La Habana, Cuba. Sede de los diálogos por la paz con justicia social para Colombia. Marzo 12 de 2013.
Compañeras y compañeros asistentes al XVII Seminario Internacional, Los Partidos y una nueva sociedad, organizado por el Partido del Trabajo de México, reciban nuestro saludo en el más alto espíritu bolivariano de socialismo y Patria Grande.
Que sea este certamen un homenaje al Comandante Presidente Hugo Rafael Chávez Frías, su desaparición física no nubla nuestra visión del futuro que debemos construir y menos amaina nuestro firme compromiso con los intereses de los pobres de la tierra. Su visión antiimperialista, su actitud anticapitalista, su espíritu solidario, la grandeza con los desposeídos, el ánimo de igualdad y bienestar social, perduraran en el permanente tejer de los pueblos hacia la consolidación en algunos casos o en otros hacia su liberación.
Seguros estamos del florecer de su legado en Nuestra América, tierra regada con la sangre de héroes y mártires, abonada por la lucha popular y acondicionada por el espíritu libertario que nos caracteriza.
Damos parte del nuevo intento de solución dialogada emprendida con el gobierno colombiano, avanzamos en la construcción de soluciones sobre los temas del Acuerdo General para la terminación del conflicto y la construcción de una paz estable y duradera, en particular sobre el punto, política de desarrollo agrario integral. La paz es bandera popular, es clamor nacional. Nuestra voluntad es indeclinable. Estamos decididos a no dejar que La Mesa se rompa hasta no llegar al objetivo.
Los aires bolivarianos de libertad que recorren nuestro continente, unidos al resurgimiento de la resistencia nacional, después de los horrores del terrorismo de Estado, que aún no termina de azotar nuestra patria, nos permiten pensar que es posible doblegar el militarismo asentado en Colombia y guiado desde la Casa Blanca y lograr imponer una salida incruenta al conflicto social y armado de más de 60 años.
Consideramos inaplazable la construcción de nuevo poder, de democracia popular, no es pleonasmo, encaminada hacia el socialismo como paso inicial a la sociedad comunista. Somos conscientes de las dificultades del mundo por la crisis sistémica del capitalismo, en su estado terminal amenaza la propia existencia del planeta y estamos seguros que no habrá solución hasta tanto cese la explotación del hombre por el hombre y la de los recursos y riquezas naturales se dedique no para satisfacer los apetitos de las transnacionales sino para resolver los problemas y garantizar los derechos de las mayorías.
La solidaridad entrelaza nuestras voluntades, trenza nuestros destinos y anuda la malla de la resistencia proyectándonos al futuro que nos merecemos, sociedades justas para indígenas, negritudes y mestizos producto de las mezclas raciales; aquellas donde hombres y mujeres, hombro con hombro, construyan con su trabajo dignidad, democracia, soberanía e independencia.
La calidad de los participantes y su compromiso con los ideales revolucionarios son garantía del éxito de este importante Seminario.
En palabras de nuestro inolvidable Comandante en Jefe Manuel Marulanda Vélez, fuerte abrazo y un apretón de manos.