No hay garantías para ejercer la protesta social

COMUNICADO

Ante el incumplimiento de lo pactado por el gobierno nacional en el paro del 2013, al pueblo sólo le queda la opción de la protesta social organizada y pacífica en las vías y calles del país.

Es por eso que desde el día 30 de mayo del 2016, indígenas, campesinos, afros, profesores e integrantes de diversas organizaciones sociales elevan su voz de protesta ante los continuados engaños y mentiras de parte de la clase política en el poder, esta vez en cabeza de Juan Manuel Santos.

Mientras en La Habana estamos a las puertas de un acuerdo que ponga fin a más de 50 años de guerra, en las vías y calles del país la protesta social es reprimida con violencia por los escuadrones del ESMAD. En 7 días de paro la represión policial deja más de 150 personas detenidas, 2 indígenas muertos pertenecientes a las comunidades del municipio de Caldono, departamento del Cauca.

Señor Presidente, señores de la clase dirigente del país: lo sucedido es un mal precedente para los anhelos de paz que estamos construyendo en la Mesa de Conversaciones, y por ende va en contra de las libertades y el derecho que tiene todo ciudadano a protestar ante la violación de los compromisos adquiridos por parte del Establecimiento.

No es con represión y encarcelamientos que se hacen las reformas. Las reformas que necesita Colombia se hacen con voluntad política, con inversión social. El uso de la fuerza y de las armas contra el pueblo para solucionar los problemas sociales por parte del Estado, es la causa que ha generado violencia desde hace más de 60 años, la cual ha dejado, miles de muertos torturados, desaparecidos, desplazados y otros miles en el exilio. Esa guerra puede llegar a su punto final si la clase dirigente entiende, que no es con violencia como se llega a la solución política negociada.

Para construir paz, el Estado debe garantizar el derecho legítimo a la protesta social como lo estipula la Constitución Nacional. La gente protesta por falta de salud, de educación, trabajo bien remunerado, tierras, vivienda digna, recreación y otros elementos básicos que un Estado democrático y de derecho tienen que garantizar a sus ciudadanos. La gente protesta contra la inoperancia del gobierno. Ya es tiempo de terminar con el uso de las armas para acallar el clamor popular.

Las FARC-EP nos solidarizamos con las familias y comunidades a la cuales pertenecían los comuneros, Gerzain Cerón y Marco Aurelio Díaz Gueque, asesinados el día 2 de junio por escuadrones del ESMAD, en la carretera Panamericana, entre Santander de Quilichao y Popayán. Único delito cometido por los indígenas, ejercer el derecho a la protesta ante los incumplimientos del gobierno.

Hacemos un llamado al gobierno nacional a que cese la represión contra el pueblo. A los organismos defensores de derechos humanos, a la comunidad internacional para que ayude por las vías del dialogo a solucionar tan graves problemas, que en nada beneficia, a la construcción de una paz estable y duradera, con justicia social.

Estado Mayor Bloque Occidental Alfonso Cano (BOCAC) FARC-EP

Junio 2016 montañas del Cauca.