Declaración Política de la Segunda Conferencia Guerrillera del Bloque Sur

DECLARACION POLITICA DE LA SEGUNDA CONFERENCIA GUERRILLERA DEL BLOQUE SUR

La segunda conferencia Guerrillera del Bloque Sur se ha reunido para estudiar la situación política nacional y las perspectivas de la lucha revolucionaria, frente a los planes del imperialismo yanqui de apoderarse definitivamente de nuestro país, engullirse lo que queda de industria nacional, el comercio y el trabajo de todos los colombianos, suprimir la fuerza los últimos vestigios de libertad, oprimir aun más bajo su bota a todos los trabajadores de la ciudad y el campo someternos con mayor fuerza al hambre, a la desocupación, a la miseria y al terror.

En nuestro país, víctima de la "alianza para el progreso” de los imperialistas yanquis que han invertido más de un billón de dólares, según la Revista Norteamericana "Fortune", los yanquis están instalando bases de agresión no sólo contra nuestro pueblo sino contra todos los pueblos latinoamericanos, se han apoderado recientemente de nuestros yacimientos de Uranio en La Macarena, han instalado allí bases de cohetes, ocupan con sus aviones a reacción para bombardeo y ametrallamiento contra el movimiento guerrillero y campesino, los aeropuertos de El Dorado, Madrid, Apiay, Germán Olano y, ahora, por medio de una ley del Congreso de los Estados Unidos se han abrogado el derecho de ocupar militarmente; cuando lo estimen conveniente, cualquier país de América Latina, como lo están haciendo en Santo Domingo o como lo pretendieron en Viet Nam.

Frente a la agresión en cadena de los imperialistas yanquis contra los pueblos de Asia, Africa y América Latina, se reunió la Conferencia Tricontinental de La Habana para acordar acciones solidarias del mundo democrático contra los agresores imperialistas, para el impulso y desarrollo del movimiento revolucionario mundial, por la paz y el progreso de las naciones.

En nuestro país, la oligarquía y el imperialismo yanqui están desencadenando una vasta ofensiva reaccionaria contra nuestro pueblo, contra todas las organizaciones obreras, contra los empleados públicos y privados, contra los maestros, los estudiantes los transportadores, pequeños industriales y comerciantes, contra los campesinos productores, contra los artesanos contra los periódicos y periodistas independientes, contra los escritores, artistas e intelectuales progresistas, contra los hombres y mujeres de Colombia que no quieren morir de hambre.

A las huelgas y luchas reivindicativas de las masas trabajadoras, el gobierno fiel testaferro de los imperialistas responde con la fuerza de las armas, ocupa casas y locales de organizaciones sindicales y gremiales, universidades, trata de destruir a sangre y fuego toda organización popular que se alce a la lucha por mejores sueldos y salarios, sus dirigentes son asesinados, perseguidos, apaleados o encarcelados, muchos condenados por consejos de guerra verbales, los hambrientos, los sin trabajo, los sin techo, reciben descargas cerradas de fusilería, en tanto el costo de la vida es elevado y nuevos impuestos, nuevas alzas en las matrículas, en los precios de textos de enseñanza, en los arrendamientos, en los servicios públicos de luz, agua, teléfonos, correos, etc. enmarcan un cuadro sombrío de violencia y guerra donde una cuadrilla de bandoleros instalados en el gobierno, en los mandos militares, en las juntas directivas de la banca, la gran industria, el gran comercio, la gran prensa y el capital gringo arrancan tinta en sangre de colombianos fabulosas riquezas.

En los campos colombianos los imperialistas y reaccionarios desencadenan contra el campesinado una sucia guerra de exterminio. Se la denomina guerra preventiva contrarrevolucionaria bajo los lineamientos del plan laso inspirado en la nueva filosofía de la guerra irregular que practica típicos procedimientos fascistas, "acción cívica, comunal o acción cívico-militar", dentro de una guerra sicológica por la conquista de las masas para desarrollar, luego, la táctica de guerra de guerrillas contraguerrillera.

Frente a todo lo anterior los destacamentos guerrilleros del bloque Sur, nos hemos unido en esta Conferencia y constituido las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (F.A.R.C.),que iniciarán una nueva etapa de lucha y de unidad con todos los revolucionarios de nuestro país, con todos los obreros, campesinos, estudiantes e intelectuales, con todo nuestro pueblo, para impulsar la lucha de las grandes masas hacia la insurrección popular y la toma del poder para el pueblo.

Segunda Conferencia Guerrillera del Bloque Sur, constitutiva de las FUERZAS ARMADAS REVOLUCIONARIAS DE COLOMBIA.

Abril 25 a Mayo 5 de 1966.