Señoras y señores integrantes del Clamor Social por la Paz.
Envío mi saludo fraternal a todos los compatriotas y amigos de otros países, participantes en la Plataforma Clamor Social por la Paz.
El Comando Central del ELN, ha recibido con alegría su carta pública, del pasado 19 de mayo, dirigida al gobierno y a la insurgencia.
Valoramos positivamente sus esfuerzos por la paz, al ser ésta un objetivo y derecho inalienable, que hoy por fortuna está presente en toda la vida de Colombia.
Coincidimos con Ustedes que “llegó la hora de tomar decisiones audaces que nos permitan ponerle fin a la barbarie, el crimen y las injusticias que ha padecido y sigue padeciendo nuestro pueblo y restar excusas a los que quieren seguir perpetuando la guerra”.
Nos preocupa que en estos tiempos de campaña electoral, se use la paz para hacer demagogia y politiquería, por esto valoramos acertado su reclamo al gobierno, de tener "actitudes más coherentes frente a la paz”.
No compartimos que el gobierno mantenga un doble discurso de ofrecer la paz y hacer la guerra, argumentando que un cese bilateral fortalecería a la guerrilla y con base a esto, intensifica los operativos militares y la represión contra las justas luchas del movimiento popular. Tal desconfianza se puede resolver, por medio de una verificación independiente del cese, acordada entre las Partes.
Como Ustedes lo plantean, es urgente hacer un cese bilateral del fuego y las hostilidades, para crear un clima de paz que beneficie de inmediato a toda Colombia. Esto sería de gran alivio humanitario para los pobladores de extensos territorios del país, que hoy viven bajo los rigores de la guerra.
Ante las próximas elecciones del 15 de junio, anunciamos que respetaremos la voluntad y el derecho de las y los electores, de ejercer el derecho al voto y no realizaremos actividades, que puedan afectar o interrumpir el proceso electoral.
No haremos un nuevo cese unilateral, porque cada vez que los hacemos, las Fuerzas Armadas del Estado y sus paramilitares los usan para sacar ventajas militares en contra nuestra. Cuando haya sensatez y reciprocidad frente a estos gestos, podría ser válido volver a hacerlos.
Finalmente, compartimos su convocatoria, “a la sociedad colombiana la llamamos a respaldar sin ambigüedades este proceso hacia la paz de Colombia".
Estamos convencidos que solamente cuando la búsqueda de la paz sea obra de la sociedad entera, su logro y consolidación serán una realidad, lo que es nuestro mayor deseo.
Con respeto y consideración, me despido de Ustedes.