Colección
Archivo digital
Tipo
Documento
País
Fecha
2005-02-01
Categoría
Comunicado
Fichero Adjunto
A la memoria del Profesor Genaro Vázquez Rojas, en el 33 aniversario de su muerte
A LA MEMORIA DEL PROFESOR GENARO VÁZQUEZ ROJAS, EN EL 33 ANIVERSARIO DE SU MUERTE
“No me pregunten quien soy,
Ni si me habían conocido,
Los sueños que había tenido,
Crecerán aunque no estoy;
Ya no vivo pero voy,
En lo que andaba soñando,
Y otros que viven peleando,
Harán crecer nuevas rosas,
Y en el nombre de esas cosas,
Todos me estarán nombrando...”
La Milonga del Fusilado.
Al pueblo de México.
A los pueblos del mundo.
El dos de febrero de 1972, el Profesor Genaro Vázquez Rojas fue asesinado por el ejército mexicano, tras haber quedado inconsciente y mal herido, a consecuencia de un accidente automovilístico.
Genaro Vázquez Rojas fue fundador de la Asociación Cívica Guerrerense (ACG), en 1962, y de la Asociación Cívica Nacional Revolucionaria (ACNR), en 1968.
Para entender la importancia histórica de estas dos organizaciones dentro de la lucha por la liberación nacional y la transformación social profunda de nuestro país, es necesario recordar que, durante la década de los 60, la lucha organizada por la ACG contra los cacicazgos y por la democratización de los Ayuntamientos Municipales de la Costa Chica de Guerrero, logró hacer de los procesos electorales un instrumento para la desarticulación del poder caciquil y la construcción de un poder popular alternativo. Sin embargo, el fraude electoral y la represión gubernamental dieron lugar al levantamiento armado revolucionario de los cívicos; (como se les denominó a Genaro y a sus compañeros de lucha), originando la transformación del la ACG en ACNR.
Desde entonces han transcurrido más de cuatro décadas y, aunque el país ha sido objeto de grandes transformaciones, la historia parece repetirse; sólo que la dimensión de la lucha popular, contra los modernos cacicazgos neoliberales y por una verdadera democratización, ha adquirido un carácter nacional.
Actualmente, el país parece estar entrando en una espiral de acontecimientos sociales y políticos que podrían desembocar: 1) en un nuevo periodo de la barbarie neoliberal imperialista; ó, 2) en un proceso de cambio y transición hacia una verdadera democracia.
En este contexto, rendimos homenaje al profesor Genaro Vázquez Rojas, en el 33 aniversario de su muerte, esforzándonos por que las organizaciones de izquierda y el movimiento social en su conjunto seamos capaces de combinar, en la presente coyuntura nacional, todas las formas de lucha, de cerrar el paso a la ofensiva neoliberal imperialista y de impulsar sólidamente las grandes transformaciones democráticas que la nación requiere.
EL FOXISMO: UNA ADMINISTRACIÓN NEOLIBERAL FASCISTOIDE.
Ha concluido el cuarto año de gobierno del señor Vicente Foz (con zeta, y no porque sea jefe de los Zetas, aunque no deja de suspirar por ello) y ya no podemos sostener la estertorosa barriga descansando sobre nuestras manos, de tanta risa que provoca el humorismo de sus ocurrencias, o de temblores provocados por el nerviosismo que produce la necia realidad que niega a comportarse como imagina el presidente, y –dice– que “aún falta lo mejor”.
Hace ya 23 años, bajo la égida del priísta Miguel de la Madrid Hurtado (alias “Muerte, Miseria y Hambre”), dio comienzo la era neoliberal de la política económica impuesta por el Estado Mexicano en nuestra nación; Carlos Salinas de Gortari (“el innombrable”) y Ernesto Zedillo Ponce de León (“el globalifílico”) –ambos priístas conversos– dieron continuidad celosa y rigurosa de tales lineamientos político-económicos; finalmente, Vicente Foz Quezada (el autoerigido en el paladín del cambio anhelado), como perro López-portillista, ha defendido el neoliberalismo como opción del gatopardismo elegido para el no cambio.
