C. LUIS DE LA PUENTE, EJEMPLO DE LUCHA Y ENTREGA ÍNTEGRA A LA REVOLUCIÓN
Al pueblo peruano
A los luchadores sociales
A la comunidad internacional
A los militantes tupacamaristas
¡TODOS A ORGANIZARSE EN SUS INSTRUMENTOS DE CLASE!
¡GUERRILLA DEL 65…INICIO DE LA LUCHA ARMADA…. CAMINO HACIA EL SOCIALISMO!
Es parte de nuestro deber revolucionario como combatientes tupacamaristas reivindicar el alzamiento en armas del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR), con su Comandante General Luis de la Puente Uceda, quien el 23 de octubre de 1965 cayó en combate.
Nuestro partido recoge la trayectoria de lucha y entrega que hicieran estos hombres del Perú, ante una situación insostenible de crisis política, económica y social. Donde las esperanzas del pueblo se menoscababan con los gobiernos de turno que optaron más bien por la convivencia con los sectores Oligárquicos de rancia corrupción, que lo único que habían logrado era someter aún más al Perú ante el Imperialismo Norteamericano. De igual forma, el APRA y su dirigencia oportunista traicionaron al pueblo que creía en su propuesta de lucha antiimperialista. Por otro lado, el papel de los partidos de izquierda fue débil y oportunista cuando se trataba de luchar por la causa de los más desposeídos. Más bien se caracterizó por las disputas que generaron las definiciones que optaron de las experiencias extranjeras como fue el proceso chino y soviético.
Asimismo, en América latina, se venía generando una corriente de lucha por la liberación de los pueblos, estaba muy cercano el triunfo de la Revolución Cubana, que fue la que direccionó al resto de los pueblos oprimidos y explotados a levantarse contra el imperio norteamericano. Con este espíritu libertario se dio la incorporación de jóvenes a referentes de lucha como la de Guatemala, Colombia, Haití y la experiencia peruana con los guerrilleros que dieron su vida en la forja de un mundo nuevo. Así es, como se van integrando muchos jóvenes que buscaban un cambio revolucionario, se sumaron también a las filas de las guerrillas los sindicalistas campesinos, estudiantes secundarios, universitarios y campesinos en general que prestaron apoyo desde sus espacios.
Bajo este panorama, se da inicio la incursión de la guerrilla mirista, el 9 de junio de 1965 con el Frente “Túpac Amaru”, quien estuvo bajo la responsabilidad del Comandante Guillermo Lobatón, Máximo Velando y Froilán Herrera, quienes tomaron la Mina Santa Rosa y la Hacienda Runatullo, realizándose varias incursiones y acciones. Por su lado el Comandante Luis de la Puente a cargo del Frente “Pachacutec” constituyó las escuelas de formación político- militar, con lo cual se dio funcionamiento a la escuela de formación de cuadros para los frentes guerrilleros así como la formación a los campesinos que se venían incorporando a la lucha revolucionaria.
El otro Frente Guerrillero que se formó fue el “Manco Cápac” que tuvo su trabajo en la zona norte, en el cual se encontraban los cuadros estudiantiles como Enrique Amaya y Walter Palacios, asimismo, la incorporación de abogados y comuneros de la Comunidad de Chepén le dan el sostenimiento político al Movimiento para desarrollar el trabajo de masas.
El avance de la guerrilla con sus frentes comenzó a tener impacto en los sectores populares, lo que significó la identificación y apoyo de varios sectores. Por su lado, el gobierno de Belaúnde con apoyo de la convivencia APRA-UNO, aprueba la PENA DEMUERTE para los guerrilleros. Meses antes el gobierno había otorgado facultades a las Fuerza Armadas para la contraofensiva reaccionaria, que buscó impedir el acercamiento de las masas con la guerrilla y empujar a los combatientes hacia el sector de la selva con propósitos de aniquilarlos, ya que la mayor fuerza de la represión se concentraba en esta zona. Dándose bajo este contexto enfrentamientos con el ejército, en el cual la contundencia de los guerrilleros se demostró en el campo de batalla, teniendo como baja de parte del ejército a 8 de sus hombres. Ante la ofensiva, el Comité Central del MIR decide reagrupar a los militantes, y que los cuadros más notables continúen con la lucha internándose en la selva, mientras que los militantes recién integrados asuman la tarea de fortalecer el trabajo del partido.
La marcha de los compañeros que buscaron internarse en la selva se da inicio, pero en el camino fueron sorprendidos por el ejército. Se sufrió la caída de la compañera Victoria Navarro, joven militante del sector estudiantil secundario. La represión se daba con mayor intensidad, lo cual significó la caída de los compañeros, Máximo Velando, Froilán Herrera y Guillermo Lobatón, quienes murieron en combate. Posteriormente, en octubre caen los compañeros Luis de la Puente, Escobar, Tupayachi, Edmundo Cusquén, Agustín Marín, Benito Cutipa, Alberto Llanos, Polo Quispe, quienes al intentar romper el cerco del ejército caen de igual forma en combate.
La saña del gobierno encarnado por las fuerzas Armadas fue tal que no quedó ningún guerrillero vivo, no hubo presos políticos, no hubo juicio para ninguno de ellos, los cuerpos de los guerrilleros miristas asesinados no aparecen hasta el día de hoy; la orden de los lacayos del Imperialismo, fue de tierra arrasada y como consecuencia murieron muchos campesinos de comunidades enteras producto de los bombardeos. Por el contrario, los guardianes del imperialismo idearon Leyes sanguinarias para los combatientes que se alzaron en armas y lucharon por transformar nuestra sociedad, dando inicio así a la Lucha Armada en nuestro país.
Nosotros, el Movimiento Revolucionario Túpac Amaru, somos la continuidad y herederos históricos de esta gesta heroica de nuestros compañeros, somos el esfuerzo encarnado desde los años 80, quienes reflejados bajo los principios del Comandante Luis de la Puente seguimos en pie, porque las condiciones de desigualdad, de injusticia, de pobreza aún imperan, porque seguimos teniendo al Imperialismo Norteamericano como el principal opresor y asesino de nuestros pueblos, porque hoy más que nunca vemos que el espaldarazo a las empresas extranjeras son más frecuentes por parte de nuestros gobiernos de turno, traidores a las esperanzas de nuestros hermanos, porque hoy como siempre se vienen adueñando de nuestro país, de nuestras riquezas naturales y nos van dejando más miseria, más hambre, más desnutrición, más muertes, más vida indigna para nuestros hermanos, principalmente, del interior de nuestro Perú.
Nuestro partido aún con los reveces sufridos, continúa organizándose y moviéndose en las luchas sociales de nuestro pueblo, y hoy como ayer creemos que el único camino para los cambios sociales en este país saqueado, es continuar con las luchas del MIR y del MRTA y de todos los luchadores que cayeron bajo las balas asesinas del sistema opresor.
Por ello, creemos que la insurgencia, la Lucha Armada sigue vigente, mientras las condiciones objetivas estén dadas, mientras haya esta desigualdad tan notoria, donde unos cuantos son los que se enriquecen a costa del sufrimiento del pueblo…no desmayaremos en nuestra lucha.
¡Con las masas y las armas, Patria o Muerte… Venceremos!
¡MIR-MRTA continuación histórica hasta conquistar el socialismo peruano!