Colección
Archivo digital
Tipo
Documento
País
Fecha
2011-11-26
Categoría
Comunicado
Fichero Adjunto
Mensaje en torno a la muerte de Alfonso Cano
“Porque una revolución, una revolución profunda, popular,
Es un proceso increíblemente complicado y doloroso
De agonía de un régimen social caduco y de alumbramiento
De un régimen social nuevo…”
Camarada:
Comandante Timoleón Jiménez.
Secretariado del Estado Mayor Central
Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia – Ejercito del Pueblo (FARC – EP).
Porque la victoria coronará el esfuerzo:
Nunca tarde para inclinar banderas, ante el camarada caído en combate, nunca tarde para decir ¡Hasta siempre Comandante de la paz y el diálogo! Sabíamos que el enemigo afilaba las zarpas y balbuceaba su rabia con cada gesto de paz, con cada acción por humanizar la guerra, por terminar la guerra, que las FARC – EP, realizaban. Y era que la oligarquía y el imperio afónicos, borrachos de su criminal ideología y orgullosos del peso asesino de sus marines, no aceptan la paz ni la justicia social, con ellos y para ellos, hablan la pólvora y las bombas. La expansión del imperio como fin, justifica sus medios de apropiación de tierras, recursos y la imposición brutal de su modelo.
Sabemos y por eso cabe mencionarlo que el terrorismo de estado, es el instrumento de la política prolongada de represión del estado colombiano, un arma de guerra de baja intensidad nunca desmantelada, que se mantiene, especializa y tecnifica en función de las necesidades derivadas de la implementación de una guerra asesina de la paz social.
Bajo el mentís de la “democracia” en Colombia, se mantiene una de las dictaduras burguesas más fascistas del continente cuyos pilares en la lucha por su supervivencia lo constituyen unas Fuerzas Armadas títeres al servicio de los intereses norteamericanos y el cada vez, acentuado paramilitarismo, fúnebre instrumento de la oligarquía, el capital transnacional y el narcotráfico.
Nunca tarde repetimos, mientras recordamos al héroe caído y nos envuelve la vorágine de sus planteamientos políticos de paz con justicia social, con validez histórica no solo para la Colombia rebelde sino también para esta Latinoamérica insurgente ¡Es aquí donde la felicidad florece! ¡Es aquí donde brota su trabajo de constructor y guerrillero!
¡Hemos jurado vencer…! Resuenan las voces guerrilleras y desde esta inmensidad Patriagrandina sabemos que mas que una consigna de victoria, es la apreciación sensata de la historia, de la fe en las fuerzas del pueblo y de la clase, nunca imaginadas, siempre ciertas.
En una sociedad, plagada de las miserias neoliberales, Alfonso Cano, dirigente rebelde y héroe de las causas justas, enseña con su ejemplo que de lo más difícil se encargan los revolucionarios. No hay muerte más justa, escriben los camaradas, porque es justo reconocer que las FARC – EP como propuesta armada han demostrado con su práctica de lo que es capaz el espíritu revolucionario.
Apostamos por la paz con justicia social, y apostamos por la Nueva Colombia, la Colombia solidaria, digna y humana, la Colombia soñada y diseñada por Manuel, Raúl, Briceño y la pléyade de combatientes que riegan con su ejemplo esta parte de la América Bolivariana, apostamos por la Colombia, libre, socialista, con soberanía popular.
Mientras llega el sol de la victoria, señalamos que nunca es tarde, para estrechar en el abrazo militante, el Proyecto Histórico fariano, en un todo Bolivariano de unidad revolucionaria, para saludar el esfuerzo de marcha victoriosa del Plan Estratégico, de continuidad de mando, nuestro saludo al camarada Timoleón Jiménez, quien continúa la ardua tarea revolucionaria, el camino de Galán y Manuel, seguros de que la victoria coronará el esfuerzo fariano, la tarea latinoamericana.
Con la muerte del Comandante Alfonso Cano, se pierde un hombre, es cierto, pero se gana un pueblo. ¡Salud camaradas farianos, la muerte de un revolucionario nos hermana! ¡Salud ante el ejemplo del Comandante y a luchar como leones porque…ellos no han muerto en vano¡
Nuestros ideales de cambio y de transformación revolucionaria, por una nueva sociedad, no culminan ni se detienen con la muerte de un revolucionario de la talla de Alfonso, sino que fortalece el compromiso militante de todo revolucionario, de cada combatiente del comunismo, de la vida.
No hay lágrimas, solo compromiso y reafirmación en los ideales, en la línea política, en el proyecto Bolivariano por la Nueva Colombia y por la construcción de una Latinoamérica nueva dentro de un Mundo nuevo.
Sin luchas… no hay victorias!
Comandante Néstor Cerpa Cartolini…Presente!
Tupac Amaru, Vive, Vuelve y Vencerá¡
Con las masas y las armas, Patria o Muerte…Venceremos!