Casi 20 años antes, el priísta Gustavo Díaz Ordaz (“la Changa”) configuró uno de los "estilos" de hacer política que ha atravesado, desde ese entonces, las formas de administrar la represión neofascista y militarizada hacia cualquier expresión de disidencia en el pensamiento, la palabra o la acción práctica; Luis Echeverría Álvarez (no alcanzó alias de tan miserable que fue), José López Portillo (alias Jodidos Los Pobres), y las hordas que les sucedieron mantuvieron el “estilo” de hacer política mostrado por “la Changa”.
Vicente Foz Quezada, el “General” Macedo de la Concha, el “General” Vega García, el “amigo” Ramón Martín Huerta y el autosoñador Catalino Creel Miranda administran y coronan, con el mismo celo perruno López-portillista, el “estilo” de hacer política neofascista inaugurado por “La Changa”, continuado por el miserable, prolongado por “Jodidos los Pobres”, “Muerte, Miseria y Hambre”, “el Innombrable” y por “el globalifílico”.
No cabe duda que un cable conductor –trenzado por dos hilos: el neoliberalismo y el fascismo de nuevo cuño– caracteriza la política neoliberal fascista instrumentada por el Estado Mexicano y por los gobiernos –sean estos de naturaleza priísta o panista– habidos desde la década de los 60 hasta nuestros días.
Pareciera que nuestros muertos económico-políticos gozan de entera salud y cabalgan orondos en un caballo, o en otro, pero con la misma mirada puesta en el mismo horizonte: El Neoliberalismo Fascista globalizado por el Jefe Nato del Imperialismo Estadounidense e instrumentado por los miembros prominentes del eje del mal, y sus aliados.
Los diferentes gobiernos, desde ese entonces, y sean de la filiación partidista que lo hayan sido –PRI-PAN–, han mostrado un interés elocuente por subordinar, de manera incondicional, nuestra nación a los dictados del Imperialismo Neoliberal Fascista.
Pese a ser bastante obvio, a la luz de los últimos eventos sucedidos en las cárceles de máxima seguridad del país y la lucha sin cuartel entre los diferentes grupos que se disputan el poder y los beneficios del narcotráfico –unos en las cárceles de máxima seguridad y otros en las filas del gobierno–, no es lo único que sucede en nuestra patria desde la década de los 60's; también podemos reconocer otro cable conductor que sigue una fuerza que históricamente han impulsado ciertos sectores de nuestro pueblo para oponer al “Modelo de Desarrollo del Subdesarrollo” otro Modelo de Desarrollo que responda a las necesidades e intereses de nuestro pueblo.
Desde aquél histórico 23 de septiembre de 1965, pasando por las aportaciones de las diversas organizaciones revolucionarias y democráticas, considerando todas las formas de organización y de lucha impulsadas por nuestro pueblo, la intención de construir otro mundo ha sido patente.
Hace ya 33 años de ello, cómo no recordarlo, si el cable conductor tomado por las manos de maestros -Arturo Gámiz, Genaro Vázquez Rojas y Lucio Cabañas Barrientos-ha llevado en uno de sus extremos el sueño de millones de mexicanos: “Lograr la Liberación de México y una Patria Nueva, o Morir por Ella”.
Hace ya 33 años de ello, cómo olvidarlo, fue asesinado por las hordas herederas de “La Changa” el profesor y dirigente revolucionario Genaro Vázquez Rojas.
Hace 33 años, un dos de febrero del año de 1972, la vida del profesor Genaro Vázquez Rojas transitaba de la carne tumefacta y sangrante a la inmortalidad.
Hoy, hoy, hoy; 33 años después, el fascismo decretado por “La Changa” cabalga de nuevo con aires de juventud y nuestro pueblo recuerda y reconoce que el maestro y dirigente revolucionarios Genaro Vázquez Rojas no se llevó consigo el cable que ahora sostienen otras manos y que apunta la mirada hacia otro lugar: “Lograr la Liberación de México y una Patria Nueva, o Morir por Ella”.
Dos cables parecen confrontarse en la conducción de nuestro México; algunos suponen que es uno sólo el cable y se niegan a admitir el hecho irrefutable de que son dos; el cable de los ricos, de los de arriba, y el hilo de los pobres, de los de abajo. El hilo del Neoliberalismo Fascista y el hilo del Poder Popular.
