Colección
Archivo digital
Tipo
Documento
País
Fecha
2011-11-10
Categoría
Comunicado
Comandante Alfonso Cano, hasta la victoria siempre
COMANDANTE ALFONSO CANO, HASTA LA VICTORIA SIEMPRE
Al Pueblo Insurgente de Colombia
A los Revolucionarios Latinoamericanos y del Mundo
Al Pueblo Trabajador Panameño
La mañana del 4 de noviembre del año en curso cayó en combate el Comandante Alfonso Cano, máximo jefe político de las FUERZAS ARMADAS REVOLUCIONARIAS DE COLOMBIA, EJÉRCITO DEL PUEBLO, FARC-EP, constituyéndose esta muerte en una sensible pérdida para sus familiares,elSecretariado y Estado Mayor de las FARC-EP, guerrillas farianas, milicias bolivarianas, compañeros de armas, pueblo trabajador colombiano, luchadores sociales y revolucionarios de Nuestra América, para quienes hacemos extensivas nuestras profundas muestras de solidaridad y de compromiso renovado de continuar la lucha por una América libre, unida y con justicia social como la soñó el Comandante Cano y demás revolucionarios que lo han precedido en la inmolación frente al glorioso altar de la Patria Grande.
El transcurso de los días va develando la ventaja y alevosía con que ha venido actuando el régimen fascista que impera en Colombia y que a la fecha tiene como su máximo exponente al Presidente Juan Manuel Santos. Decimos esto porque para aniquilar físicamente a la comandancia insurgente colombiana, han ido creando en el tiempo unidades militares especializadas y destinadas específicamente para este fin, desde las iniciales Brigadas Móviles 1 y 2, conformadas para perseguir y aniquilar al Secretariado de las FARC-EP y el Comando Central del ELN respectivamente, hasta la proliferación de estas Brigadas Móviles y Batallones de Contraguerrilla, convirtiendo al Ejército Colombiano en el mayor ejército mercenario de América Latina.
Los detalles que ofrecen el Estado Mayor del Ejército y el propio Presidente Santos, difundidos globalmente por las transnacionales de los medios de comunicación imperialistas, sobre la operación militar dan cuenta de la participación de una flotilla de 40 helicópteros fuertemente artillados, el uso de bombas de 500 libras y bombas inteligentes, alta tecnología militar y de comunicaciones (norteamericana-israelí), contando en total con un pie de fuerza de más de 6000 efectivos militares destinados a esta cacería, cuyo objetivo fundamental era asesinar al Comandante Alfonso Cano.
Del Compañero Cano, podemos destacar su claridad política ideológica, la capacidad de estratega político militar, su reconocido sentido de igualdad y camaradería con el pueblo y sus compañeros de armas. En él se fusiona el intelectual orgánico, presto a compartir sus conocimientos y ponerlos sin ningún tipo de celos al servicio de la causa revolucionaria, con el militante entregado al cien por ciento al logro de la transformación revolucionaria de la sociedad capitalista imperante en su país, asumiendo sin titubeos el difícil camino de la lucha armada, a la cual llega luego de su actividad militante en las filas del movimiento estudiantil en la JUCO, la cual no pasa desapercibida para la oligarquía colombiana, quien lo persigue y sentencia a muerte al igual que lo ha hecho con miles de luchadores del movimiento popular y revolucionario colombiano.