Algún lugar del Perú, noviembre del 2010
Comandante Camilo Reyes
Comandancia General FAR – EPT
Séptimo Frente Guerrillero
Comandante Antonio Meza
Estado Mayor FAR – EPT
Es un proceso increíblemente complicado y doloroso
De agonía de un régimen social caduco y de alumbramiento
De un régimen social nuevo…”
Camarada:
Comandante Timoleón Jiménez.
Secretariado del Estado Mayor Central
Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia – Ejercito del Pueblo (FARC – EP).
Porque la victoria coronará el esfuerzo:
Nunca tarde para inclinar banderas, ante el camarada caído en combate, nunca tarde para decir ¡Hasta siempre Comandante de la paz y el diálogo! Sabíamos que el enemigo afilaba las zarpas y balbuceaba su rabia con cada gesto de paz, con cada acción por humanizar la guerra, por terminar la guerra, que las FARC – EP, realizaban. Y era que la oligarquía y el imperio afónicos, borrachos de su criminal ideología y orgullosos del peso asesino de sus marines, no aceptan la paz ni la justicia social, con ellos y para ellos, hablan la pólvora y las bombas. La expansión del imperio como fin, justifica sus medios de apropiación de tierras, recursos y la imposición brutal de su modelo.
Sabemos y por eso cabe mencionarlo que el terrorismo de estado, es el instrumento de la política prolongada de represión del estado colombiano, un arma de guerra de baja intensidad nunca desmantelada, que se mantiene, especializa y tecnifica en función de las necesidades derivadas de la implementación de una guerra asesina de la paz social.
Bajo el mentís de la “democracia” en Colombia, se mantiene una de las dictaduras burguesas más fascistas del continente cuyos pilares en la lucha por su supervivencia lo constituyen unas Fuerzas Armadas títeres al servicio de los intereses norteamericanos y el cada vez, acentuado paramilitarismo, fúnebre instrumento de la oligarquía, el capital transnacional y el narcotráfico.
Nunca tarde repetimos, mientras recordamos al héroe caído y nos envuelve la vorágine de sus planteamientos políticos de paz con justicia social, con validez histórica no solo para la Colombia rebelde sino también para esta Latinoamérica insurgente ¡Es aquí donde la felicidad florece! ¡Es aquí donde brota su trabajo de constructor y guerrillero!
¡Hemos jurado vencer…! Resuenan las voces guerrilleras y desde esta inmensidad Patriagrandina sabemos que mas que una consigna de victoria, es la apreciación sensata de la historia, de la fe en las fuerzas del pueblo y de la clase, nunca imaginadas, siempre ciertas.
En una sociedad, plagada de las miserias neoliberales, Alfonso Cano, dirigente rebelde y héroe de las causas justas, enseña con su ejemplo que de lo más difícil se encargan los revolucionarios. No hay muerte más justa, escriben los camaradas, porque es justo reconocer que las FARC – EP como propuesta armada han demostrado con su práctica de lo que es capaz el espíritu revolucionario.
Apostamos por la paz con justicia social, y apostamos por la Nueva Colombia, la Colombia solidaria, digna y humana, la Colombia soñada y diseñada por Manuel, Raúl, Briceño y la pléyade de combatientes que riegan con su ejemplo esta parte de la América Bolivariana, apostamos por la Colombia, libre, socialista, con soberanía popular.
Mientras llega el sol de la victoria, señalamos que nunca es tarde, para estrechar en el abrazo militante, el Proyecto Histórico fariano, en un todo Bolivariano de unidad revolucionaria, para saludar el esfuerzo de marcha victoriosa del Plan Estratégico, de continuidad de mando, nuestro saludo al camarada Timoleón Jiménez, quien continúa la ardua tarea revolucionaria, el camino de Galán y Manuel, seguros de que la victoria coronará el esfuerzo fariano, la tarea latinoamericana.
Con la muerte del Comandante Alfonso Cano, se pierde un hombre, es cierto, pero se gana un pueblo. ¡Salud camaradas farianos, la muerte de un revolucionario nos hermana! ¡Salud ante el ejemplo del Comandante y a luchar como leones porque…ellos no han muerto en vano¡
Nuestros ideales de cambio y de transformación revolucionaria, por una nueva sociedad, no culminan ni se detienen con la muerte de un revolucionario de la talla de Alfonso, sino que fortalece el compromiso militante de todo revolucionario, de cada combatiente del comunismo, de la vida.
No hay lágrimas, solo compromiso y reafirmación en los ideales, en la línea política, en el proyecto Bolivariano por la Nueva Colombia y por la construcción de una Latinoamérica nueva dentro de un Mundo nuevo.
Sin luchas… no hay victorias!
Comandante Néstor Cerpa Cartolini…Presente!
Tupac Amaru, Vive, Vuelve y Vencerá¡
Con las masas y las armas, Patria o Muerte…Venceremos!
Algún lugar del Perú, noviembre del 2010
Comandante Camilo Reyes
Comandancia General FAR – EPT
Séptimo Frente Guerrillero
Comandante Antonio Meza
Estado Mayor FAR – EPT