EL FASCISMO CABALGA DE NUEVO.
Los generales decidieron quitarse las caretas y mostrar el rostro que se ocultaba a los ojos de los ciudadanos. Los generales optaron por judicializar y militarizar la lucha política y por el poder económico. Los generales creyeron que la verdadera definición del Estado es aquélla que refiere a éste como el detentador hegemónico de la violencia y el terrorismo institucional como medios de coerción para toda la población. ¡¡¡Qué semejanza entre la visión de Georges W. Bush (Jr) y la de Vicente Foz!!!
Los generales y los civiles –que piensan como los mismísimos generales–, han considerado que la manera de enfrentar la crisis que afrontan con sectores que le disputan el poder político-económico, requiere de más cárceles, más patrullas, más soldados, más afis, más pfp's, más ak's, más sistemas judiciales que justifiquen el ejercicio del terrorismo institucional y de Estado contra quien se oponga a sus designios.
Si se trata de la delincuencia menor, las cárceles; si se trata de oponentes políticos, las cárceles; si se trata del narcotráfico, las cárceles; si se trata de dirigentes revolucionarios, las cárceles; si se trata de estudiantes universitarios, las cárceles; si se trata de gobiernos de la oposición, las cárceles; si hay que encontrar tres celulares, tres cargadores y dos grapas de cocaína en las cárceles de máxima seguridad, el ejército (que por cierto sí encuentra las armas peligrosas, no como el del Imperialismo Neoliberal Fascista que en Irak no encontró arma alguna); si se trata de acabar con las drogas, el ejército; si hay que detener a militantes revolucionarios para meterlos en las cárceles, y de una buena vez asesinarlos dejando un charco de sangre, el ejército; si hay que poner orden, honradez y ornato en las cárceles, el ejército; si se trata de poner retenes en las carretera impidiendo el libre tránsito en México, el ejército... En fin, como podemos reconocer sin demasiado esfuerzo intelectual, la idea de la estabilidad nacional, de seguridad nacional, certidumbre personal, embellecimiento de las ciudades, aseguramiento de las condiciones de país creíble y confiable –a los ojos evaluadores del Imperialismo Neoliberal Fascista, del Eje del Mal y de sus aliados o compinches–, etc., descansa sobre el supuesto de un sistema judicial, jurídico, penitenciario, policíaco y militar capaces de intimidar, sofrenar, controlar, reprimir y, en última instancia, asesinar a quienes se les opongan, confronten o cuestionen.
Si no es así vemos botones de muestra: Primero.– Digna Ochoa y Plácido y Noel Pável González, nuestros muertos, resulta que no lo son por obra y gracia de las fuerzas que administran la eliminación física de sus oponentes, sino por obra y gracia de una maldita depresión que tuvieron desde siempre y que les llevó de la mano al suicidio, diagnóstico post-mortem y no en el momento del diagnóstico en vida de la susodicha depresión; tal vez “la Paca” –que no “la Parca”– les dio la información; aunque importa decirlo aquí, motivos suficientes para ser asesinados por el fascismo que distingue al gobierno del cambio los había, aunque hubo evidencia de amenazas de muerte. Segundo.– El encarcelamiento, tortura y aislamiento –por que han sido tramposamente asociados con los narcotraficantes de dentro de las cárceles y, en principio, reconocidos como altos dirigentes revolucionarios del ERPI– de los Comandante Antonio y Coronela Aurora. Tercero.– Igualmente, los hermanos Cerezo –jóvenes estudiantes universitarios a los que no se les ha encontrado y demostrado delito alguno, pero acusados de pertenecer a las FARP– se les tortura, encarcela, aísla y asocia con los narcotraficantes de dentro de las cárceles. Cuarto.– Los asesinatos impunes de más de 300 mujeres en Ciudad Juárez, que permanecen como datos estadísticos de la inseguridad que se vive en México. Quinto.– El encarcelamiento, tortura y privación ilegal de la libertad de los ciudadanos que en la ciudad de Guadalajara se manifestaron contra los representantes más conspicuos del Imperialismo Neoliberal Fascista. Sexto.– La defensa irrestricta de la impunidad de los gobernadores de Jalisco, Querétaro y Morelos, por ser ellos de filiación panista, pese a ser delincuentes consumados y reconocidos por la población de los tres estados. Séptimo.– La judicialización de la lucha contra sus oponentes políticos, por mantener el poder político económico en sus manos y prolongar el modelo de desarrollo que hoy impera en el país. Octavo.– La militarización o paramilitarización de la vida nacional, bajo el pretexto de asegurar la pax (con equis) social y la estabilidad nacional... Pudiéramos continuar una muestra inacabable de hechos y hechos y hechos que evidencian la justeza de nuestro balance, pero creemos innecesario ya continuar por esta vía. Estos datos parecen ser suficientes para evidenciar que EL FASCISMO CABALGA DE NUEVO.