Su promoción a máximo responsable Político del Secretariado de las FARC-EP, ocurrida en el 2008 luego del fallecimiento del Comandante Manuel Marulanda Vélez, significó un gran reto para él y el resto de la Comandancia fariana. Sobre todo porque la desaparición del Comandante Marulanda estuvo precedida por la muertes de los Comandantes y miembros del Secretariado Raúl Reyes e Iván Ríos (2008) y un fuerte asedio por la fuerzas militares a través del Plan Patriota. Le toco al Comandante Cano conducir el proceso de replanteamiento táctico de las FARC-EP, impulsando la propuesta de efectuar conversaciones para llegar a un acuerdo político para poner fin al conflicto armado de más de seis décadas que vive el hermano pueblo colombiano, el cual advertía claramente que no podía entenderse como una desmovilización de la guerrilla, la conformación del Partido Comunista Clandestino de Colombia (PC3) y el Movimiento Bolivariano, así mismo y entendiendo la importancia de la solidaridad de los pueblos del mundo con la lucha y los padecimientos del pueblo colombiano promueve la creación del Movimiento Continental Bolivariano y otros espacios de solidaridad que ayuden a dar a conocer la lucha y que rompan con el aislamiento y la satanización de las fuerzas insurgentes; en lo militar da mayor énfasis al accionar de la guerra de guerrillas, concentrando y desconcentrando fuerzas de acuerdo a la magnitud del objetivo, volviendo a tomar la ofensiva contra el enemigo de clase y su aparato represor causándole múltiples bajas, desgaste y una fuerte erosión en su moral combativa.
A pesar de tan sensible pérdida, tocará nuevamente y quizás no sea la última vez, demostrar a la organización revolucionaria, su capacidad de asimilación y sobre todo de reestructurar el mando político militar para continuar transitando por los azarosos caminos de la lucha revolucionaria. Más que especular como lo hacen los medios burgueses de comunicación, sobre quien será su sucesor nos corresponde a las fuerzas progresistas y revolucionarias seguir denunciando la barbarie imperante en Colombia, que se traduce en el asesinato de dirigentes populares, sindicalistas, estudiantes, campesinos e indígenas, educadores, pobladores de barrios o comunas, los falsos positivos o crímenes de Estado, el desplazamiento y desarraigo de millones de colombianos, la existencia de fosas comunes en todo el territorio colombiano, el saqueo y la entrega de sus recursos naturales a las transnacionales, el narcotráfico, el paramilitarismo que es el equivalente a la narcoparapolítica de Álvaro Uribe Vélez y de su sucesor Juan Manuel Santos que hoy predominan en el régimen oligárquico colombiano y que mantienen sometido a todo un pueblo en base al terror.
En lo que respecta a Panamá, vemos que cada día con mayor irresponsabilidad los dirigentes del Gobierno Nacional, desde el Presidente Ricardo Martinelli, el Ministro de Seguridad José Raúl Mulino y el Jefe de la Policía Nacional Gustavo Pérez, hasta mandos de la Policía y el SENAFRONT, promueven abiertamente la militarización de la fuerza pública, anuncian estar preparándose para enfrentar a la guerrilla colombiana, y realizan operativos contra supuestos campamentos de la guerrilla en la Provincia de Darién, a los cuales buscan darle gran difusión por los medios de comunicación, cumpliendo de esta manera con la función que el imperialismo norteamericano les ha asignado para salvaguardar sus intereses, y de esta manera internacionalizar el conflicto y brindar apoyo al Gobierno de Santos, al cual tiene armado hasta los dientes no solo para masacrar a su pueblo sino para desestabilizar a los gobiernos progresistas de la región.
Producto de la presencia militar norteamericana en suelo patrio durante todo el siglo pasado y el control que ejerce en las altas esferas de poder en los actuales momentos, ha quedado montada una infraestructura destinada al espionaje satelital y de comunicaciones que siguen controlando los gringos, y que han brindado su colaboración tanto en la ubicación y bombardeo, así como del asesinato de los Comandantes Raúl Reyes (2008) y Jorge Briceño (2010) y no dudamos de su colaboración en el asesinato del Comandante Alfonso cano.
Seguros de que el ejemplo combativo del compañero inspirarán nuestros sueños de libertad y “justicia postergada” como diría el Comandante Ernesto “Che” Guevara. Más temprano que tarde la sangre derramada por nuestros héroes y mártires, el esfuerzo y sacrificio de los que continuamos en este duro bregar serán recompensados al hacer de la utopía socialista una realidad política que vivirán nuestros pueblos.
¡COMANDANTE ALFONSO CANO, HASTA LA VICTORIA SIEMPRE!
¡LA PELEA ES PELEANDO, LIBERACION O MUERTE!
