República Mexicana, 2 de diciembre de 2002

Al pueblo de México.
A los pueblos del mundo.


El 2 de diciembre de 1974 cayó en combate contra el ejército federal el Profesor Lucio Cabañas Barrientos, fundador y dirigente del Partido de los Pobres y de la Brigada Campesina de Ajusticiamiento.

Desde entonces han transcurrido 28 años en que los poderosos de ayer y sus beneficiarios de hoy pretendieron ocultar a toda costa los restos de Lucio, oscurecer las causas e ideales de su rebeldía, deformar su memoria y suprimir el filo crítico de su ideología.

Pero, ni con toda su fuerza, ni con todo su dinero, ni con toda su mentira, los poderosos pudieron conseguir sus objetivos.

Por el contrario, frente a la creciente miseria, explotación, exclusión, sometimiento y represión que ha traído consigo la globalización neoliberal, la figura de Lucio Cabañas adquiere cada vez mayor relevancia como símbolo revolucionario de la autodefensa y de la lucha armada revolucionaria a las que se ha visto obligado a recurrir, en distintos momentos, el pueblo mexicano.

De ahí la importancia que reviste el hallazgo de los restos de Lucio y de la necesaria recuperación, por esta vía, del ideario y la praxis revolucionaria que caracterizó al Partido de los Pobres. Hallazgo que, lejos de ser una concesión gratuita del gobierno de los poderosos, constituye una conquista de los sectores democráticos, populares y revolucionarios identificados con la lucha por la democracia y el socialismo en nuestro país.

Pero la mayor importancia que reviste el hallazgo de los restos de Lucio reside en la función unificadora y articuladora que la recuperación de su memoria podría desempeñar en la lucha por la libertad de los presos políticos y luchadores sociales, la presentación de los desaparecidos políticos y el castigo a los responsables intelectuales y materiales de la guerra sucia en nuestro país, como lo ponen de manifiesto las exequias que diversas organizaciones y sectores populares decidieron organizar con motivo de la inhumación de los restos de Lucio, justo en el marco del 28 aniversario de su caída en combate.

Dicha función unificadora y articuladora de la voluntad popular nacional es tanto más necesaria cuanto mayor es el esfuerzo de la clase en el poder y de los jefes políticos, policíacos y militares por encubrir responsabilidades personales y de Estado, en la guerra sucia organizada contra el pueblo y sus organizaciones, mediante farsas grotescas, como las desarrolladas en Inglaterra y España (con Augusto Pinochet), así como en Argentina mediante las denominadas leyes de Punto Final y Obediencia Debida y, más recientemente, en nuestro país, en el supuesto enjuiciamiento "por homicidio" y no por genocidio, como debiera corresponder, de los generales Francisco Quiroz Hermosillo y Arturo Acosta Chaparro, llevado a cabo por la institución castrense mexicana y no por tribunales civiles.

Esta situación hace ver que la verdadera justicia, así como la posibilidad de una sociedad donde impere la igualdad, la libertad, la tolerancia, el respeto a la dignidad y a la autonomía del otro, no vendrá del poder de los de arriba sino del poder de los de abajo. Poder, este último, en proceso de construcción al calor de la lucha - crítica y práctica - contra el proceso de reestructuración y expansión imperialista instrumentado por las corporaciones multinacionales, los organismos financieros internacionales y las potencias imperialistas; como lo pone de manifiesto la lucha de resistencia del pueblo argentino, el triunfo de la alianza presidida por Luis Gutiérrez en Ecuador, el triunfo de Lula Da Silva en Brasil, el respaldo popular a la estancia en el poder de Hugo Chávez en Venezuela, el fortalecimiento de la lucha del pueblo y gobierno cubanos contra el bloqueo económico, la reorganización de lucha de los pueblos indígenas y el endurecimiento del discurso del EZLN en nuestro país, etc., destacando dentro de todo este proceso la cada vez mayor unificación de la lucha popular latinoamericana contra la entrada en vigor del proyecto más ambicioso impulsado por el imperialismo norteamericano en nuestro continente: el Área de Libre Comercio de las Américas (ALCA).

Todo esto hace cada vez más urgente en nuestro país la elaboración de un amplio programa, de una línea política común y de una dirección compartida que hagan posible la articulación de los distintos esfuerzos y voluntades en dirección de la materialización de un Nuevo Proyecto de Nación. Pero lo cual requiere, al mismo tiempo, la construcción de una nueva visión y de una nueva práctica política capaz de poner en cuestión y superar las concepciones y prácticas intolerantes y desarticuladoras que han caracterizado a las izquierdas y a sus procesos de fragmentación.

Por ello, el mejor homenaje que podemos rendir al Profesor Lucio Cabañas Barrientos, en el 28 aniversario de su muerte, reside en la recuperación de su ideario político y del fundamento ético, profundamente humano y tolerante, que caracterizó su práctica revolucionaria. Reside en la lucha por la rearticulación y reunificación de los sectores del movimiento democrático, popular y revolucionario cada vez más debilitados por la intolerancia, el dogmatismo y el espíritu de secta que nos ha caracterizado a las organizaciones de izquierda. Reside en la construcción de un bloque de fuerzas, verdaderamente amplio, que en el marco de la creciente lucha popular latinoamericana contribuya crítica y prácticamente a la transformación social profunda de nuestra sociedad, con base en el desarrollo y la combinación de todas las formas de lucha, incluida la autodefensa y el recurso supremo de las armas.

Hacemos un llamado al pueblo en lucha y a sus organizaciones democráticas revolucionarias a combatir el proceso de recolonización capitalista instrumentado, en México y América Latina, por el imperialismo norteamericano.

Hacemos un llamado a las organizaciones de izquierda a contribuir a la cristalización del poder de los de abajo, promoviendo una verdadera democracia representativa y participativa capaz de restituir la dignidad y la soberanía popular.

¡Honor y gloria al Comandante Revolucionario Lucio Cabañas Barrientos!


Fraternalmente:

¡¡¡CONTRA EL NEOLIBERALISMO, EL PODER POPULAR¡¡¡

PARTIDO DEMOCRÁTICO POPULAR REVOLUCIONARIO
EJERCITO POPULAR REVOLUCIONARIO
TENDENCIA DEMOCRÁTICA REVOLUCIONARIA
PDPR-EPR-TDR


República Mexicana, 2 de diciembre de 2002.