Y si nuevamente cabalga montado en los corceles que las manos de charros sostienen –Vicente Foz y Catalino Creel, ayudados oportunamente por “el amigo”, los “Generales” y Yunes–, tratan de arroparse, como Jinetes sin Cabeza –literal y metafóricamente dicho– con el manto de una supraracionalidad y existencia metafísicas de la justicia y la verdad en manos de un Derecho inapelable, de un Poder Judicial intachable, casto e inmaculado; de un Ejercito al servicio de la Patria y limpio históricamente de cualquier duda; y, faltaba mas, de un idealismo metafísico y ahistórico de un Estado y un Derecho con vida propias... ¡¡¡Vaya, vaya; el buen Hegel!!!, !!!Pero en manos de una ciega, torpe e ignorante ultraderecha que dice gobernar el país, pero que se le deshace en las manos, inevitablemente!!!
Como vemos pues, EL FASCISMO CABALGA DE NUEVO.
Por lo que hemos afirmado y sostenido –lo afirmamos y lo sostenemos–, hoy mas que nunca, a 33 años de distancia, el pensamiento y la visión que de México tenía el Profesor y alto dirigente revolucionario Genaro Vázquez Rojas sigue siendo vigente:
“Lograr la Liberación de México y una Patria Nueva, o Morir por Ella”.
TENDENCIA DEMOCRÁTICA REVOLUCIONARIA (TDR)
¡¡¡CONTRA EL NEOLIBERALISMO, EL PODER POPULAR!!!
Febrero 1 de 2005.
“No me pregunten quien soy,
Ni si me habían conocido,
Los sueños que había tenido,
Crecerán aunque no estoy;
Ya no vivo pero voy,
En lo que andaba soñando,
Y otros que viven peleando,
Harán crecer nuevas rosas,
Y en el nombre de esas cosas,
Todos me estarán nombrando...”
La Milonga del Fusilado.
Al pueblo de México.
A los pueblos del mundo.
El dos de febrero de 1972, el Profesor Genaro Vázquez Rojas fue asesinado por el ejército mexicano, tras haber quedado inconsciente y mal herido, a consecuencia de un accidente automovilístico.
Genaro Vázquez Rojas fue fundador de la Asociación Cívica Guerrerense (ACG), en 1962, y de la Asociación Cívica Nacional Revolucionaria (ACNR), en 1968.
Para entender la importancia histórica de estas dos organizaciones dentro de la lucha por la liberación nacional y la transformación social profunda de nuestro país, es necesario recordar que, durante la década de los 60, la lucha organizada por la ACG contra los cacicazgos y por la democratización de los Ayuntamientos Municipales de la Costa Chica de Guerrero, logró hacer de los procesos electorales un instrumento para la desarticulación del poder caciquil y la construcción de un poder popular alternativo. Sin embargo, el fraude electoral y la represión gubernamental dieron lugar al levantamiento armado revolucionario de los cívicos; (como se les denominó a Genaro y a sus compañeros de lucha), originando la transformación del la ACG en ACNR.
Desde entonces han transcurrido más de cuatro décadas y, aunque el país ha sido objeto de grandes transformaciones, la historia parece repetirse; sólo que la dimensión de la lucha popular, contra los modernos cacicazgos neoliberales y por una verdadera democratización, ha adquirido un carácter nacional.
