Comunicado en el que el FRF reivindica la "Masacre de Tacueyó"

DECLARACIÓN A LA OPINIÓN PÚBLICA

1) Que en los últimos meses nuestros servicios de contrainteligencia detectaron un vasto operativo de los servicios de inteligencia militares, consistente en una infiltración en grande escala para destruir desde dentro nuestra organización, constituida hoy en vanguardia de la revolución colombiana.

2) Que realizada la correspondiente investigación se ubicaron 134 agentes enemigos en nuestras filas, los cuales, luego del correspondiente arresto, fueron juzgados por un consejo de guerra convocado para el efecto.

3) Que el consejo de guerra dictó sentencia de muerte para estos agentes confesos den enemigo, sentencia que se ejecutó el día 12 de diciembre del presente año.

4) Que la investigación emprendida continúa, y los procedimientos que de ella se deriven, sólo cesarán cuando hayamos liquidado el último enemigo agazapado en nuestras filas y en las de todo el movimiento revolucionario.

5) Que rechazamos airadamente la campaña de calumnias que desatado el enemigo, por cuanto actuamos de acuerdo no solo con nuestra reglamentación interna sino con las leyes de guerra, única forma de asegurar la ya cercana victoria.

6) Que igualmente nos vemos en la obligación de rechazar el reciente vergonzoso comunicado de la dirección del M-19, en referencia a los hechos señalados atrás, pues no aceptamos su infantil pretensión de erigirse en nuestros jueces, de meterse en nuestros asuntos y sumarse traidoramente al coro de infamias del enemigo. No deben olvidar los compañeros del M-19 cual ha sido la mano generosa que los ha protegido (financieramente) en los últimos tiempos. Y en cambio de atreverse a criticarnos deberían preocuparse por resolver problemas tan graves como el homosexualismo que afecta a parte de su dirigencia. Por ahora les advertimos que si continúan en su actitud traicionera contra el Frente Ricardo Franco, no vacilaremos en hacerlos expulsar de la Coordinadora Nacional Guerrillera, en cortarles por completo la ayuda financiera que les hemos venido dando y en aislarlos del movimiento revolucionario como lo hicimos con la camarilla de las FARC. No nos tembló la mano para eliminar al enemigo infiltrado en nuestras filas, y no nos temblará para castigar ejemplarmente a los traidores.

Montañas del Cauca, diciembre 21 de 1985.

Javier Delgado
Comandante general
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Fuente: El Siglo (Bogotá), 3 de enero de 1986.