Panamá, 10 de noviembre de 2011
DIRECCION NACIONAL
MOVIMIENTO DE LBERACION NACIONAL 29 DE NOVIEMBRE (MLN-29)
Al Pueblo Insurgente de Colombia
A los Revolucionarios Latinoamericanos y del Mundo
Al Pueblo Trabajador Panameño
La mañana del 4 de noviembre del año en curso cayó en combate el Comandante Alfonso Cano, máximo jefe político de las FUERZAS ARMADAS REVOLUCIONARIAS DE COLOMBIA, EJÉRCITO DEL PUEBLO, FARC-EP, constituyéndose esta muerte en una sensible pérdida para sus familiares,elSecretariado y Estado Mayor de las FARC-EP, guerrillas farianas, milicias bolivarianas, compañeros de armas, pueblo trabajador colombiano, luchadores sociales y revolucionarios de Nuestra América, para quienes hacemos extensivas nuestras profundas muestras de solidaridad y de compromiso renovado de continuar la lucha por una América libre, unida y con justicia social como la soñó el Comandante Cano y demás revolucionarios que lo han precedido en la inmolación frente al glorioso altar de la Patria Grande.
El transcurso de los días va develando la ventaja y alevosía con que ha venido actuando el régimen fascista que impera en Colombia y que a la fecha tiene como su máximo exponente al Presidente Juan Manuel Santos. Decimos esto porque para aniquilar físicamente a la comandancia insurgente colombiana, han ido creando en el tiempo unidades militares especializadas y destinadas específicamente para este fin, desde las iniciales Brigadas Móviles 1 y 2, conformadas para perseguir y aniquilar al Secretariado de las FARC-EP y el Comando Central del ELN respectivamente, hasta la proliferación de estas Brigadas Móviles y Batallones de Contraguerrilla, convirtiendo al Ejército Colombiano en el mayor ejército mercenario de América Latina.
Los detalles que ofrecen el Estado Mayor del Ejército y el propio Presidente Santos, difundidos globalmente por las transnacionales de los medios de comunicación imperialistas, sobre la operación militar dan cuenta de la participación de una flotilla de 40 helicópteros fuertemente artillados, el uso de bombas de 500 libras y bombas inteligentes, alta tecnología militar y de comunicaciones (norteamericana-israelí), contando en total con un pie de fuerza de más de 6000 efectivos militares destinados a esta cacería, cuyo objetivo fundamental era asesinar al Comandante Alfonso Cano.
Del Compañero Cano, podemos destacar su claridad política ideológica, la capacidad de estratega político militar, su reconocido sentido de igualdad y camaradería con el pueblo y sus compañeros de armas. En él se fusiona el intelectual orgánico, presto a compartir sus conocimientos y ponerlos sin ningún tipo de celos al servicio de la causa revolucionaria, con el militante entregado al cien por ciento al logro de la transformación revolucionaria de la sociedad capitalista imperante en su país, asumiendo sin titubeos el difícil camino de la lucha armada, a la cual llega luego de su actividad militante en las filas del movimiento estudiantil en la JUCO, la cual no pasa desapercibida para la oligarquía colombiana, quien lo persigue y sentencia a muerte al igual que lo ha hecho con miles de luchadores del movimiento popular y revolucionario colombiano.
Su promoción a máximo responsable Político del Secretariado de las FARC-EP, ocurrida en el 2008 luego del fallecimiento del Comandante Manuel Marulanda Vélez, significó un gran reto para él y el resto de la Comandancia fariana. Sobre todo porque la desaparición del Comandante Marulanda estuvo precedida por la muertes de los Comandantes y miembros del Secretariado Raúl Reyes e Iván Ríos (2008) y un fuerte asedio por la fuerzas militares a través del Plan Patriota. Le toco al Comandante Cano conducir el proceso de replanteamiento táctico de las FARC-EP, impulsando la propuesta de efectuar conversaciones para llegar a un acuerdo político para poner fin al conflicto armado de más de seis décadas que vive el hermano pueblo colombiano, el cual advertía claramente que no podía entenderse como una desmovilización de la guerrilla, la conformación del Partido Comunista Clandestino de Colombia (PC3) y el Movimiento Bolivariano, así mismo y entendiendo la importancia de la solidaridad de los pueblos del mundo con la lucha y los padecimientos del pueblo colombiano promueve la creación del Movimiento Continental Bolivariano y otros espacios de solidaridad que ayuden a dar a conocer la lucha y que rompan con el aislamiento y la satanización de las fuerzas insurgentes; en lo militar da mayor énfasis al accionar de la guerra de guerrillas, concentrando y desconcentrando fuerzas de acuerdo a la magnitud del objetivo, volviendo a tomar la ofensiva contra el enemigo de clase y su aparato represor causándole múltiples bajas, desgaste y una fuerte erosión en su moral combativa.