Actualmente, el país parece estar entrando en una espiral de acontecimientos sociales y políticos que podrían desembocar: 1) en un nuevo periodo de la barbarie neoliberal imperialista; ó, 2) en un proceso de cambio y transición hacia una verdadera democracia.
En este contexto, rendimos homenaje al profesor Genaro Vázquez Rojas, en el 33 aniversario de su muerte, esforzándonos por que las organizaciones de izquierda y el movimiento social en su conjunto seamos capaces de combinar, en la presente coyuntura nacional, todas las formas de lucha, de cerrar el paso a la ofensiva neoliberal imperialista y de impulsar sólidamente las grandes transformaciones democráticas que la nación requiere.
EL FOXISMO: UNA ADMINISTRACIÓN NEOLIBERAL FASCISTOIDE.
Ha concluido el cuarto año de gobierno del señor Vicente Foz (con zeta, y no porque sea jefe de los Zetas, aunque no deja de suspirar por ello) y ya no podemos sostener la estertorosa barriga descansando sobre nuestras manos, de tanta risa que provoca el humorismo de sus ocurrencias, o de temblores provocados por el nerviosismo que produce la necia realidad que niega a comportarse como imagina el presidente, y –dice– que “aún falta lo mejor”.
Hace ya 23 años, bajo la égida del priísta Miguel de la Madrid Hurtado (alias “Muerte, Miseria y Hambre”), dio comienzo la era neoliberal de la política económica impuesta por el Estado Mexicano en nuestra nación; Carlos Salinas de Gortari (“el innombrable”) y Ernesto Zedillo Ponce de León (“el globalifílico”) –ambos priístas conversos– dieron continuidad celosa y rigurosa de tales lineamientos político-económicos; finalmente, Vicente Foz Quezada (el autoerigido en el paladín del cambio anhelado), como perro López-portillista, ha defendido el neoliberalismo como opción del gatopardismo elegido para el no cambio.
Casi 20 años antes, el priísta Gustavo Díaz Ordaz (“la Changa”) configuró uno de los "estilos" de hacer política que ha atravesado, desde ese entonces, las formas de administrar la represión neofascista y militarizada hacia cualquier expresión de disidencia en el pensamiento, la palabra o la acción práctica; Luis Echeverría Álvarez (no alcanzó alias de tan miserable que fue), José López Portillo (alias Jodidos Los Pobres), y las hordas que les sucedieron mantuvieron el “estilo” de hacer política mostrado por “la Changa”.
Vicente Foz Quezada, el “General” Macedo de la Concha, el “General” Vega García, el “amigo” Ramón Martín Huerta y el autosoñador Catalino Creel Miranda administran y coronan, con el mismo celo perruno López-portillista, el “estilo” de hacer política neofascista inaugurado por “La Changa”, continuado por el miserable, prolongado por “Jodidos los Pobres”, “Muerte, Miseria y Hambre”, “el Innombrable” y por “el globalifílico”.
No cabe duda que un cable conductor –trenzado por dos hilos: el neoliberalismo y el fascismo de nuevo cuño– caracteriza la política neoliberal fascista instrumentada por el Estado Mexicano y por los gobiernos –sean estos de naturaleza priísta o panista– habidos desde la década de los 60 hasta nuestros días.
Pareciera que nuestros muertos económico-políticos gozan de entera salud y cabalgan orondos en un caballo, o en otro, pero con la misma mirada puesta en el mismo horizonte: El Neoliberalismo Fascista globalizado por el Jefe Nato del Imperialismo Estadounidense e instrumentado por los miembros prominentes del eje del mal, y sus aliados.
Los diferentes gobiernos, desde ese entonces, y sean de la filiación partidista que lo hayan sido –PRI-PAN–, han mostrado un interés elocuente por subordinar, de manera incondicional, nuestra nación a los dictados del Imperialismo Neoliberal Fascista.
Pese a ser bastante obvio, a la luz de los últimos eventos sucedidos en las cárceles de máxima seguridad del país y la lucha sin cuartel entre los diferentes grupos que se disputan el poder y los beneficios del narcotráfico –unos en las cárceles de máxima seguridad y otros en las filas del gobierno–, no es lo único que sucede en nuestra patria desde la década de los 60's; también podemos reconocer otro cable conductor que sigue una fuerza que históricamente han impulsado ciertos sectores de nuestro pueblo para oponer al “Modelo de Desarrollo del Subdesarrollo” otro Modelo de Desarrollo que responda a las necesidades e intereses de nuestro pueblo.
