¡Abajo el mal gobierno! ¡Viva el Paro Nacional del 19 de Agosto!

¡ABAJO EL MAL GOBIERNO!
¡VIVA EL PARO NACIONAL DEL 19 DE AGOSTO"

En medio de un amplio rechazo a las políticas del gobierno diversidad de organizaciones campesinas y sociales preparan y animan para este 19 de agosto la participación de los más amplios y diversos sectores populares en un PARO NACIONAL AGRARIO.

Afrontando todas las dificultades que derivan de las presiones del gobierno y en las que incluyen continuas difamaciones, amenazas y detenciones, diversidad de organizaciones y líderes coinciden en aprovechar esta jornada para divulgar los objetivos de distintos paros, movilizaciones y protestas que se realizan actualmente en el país y exigir al gobierno un cambio de rumbo no sólo en sus políticas sino frente al tratamiento de guerra que hoy le viene dando al movimiento campesino y popular.

Los campesinos en el Catatumbo, actualmente en negociaciones con el gobierno frente al pliego de peticiones presentado el pasado mes de junio, a través de las variadas organizaciones que los representan fueron de los primeros que se unieron a la convocatoria, compartiendo con los campesinos del Putumayo, Nariño, Cauca, Valle, Antioquia y la Costa de integrar a los objetivos de esta jornada la exigencia cada vez más amplia de las comunidades al gobierno nacional de un cambio en su política agraria, comprometida por excelencia con los intereses de los grandes inversionistas, las multinacionales y el sector financiero.

La caótica situación del campo demuestra el fracaso de la política gubernamental implementada por más de 40 años. La pobreza en nuestra ruralidad es una de las más altas de América Latina con 50,3% –17 puntos por encima de las cabeceras. El ingreso per cápita real de los hogares en el campo es 67% menos que en las ciudades. El 42% de la población no tiene agua potable y la cobertura de alcantarillado no alcanza al 6%. Un escaso 3% del crédito comercial llega al sector agrícola. La formación bruta de capital fijo en el sector no pasa del 2%, y la participación sectorial en el PIB nacional apenas alcanza el 6,0%.

Notorio es además como las políticas de desarrollo rural elevan la concentración de la tierra, propician la extranjerización de las tierras, el retroceso de los diferentes sectores agrarios enfrentados a las importaciones crecientes de los productos subsidiados y la pérdida de la soberanía alimentaria. Excepto los resultados positivos alcanzados por el sector de los cultivos para agrocombustibles, la quiebra del sector agrario es más que evidente e indiscutible, y donde los más afectados resultan el campesinado y los sectores populares, que no encuentran en las políticas del gobierno salida a sus mayores problemas.

Inconformes frente a los precios cada vez más inestables -que no dejan de recibir el impacto negativo de la revaluación y la política monetaria del gobierno-, los desórdenes del mercado interno, los TLC y demás acuerdos interestales los cafeteros, arroceros, algodoneros, cacaoteros, paperos y otros sectores han manifestado su apoyo y participación en esta jornada de lucha.

No escapa al rechazo de las comunidades la locomotora minero energética, que si bien soporta la mayoría de las exportaciones colombianas todavía está muy lejos de representar un fuerte desarrollo del país. El nulo crecimiento de la industria y el poco crecimiento del empleo en las zonas de explotación muestran que las grandes inversiones de capital realizadas en este sector no tienen mayores conexiones con el aparato productivo nacional y en general con una política que trascienda con beneficios los demás sectores. Bajo el sofisma del desarrollo y crecimiento del país se han entregado en concesión 45 millones de hectáreas a las multinacionales mineras, hecho sin precedentes que además de representar un atentado censurable de la soberanía nacional, constituye una entrega grosera de los grandes recursos naturales de la nación a los inversionistas y monopolios extranjeros.

Otro reclamo generalizado de las comunidades está relacionado también con las violaciones a los derechos humanos, el desconocimiento que flagrantemente hace el gobierno de los derechos de asociación, movilización y protesta. Las denuncias evidencian la forma como no sólo se ha puesto en ejecución la normatividad con la que se conculca y criminaliza estos derechos, sino también las múltiples amenazas, detenciones, montajes y ejecuciones extrajudiciales a los que están sujetos permanentemente los dirigentes pertenecientes a las organizaciones campesinas y populares.

El apoyo a una salida política al conflicto económico, político, social y armado que vive el país desde hace más de 50 años se entrelaza entre otros aspectos al rechazo a los bombardeos indiscriminados y demás violaciones al derecho internacional humanitario.

Frente al falso y demagógico desarrollo rural que pregona el gobierno que hoy las comunidades desenmascaran y enfrentan llamando a un Paro Nacional Agrario nuestro Partido y las fuerzas de nuestro Ejército Popular de Liberación expresan además de su apoyo y solidaridad, el llamado al campesinado y todos los sectores populares a participar de manera activa.

Destacamos el Paro Nacional Agrario como un paso importante de lucha que no hay duda contribuirá de manera significativa a la coordinación y unidad del campesinado y sus organizaciones, así como a su mejor articulación con las luchas obreras y populares que se desarrollan en el país. Por su contenido y alcance esta jornada de lucha constituye una exhortación a obreros, campesinos y todos los sectores populares a elevar la lucha por la paz con justicia social potenciando la lucha por una apertura democrática verdadera, y con ella la lucha por una reforma agraria auténticamente democrática que recoja las aspiraciones de las masas trabajadoras del campo.

El apoyo que los más diversos sectores expresan al Paro Nacional Agrario, el llamado que realizan en la actualidad las centrales obreras, los sindicatos del sector de la salud, los estudiantes y maestros a participar de las movilizaciones que en las diferentes ciudades actualmente se preparan; el paro camionero, el paro de los mineros artesanales, la huelga de los trabajadores de la Drummond (multinacional estadounidense del carbón) muestran los alcances de esta jornada de lucha, que echando a tierra todas las presiones del gobierno se convertirá en una actividad preparatoria importante del PARO CIVICO NACIONAL que las más diversas organizaciones convocantes del ENCUENTRO NACIONAL DE UNIDAD POPULAR que se realizará este 31 de agosto y 01 de septiembre en la ciudad de Bogotá, coinciden en organizar para este segundo semestre.

Los comunistas, revolucionarios y demócratas somos parte del pueblo, reiterando nuestra vocación de poder marcharemos junto al campesinado, los obreros y el pueblo este 19 de agosto expresando nuestro apoyo y solidaridad con sus luchas, nuestro repudio al mal gobierno y el llamamiento general a participar activamente de la lucha general por la conquista de un gobierno democrático y popular que haga valer la soberanía, pugne por el alcance de las reformas democráticas y facilite el ejercicio de las libertades y derechos del pueblo.

¡Por la Paz con Justicia Social…Impulsar, preparar, realizar Paro Cívico Nacional!
¡Abajo el mal gobierno…abajo, abajo, abajo!
¡Combatiendo Unidos…Venceremos!

Comité Ejecutivo Central
Partido Comunista de Colombia (marxista-leninista)

Mando Nacional
Ejército Popular de Liberación (EPL)