A pesar de tan sensible pérdida, tocará nuevamente y quizás no sea la última vez, demostrar a la organización revolucionaria, su capacidad de asimilación y sobre todo de reestructurar el mando político militar para continuar transitando por los azarosos caminos de la lucha revolucionaria. Más que especular como lo hacen los medios burgueses de comunicación, sobre quien será su sucesor nos corresponde a las fuerzas progresistas y revolucionarias seguir denunciando la barbarie imperante en Colombia, que se traduce en el asesinato de dirigentes populares, sindicalistas, estudiantes, campesinos e indígenas, educadores, pobladores de barrios o comunas, los falsos positivos o crímenes de Estado, el desplazamiento y desarraigo de millones de colombianos, la existencia de fosas comunes en todo el territorio colombiano, el saqueo y la entrega de sus recursos naturales a las transnacionales, el narcotráfico, el paramilitarismo que es el equivalente a la narcoparapolítica de Álvaro Uribe Vélez y de su sucesor Juan Manuel Santos que hoy predominan en el régimen oligárquico colombiano y que mantienen sometido a todo un pueblo en base al terror.
En lo que respecta a Panamá, vemos que cada día con mayor irresponsabilidad los dirigentes del Gobierno Nacional, desde el Presidente Ricardo Martinelli, el Ministro de Seguridad José Raúl Mulino y el Jefe de la Policía Nacional Gustavo Pérez, hasta mandos de la Policía y el SENAFRONT, promueven abiertamente la militarización de la fuerza pública, anuncian estar preparándose para enfrentar a la guerrilla colombiana, y realizan operativos contra supuestos campamentos de la guerrilla en la Provincia de Darién, a los cuales buscan darle gran difusión por los medios de comunicación, cumpliendo de esta manera con la función que el imperialismo norteamericano les ha asignado para salvaguardar sus intereses, y de esta manera internacionalizar el conflicto y brindar apoyo al Gobierno de Santos, al cual tiene armado hasta los dientes no solo para masacrar a su pueblo sino para desestabilizar a los gobiernos progresistas de la región.
Producto de la presencia militar norteamericana en suelo patrio durante todo el siglo pasado y el control que ejerce en las altas esferas de poder en los actuales momentos, ha quedado montada una infraestructura destinada al espionaje satelital y de comunicaciones que siguen controlando los gringos, y que han brindado su colaboración tanto en la ubicación y bombardeo, así como del asesinato de los Comandantes Raúl Reyes (2008) y Jorge Briceño (2010) y no dudamos de su colaboración en el asesinato del Comandante Alfonso cano.
Seguros de que el ejemplo combativo del compañero inspirarán nuestros sueños de libertad y “justicia postergada” como diría el Comandante Ernesto “Che” Guevara. Más temprano que tarde la sangre derramada por nuestros héroes y mártires, el esfuerzo y sacrificio de los que continuamos en este duro bregar serán recompensados al hacer de la utopía socialista una realidad política que vivirán nuestros pueblos.
¡COMANDANTE ALFONSO CANO, HASTA LA VICTORIA SIEMPRE!
¡LA PELEA ES PELEANDO, LIBERACION O MUERTE!
Panamá, 10 de noviembre de 2011
DIRECCION NACIONAL
MOVIMIENTO DE LBERACION NACIONAL 29 DE NOVIEMBRE (MLN-29)