Desde aquél histórico 23 de septiembre de 1965, pasando por las aportaciones de las diversas organizaciones revolucionarias y democráticas, considerando todas las formas de organización y de lucha impulsadas por nuestro pueblo, la intención de construir otro mundo ha sido patente.
Hace ya 33 años de ello, cómo no recordarlo, si el cable conductor tomado por las manos de maestros -Arturo Gámiz, Genaro Vázquez Rojas y Lucio Cabañas Barrientos-ha llevado en uno de sus extremos el sueño de millones de mexicanos: “Lograr la Liberación de México y una Patria Nueva, o Morir por Ella”.
Hace ya 33 años de ello, cómo olvidarlo, fue asesinado por las hordas herederas de “La Changa” el profesor y dirigente revolucionario Genaro Vázquez Rojas.
Hace 33 años, un dos de febrero del año de 1972, la vida del profesor Genaro Vázquez Rojas transitaba de la carne tumefacta y sangrante a la inmortalidad.
Hoy, hoy, hoy; 33 años después, el fascismo decretado por “La Changa” cabalga de nuevo con aires de juventud y nuestro pueblo recuerda y reconoce que el maestro y dirigente revolucionarios Genaro Vázquez Rojas no se llevó consigo el cable que ahora sostienen otras manos y que apunta la mirada hacia otro lugar: “Lograr la Liberación de México y una Patria Nueva, o Morir por Ella”.
Dos cables parecen confrontarse en la conducción de nuestro México; algunos suponen que es uno sólo el cable y se niegan a admitir el hecho irrefutable de que son dos; el cable de los ricos, de los de arriba, y el hilo de los pobres, de los de abajo. El hilo del Neoliberalismo Fascista y el hilo del Poder Popular.
EL FASCISMO CABALGA DE NUEVO.
Los generales decidieron quitarse las caretas y mostrar el rostro que se ocultaba a los ojos de los ciudadanos. Los generales optaron por judicializar y militarizar la lucha política y por el poder económico. Los generales creyeron que la verdadera definición del Estado es aquélla que refiere a éste como el detentador hegemónico de la violencia y el terrorismo institucional como medios de coerción para toda la población. ¡¡¡Qué semejanza entre la visión de Georges W. Bush (Jr) y la de Vicente Foz!!!
Los generales y los civiles –que piensan como los mismísimos generales–, han considerado que la manera de enfrentar la crisis que afrontan con sectores que le disputan el poder político-económico, requiere de más cárceles, más patrullas, más soldados, más afis, más pfp's, más ak's, más sistemas judiciales que justifiquen el ejercicio del terrorismo institucional y de Estado contra quien se oponga a sus designios.
Si se trata de la delincuencia menor, las cárceles; si se trata de oponentes políticos, las cárceles; si se trata del narcotráfico, las cárceles; si se trata de dirigentes revolucionarios, las cárceles; si se trata de estudiantes universitarios, las cárceles; si se trata de gobiernos de la oposición, las cárceles; si hay que encontrar tres celulares, tres cargadores y dos grapas de cocaína en las cárceles de máxima seguridad, el ejército (que por cierto sí encuentra las armas peligrosas, no como el del Imperialismo Neoliberal Fascista que en Irak no encontró arma alguna); si se trata de acabar con las drogas, el ejército; si hay que detener a militantes revolucionarios para meterlos en las cárceles, y de una buena vez asesinarlos dejando un charco de sangre, el ejército; si hay que poner orden, honradez y ornato en las cárceles, el ejército; si se trata de poner retenes en las carretera impidiendo el libre tránsito en México, el ejército... En fin, como podemos reconocer sin demasiado esfuerzo intelectual, la idea de la estabilidad nacional, de seguridad nacional, certidumbre personal, embellecimiento de las ciudades, aseguramiento de las condiciones de país creíble y confiable –a los ojos evaluadores del Imperialismo Neoliberal Fascista, del Eje del Mal y de sus aliados o compinches–, etc., descansa sobre el supuesto de un sistema judicial, jurídico, penitenciario, policíaco y militar capaces de intimidar, sofrenar, controlar, reprimir y, en última instancia, asesinar a quienes se les opongan, confronten o cuestionen.
