Compatriotas, doy a ustedes, el saludo respetuoso de todas y todos los integrantes del Ejército de Liberación Nacional y agradecemos que se haya tenido en cuenta a la insurgencia para este importante intercambio.
Solicito con todo respeto, poder conocer los diversos aportes y las conclusiones salidas de acá, por cuanto el tema de la paz, requiere como ninguno otro, de llegar a un consenso de lo que espera la sociedad de un proceso de paz.
Hemos dicho de manera reiterada, que el conflicto que padece Colombia es de naturaleza política y lo ha padecido con más profundidad la población humilde representada, en buena medida, en este recinto.
Han sido tan nefastas las consecuencias de dicho conflicto que tiene a Colombia sumida en una crisis profunda que solo es posible resolver superándolo definitivamente.
Conocer las causas que lo originaron es indispensable y aunque muchos juiciosos analistas han diagnosticado que ellas son: las desigualdades sociales, la anti democracia, la exclusión y la violencia, producidos esencialmente por la clase en el poder, esta se niega a reconocerlo, adjudicando las causas en una amenaza terrorista.
Con esa valoración asesinaron a Gaitán hace 67 años luego de haber combatido a sangre y fuego el movimiento político que el líder conducía y con esa misma lógica llegamos al presente, recorriendo los ríos de sangre de los que habló Gaitán pidiéndole al presidente Mariano Ospina Pérez que los evitara, en su discurso memorable de la Oración por la Paz unos días antes de caer sacrificado.
Ahora más de medio siglo después el presidente santos, apertrechado en esa misma actitud violenta que cuestionaba Gaitán y que le costó la vida, lanza contra el ELN amenazas, como si un proceso de paz para que se concrete deba ser bajo amenazas e imposiciones, esa manera de ver las cosas es lo que reproduce en Colombia la violencia.
El ELN inicio el proceso de diálogos en el mandato del presidente Gaviria Trujillo hace más de 23 años porque desde entonces está convencido que debe ser el dialogo y no la confrontación, el futuro de Colombia. Ese propósito que es consenso en el ELN nadie puede impedirlo ni modificarlo y una parte muy importante de nuestros esfuerzos están y estarán encaminados a hacerlo realidad.
Respetados compatriotas aquí presentes, hace solo 4 meses se realizó el quinto Congreso, máxima autoridad y expresión democrática del ELN.
Nuestra voluntad de llegar a un acuerdo con el gobierno por la paz de Colombia, se expresa en su declaración política que en su parte final dice:
"El gobierno ha planteado su disposición a poner fin al conflicto armado y para ello ha convocado a la insurgencia.
Asistimos a este diálogo para examinar la voluntad real del gobierno y del Estado colombiano; si en este examen concluimos que no son necesarias las armas, tendríamos la disposición de considerar si dejamos de usarlas".
Basados en este mandato y consenso democrático nuestra delegación busca con el gobierno concretar una agenda e iniciar la fase pública que permita a las partes concretar un acuerdo de paz.
En el último encuentro las delegaciones del ELN y el gobierno, tuvieron importantes aproximaciones en el tema de ir hacia el fin del conflicto, por ello no hemos entendido las declaraciones amenazantes del presiente y aquí en este recinto, con profundo respeto y compromiso, el ELN reitera su voluntad de paz.
Permítanme expresarles con toda responsabilidad que un proceso de paz donde la sociedad colombiana sobre todo la excluida de los destinos del país, no sea participe de manera protagónica en él, será un fracaso y nos asiste la responsabilidad de expresarlo con toda claridad, ello no puede entenderse como carencia de voluntad, por eso ese asunto de la participación de la sociedad en el proceso, está consignado como punto de la agenda que se discute con el gobierno
Para el ELN la carencia de democracia es una de las causas originarias del conflicto y un proceso de paz debe plantearse ese nodal asunto, por eso ha sido otro punto de la agenda a concretar.
Hemos hecho de la Verdad la justicia y la reparación, el perdón pero no olvido, la esencia de la discusión sobre el tema de las víctimas, no puede ser de otra manera.
El ELN aspira llegar a una mesa de diálogos con el gobierno, donde se ventilen las justas peticiones de las organizaciones populares y sociales, que han sido el producto de acuerdos colectivos de sus organizaciones y defendidas en importantes jornadas de lucha que al concretarse como derechos y reivindicaciones, permitan ir a la dirección de superar el conflicto y nos conduzca a la paz auténtica.
Si alguien sabe hacia dónde debe dirigirse Colombia en un proceso de paz, son esas masas que reclaman cambios que superen la oscura noche de este largo conflicto y nos reconozcamos como hijos de una patria que heredamos de los que se han sacrificado por ella y otros que trabajan y luchan para lograr un futuro de paz y reconciliación donde los conflictos se resuelvan mediante el dialogo y no por la vía de la confrontación violenta.
Nuestro llamado a todos los presentes y los ausentes para convocar y llamar a la sociedad entera para para dinamizar los procesos de organización popular y social que permitan la participación plena en el proceso de paz.
El ELN no acepta la tesis de que esta es la última oportunidad para la paz, porque esta es un derecho perenne de todas y todos los colombianos; se trata entonces de llegar a ella fruto de un gran consenso nacional lo cual exige un proceso sin exclusiones.
Por lo anterior, inspirados y trayendo al presente la memoria de Gaitán y las víctimas del conflicto, les rendimos junto a ustedes merecido homenaje y precisamos que la paz que hoy requiere Colombia, es del carácter que planteó hace más de medio siglo, el insigne dirigente sacrificado.
A todas y todos ustedes, muchas gracias.
Primer Comandante del ELN,
Nicolás Rodríguez Bautista