudulenta y al cierre de la empresa CROMOTEX, ocupando su centro de trabajo.

Los empresarios recurren a las "fuerzas del orden" el 4 de febrero de 1979 y desalojan a los trabajadores en una acción violenta que deja como saldo 6 obreros muertos por arma de juego y un capitán que cayó del segundo piso. Paradójicamente los dirigentes sindicales entre quienes se encontraba el compañero Cerpa, fueron acusados de ataque a las fuerzas públicas y de asesinato de un oficial de la guardia civil, y recluidos en la prisión. Esta y otras injusticias llevaron al compañero Cerpa al convencimiento de que para la liberación de la clase obrera, el sindicato era un elemento importante, pero que era necesaria una organización política Revolucionaria que transformara toda la sociedad.

Por eso y por aquello, junto a hombres y mujeres conscientes, que provenían de otras experiencias de lucha, desarrollaron y fortalecieron un proyecto revolucionario: El Movimiento Revolucionario Túpac Amaru. Esta nueva organización política nacía como resultado de un proceso de concentración de fuerzas, que pugnaban, luego de varios años de discusiones sobre la lucha armada y la revolución, por hacer de la política una pedagogía, que al conjugar la teoría y la practica revolucionaria se hablara el lenguaje de nuestro pueblo: el de la acción, movilización, el de la educación, concientización y organización de la sociedad civil.

Por su accionar político, se gano rápidamente el odio de las clases dominantes y la simpatía y el respeto de nuestro pueblo, quien vio en este proyecto una posibilidad real de solución a los graves problemas económicos, políticos y sociales que afrontábamos como resultado de políticas dictadas desde las oficinas del Banco Mundial y el FMI.

Por lo mismo la burguesía y el imperialismo dedicaron sus mejores esfuerzos para minimizar y al mismo tiempo destruir a nuestra organización. De un lado, tendió un cerco informativo que ocultaba nuestras acciones políticas al mismo tiempo que resaltaba el accionar irracional del fanatismo senderista y nos ponía al mismo nivel; de otro lado nuestros combatientes eran brutalmente torturados, nuestros heridos eran rematados o se los dejaba morir desangrados. Nuestros compañeros prisioneros son tratados peor que animales en aquellas tumbas para seres vivos, que constituyen las cárceles del Perú. ¿Por qué delito? Por "atentar" contra un modelo económico que no toma en cuenta a vastos sectores de la sociedad y por ser consecuentes en la lucha por construir una sociedad de paz con justicia social y no doblegarse ante un dictador que mediante torturas físicas y psicológicas pretendió que nuestros prisioneros firmaran un acuerdo de paz. El ser consecuente en la lucha por defender los derechos de los trabajadores del campo y la ciudad, es lo que el imperialismo no nos perdona. Por eso el comando Edgar Sánchez y el obrero comandante cc. Néstor Cerpa Cartolini al poner en evidencia el carácter dictatorial de la democracia burguesa, al desnudar la esencia del Neoliberalismo modelo económico que lo único que ofrece a nuestros pueblos es miseria y represión, fueron sentenciados a muerte por el imperialismo que no podía perdonar semejante afrenta y mucho menos permitir que una acción exitosa cundiese como un mal ejemplo para otros pueblos que luchan por la libertad de las presas y presos políticos y por su completa y definitiva liberación del yugo imperialista.

¿Por qué un hombre que a burlando una y mil veces a los servicios de seguridad, que ha entrado y salido del país cuantas veces ha querido realiza una acción que muchos han calificado de espectacular o suicida?. ¿Por qué un hombre que tuvo en sus manos la vida de conocidos torturadores, opresores y explotadores del pueblo no ejecutó a ninguno de ellos?. La respuesta a estas preguntas es muy simple, Néstor era un hombre sensible y humano, eran un revolucionario.

Néstor como hombre sensible no podía permanecer indiferente ante las injusticias sociales, ante la sistemática violación de derechos humanos como resultado de la aplicación del capitalismo salvaje: el neoliberalismo.

El cc. Néstor como ser humano, esencialmente humano, no podía rebajarse al nivel de aquellas bestias que torturan y asesinan para mantener un modelo económico que succiona la vida de nuestro pueblo.

El cc. Néstor como hombre solidario, como revolucionario no podía permitir las condiciones inhumanas a la que era sometido nuestro pueblo y nuestros presos y presas polític@s.