Si no es así vemos botones de muestra: Primero.– Digna Ochoa y Plácido y Noel Pável González, nuestros muertos, resulta que no lo son por obra y gracia de las fuerzas que administran la eliminación física de sus oponentes, sino por obra y gracia de una maldita depresión que tuvieron desde siempre y que les llevó de la mano al suicidio, diagnóstico post-mortem y no en el momento del diagnóstico en vida de la susodicha depresión; tal vez “la Paca” –que no “la Parca”– les dio la información; aunque importa decirlo aquí, motivos suficientes para ser asesinados por el fascismo que distingue al gobierno del cambio los había, aunque hubo evidencia de amenazas de muerte. Segundo.– El encarcelamiento, tortura y aislamiento –por que han sido tramposamente asociados con los narcotraficantes de dentro de las cárceles y, en principio, reconocidos como altos dirigentes revolucionarios del ERPI– de los Comandante Antonio y Coronela Aurora. Tercero.– Igualmente, los hermanos Cerezo –jóvenes estudiantes universitarios a los que no se les ha encontrado y demostrado delito alguno, pero acusados de pertenecer a las FARP– se les tortura, encarcela, aísla y asocia con los narcotraficantes de dentro de las cárceles. Cuarto.– Los asesinatos impunes de más de 300 mujeres en Ciudad Juárez, que permanecen como datos estadísticos de la inseguridad que se vive en México. Quinto.– El encarcelamiento, tortura y privación ilegal de la libertad de los ciudadanos que en la ciudad de Guadalajara se manifestaron contra los representantes más conspicuos del Imperialismo Neoliberal Fascista. Sexto.– La defensa irrestricta de la impunidad de los gobernadores de Jalisco, Querétaro y Morelos, por ser ellos de filiación panista, pese a ser delincuentes consumados y reconocidos por la población de los tres estados. Séptimo.– La judicialización de la lucha contra sus oponentes políticos, por mantener el poder político económico en sus manos y prolongar el modelo de desarrollo que hoy impera en el país. Octavo.– La militarización o paramilitarización de la vida nacional, bajo el pretexto de asegurar la pax (con equis) social y la estabilidad nacional... Pudiéramos continuar una muestra inacabable de hechos y hechos y hechos que evidencian la justeza de nuestro balance, pero creemos innecesario ya continuar por esta vía. Estos datos parecen ser suficientes para evidenciar que EL FASCISMO CABALGA DE NUEVO.
Y si nuevamente cabalga montado en los corceles que las manos de charros sostienen –Vicente Foz y Catalino Creel, ayudados oportunamente por “el amigo”, los “Generales” y Yunes–, tratan de arroparse, como Jinetes sin Cabeza –literal y metafóricamente dicho– con el manto de una supraracionalidad y existencia metafísicas de la justicia y la verdad en manos de un Derecho inapelable, de un Poder Judicial intachable, casto e inmaculado; de un Ejercito al servicio de la Patria y limpio históricamente de cualquier duda; y, faltaba mas, de un idealismo metafísico y ahistórico de un Estado y un Derecho con vida propias... ¡¡¡Vaya, vaya; el buen Hegel!!!, !!!Pero en manos de una ciega, torpe e ignorante ultraderecha que dice gobernar el país, pero que se le deshace en las manos, inevitablemente!!!
Como vemos pues, EL FASCISMO CABALGA DE NUEVO.
Por lo que hemos afirmado y sostenido –lo afirmamos y lo sostenemos–, hoy mas que nunca, a 33 años de distancia, el pensamiento y la visión que de México tenía el Profesor y alto dirigente revolucionario Genaro Vázquez Rojas sigue siendo vigente:
“Lograr la Liberación de México y una Patria Nueva, o Morir por Ella”.
TENDENCIA DEMOCRÁTICA REVOLUCIONARIA (TDR)
¡¡¡CONTRA EL NEOLIBERALISMO, EL PODER POPULAR!!!
Febrero 1 de 2005.