Néstor como hombre sensible no podía concebir que sus hermanos: hombres y mujeres trabajadores del campo y la ciudad y de manara especial los mejores hijos del pueblo fuesen lentamente asesinados para satisfacer las necesidades de un sistema económico que hace cada vez más y más ricos a unos cuantos ricos mientras arrojan a la muerte por inanición a millones de seres humanos. El ser un hombre solidario y revolucionario, es lo que llevó al cc. Néstor a conducir esta acción: en la que él era consiente que sólo podía ser de patria ó muerte. Por que para Néstor lo mismo que para el Ché, "la solidaridad no significaba desear suerte al agredido; sino correr su misma suerte: su muerte o su victoria". Así pues, Néstor no podía sólo desear suerte a nuestros presos políticos sometidos a toda clase de vejaciones, tratos crueles, humillantes y degradantes, sino que decidió correr su misma suerte: La victoria liberándolos o la muerte en prisión o en el intento.

Al mismo tiempo, con la acción buscábamos abrir un espacio político por el cual nuestro pueblo sometido a años de brutal dictadura expresara su rechazo al modelo económico y arrinconando al gobierno propiciar su caída; sólo el sectarismo de la izquierda peruana, no comprendió ó no quiso comprender hacia donde se apuntaba con esta acción política y desde el primer momento consciente ó inconscientemente coincidió con el gobierno en la defensa del orden institucional y de la democracia, calificando esta acción como "acto terrorista". Los hechos han demostrado quienes son los verdaderos terroristas y de que lado están.

Sin embargo, pese al revés militar y al alto costo, en vidas humanas que hemos tenido que pagar, el objetivo político de esta acción se ha conseguido: se rompió el silencio y demostramos al mundo

- las "bondades" del modelo neoliberal,
- el carácter narcoterrorista de la dictadura fujimorista,
- la existencia de escuadrones de la muerte de las fuerzas armadas ligadas al régimen
- la violación de todos los derechos humanos de la población civil
- las condiciones infrahumanas en la que se encuentran sometidos los presos políticos en las diversas cárceles del Perú y
- sobre todo abrimos un espacio político que nuestro pueblo ha llenado ganado las calles y plazas del Perú para mostrar su rechazo al modelo neoliberal y la dictadura, llamando por su verdadero nombre al Sr. Alberto Fujimori: dictador y asesino, nombre que hombres mujeres honestos repiten en cualquier rincón del mundo que el dictador se atreve visitar: como en Bangladesh, Roma o el propio Japón.

La intervención militar en la residencia del embajador japonés en el Perú por parte de las fuerzas armadas y la posterior ejecución de los integrantes del Comando Edgar Sánchez se ha convertido en una victoria pírrica para el régimen de Fujimori, el pueblo peruano desprovisto de todo sectarismo ha sabido reconocer, la audacia y la hidalguía de los integrantes del comando Edgar Sánchez, que en desiguales condiciones se enfrentaron al neoliberalismo y al imperialismo, mostrando con su ejemplo y sacrificio que el único camino que nos queda frente a un enemigo brutal es el de la lucha, porque sólo la lucha nos hará dignos, sólo la lucha nos hará libres. Nuestro pueblo lo ha entendido así y como justo tributo de homenaje hoy comienza reactivar sus luchas, incipientes aún, a reestructurar su organización y ha fortalecer su conciencia.

Este proceso de reactivación y reorganización del movimiento obrero y popular requiere de una propuesta política que enfrente a la dictadura y al modelo neoliberal, de manera autónoma, esto obliga a la unidad de los revolucionarios y los tupacamaristas como parte del Movimiento Revolucionario peruano haremos nuestros mejores esfuerzos para concretizar esta UNIDAD y reorganizar y orientar las luchas de nuestro pueblo contra el modelo neoliberal. Los tupacamaristas sabremos ser consecuentes con el sacrificio de los integrantes del Comando EDGAR SANCHEZ y del obrero Comandante Néstor Cerpa Cartolini, y más temprano que tarde haremos realidad sus sueños de justicia y libertad para nuestro pueblo y para nuestros presos políticos.

¡ COMANDO EDGAR SANCHEZ Y COMANDANTE NESTOR CERPA CAROLINI VIVOS EN LAS LUCHAS POPULARES !

¡ NI RENDIDOS, NI VENCIDOS ... LA LUCHA CONTINUA !

¡ TUPAC AMARU VIVE Y VENCERA !

VOZ REBELDE