Colección
Archivo digital
Tipo
Documento
País
Fecha
2016-12-20
Categoría
Comunicado
Saludo a los prisioneros políticos y de guerra de las FARC-EP
Camaradas
PRISIONEROS POLITICOS Y DE GUERRA, FARC-EP
Cárceles de Colombia
Desde los Puntos de Preagrupamiento Temporal los guerrilleros de las FARC-EP saludamos y expresamos nuestro sentimiento de solidaridad y de admiración a todos y cada uno de los prisioneros políticos de nuestra organización, que resisten y luchan desde el encierro y que no desfallecen, fieles a las órdenes y determinaciones de los organismos de dirección.
El momento político que vivimos en Colombia nos ha puesto en el centro de importantes definiciones, en donde el debate abierto y civilizado ha sustituido el lenguaje de los fusiles que durante más de 50 años ensordeció el ámbito institucional para dirimir los conflictos de clase. La oportunidad de ser protagonistas de los cambios que el país requiere, por la vía democrática, es única y no podemos dilapidarla ni inmovilizarnos en la maraña de contradicciones que a diario subyacen en torno al proceso de paz y el Nuevo Acuerdo Final. Nuestro pasado y presente comunista y seguramente en nuestro futuro militante, vamos a estar siempre en el centro de las contradicciones sociales, allí donde se anuden los antagonismos en la lucha de clases y donde el pueblo clame por líderes de gran caletre, probos y honestos, estaremos los antiguos combatientes que una vez intentamos derrocar el régimen institucional vigente a través de la lucha armada y que ahora, con el arma de la palabra conquistamos el derecho a ser Gobierno. Esa es camaradas nuestra hermosa ilusión.
El pasado 26 de agosto se suscribió en La Habana, en el marco del proceso de Paz, el acuerdo para facilitar la ejecución del cronograma del proceso de dejación de armas y que indica sobre las personas privadas de la libertad por pertenecer a las FARC-EP o personas acusadas de serlo y que tengan condenas o procesos por delitos indultables, según lo normatizado en la Ley de Amnistía e Indulto y que cumplan con el cronograma de la dejación de armas, quedarán en libertad mediante el procedimiento de Iure consagrado en la ley en mención. De la misma manera, para las personas privadas de la libertad por pertenecer a las FARC-EP, que tengan condenas o procesos por delitos que las leyes en vigor en el momento del inicio de la dejación de armas no permitan indultar, serán trasladadas a las Zonas Veredales Transitorias de Normalización, con nosotros, en cumplimiento del acuerdo del 23 de junio de 2016.
Siendo así y superados los impasses generados desde la refrendación de octubre, aun nos encontramos frente a un panorama, que si no es de incertidumbre jurídica, si lo es de incertidumbre legislativa, por las trabas que colocan los legisladores y ponentes del Gobierno en los debates iniciados en el Congreso bajo el procedimiento de Fast track, concretamente con la Ley de Amnistía. Sin embargo, fieles a los acuerdos, empiezan a otorgar libertad mediante Indulto a los guerrilleros condenados por el delito de Rebelión y sus conexos antiguos. Ellos serán multiplicadores de los Acuerdos de La Habana, visitantes asiduos a la población carcelaria que padece los vejámenes de la justicia punitiva. Para todos los indultados, que sean la continuación de nuestra lucha política.
Anotamos de manera rigurosa la supremacía del principio de prevalencia y el principio del Delito Político para destacar que las amnistías, indultos y demás tratamientos penales establecidos en la Jurisdicción Especial para la Paz, incluidos los diferenciados para agentes del Estado, prevalecerán sobre las actuaciones de cualquier otra jurisdicción, por conductas ocurridas directa o indirectamente en el marco del conflicto interno. Aplicada la teoría del caso en nuestro ámbito, la amnistía será́ un mecanismo de extinción de la acción penal cuya finalidad es otorgar seguridad jurídica a los integrantes de las FARC-EP.
Prisioneros y nosotros compartimos afanes y el tedio de esperar las definiciones jurídicas, padecemos mutuamente el temor del mundo desconocido de las Zonas Veredales, pero permanece intacta nuestra valentía con la que enfrentamos fusil contra fusil, para en un futuro cercano, enfrentar argumentos que discrepen, las razones sociales de la lucha política y nuestros disensos frente a la política social y económica del Estado neoliberal que combatimos. Ese mundo que soñamos ayer sigue intacto en nuestros planes y tareas para desarrollar en el mañana.
Siendo así y con la terquedad de garabato los seguimos esperando, ahora sí, casi que es realidad, nos encontraremos en las ZVTN, o por lo menos aquellos que les imputen delitos no amnistiables, sin temores y con la verdad como guía, pues si alguna vez fuimos participes de este tipo de conductas punibles fue en el marco del conflicto, en función del delito de rebelión, y de ello jamás nos avergonzaremos.
Camaradas, que esta sea la última navidad en prisión, con fervor revolucionario,
Secretariado Nacional de las FARC-EP
PRISIONEROS POLITICOS Y DE GUERRA, FARC-EP
Cárceles de Colombia
Desde los Puntos de Preagrupamiento Temporal los guerrilleros de las FARC-EP saludamos y expresamos nuestro sentimiento de solidaridad y de admiración a todos y cada uno de los prisioneros políticos de nuestra organización, que resisten y luchan desde el encierro y que no desfallecen, fieles a las órdenes y determinaciones de los organismos de dirección.
El momento político que vivimos en Colombia nos ha puesto en el centro de importantes definiciones, en donde el debate abierto y civilizado ha sustituido el lenguaje de los fusiles que durante más de 50 años ensordeció el ámbito institucional para dirimir los conflictos de clase. La oportunidad de ser protagonistas de los cambios que el país requiere, por la vía democrática, es única y no podemos dilapidarla ni inmovilizarnos en la maraña de contradicciones que a diario subyacen en torno al proceso de paz y el Nuevo Acuerdo Final. Nuestro pasado y presente comunista y seguramente en nuestro futuro militante, vamos a estar siempre en el centro de las contradicciones sociales, allí donde se anuden los antagonismos en la lucha de clases y donde el pueblo clame por líderes de gran caletre, probos y honestos, estaremos los antiguos combatientes que una vez intentamos derrocar el régimen institucional vigente a través de la lucha armada y que ahora, con el arma de la palabra conquistamos el derecho a ser Gobierno. Esa es camaradas nuestra hermosa ilusión.
El pasado 26 de agosto se suscribió en La Habana, en el marco del proceso de Paz, el acuerdo para facilitar la ejecución del cronograma del proceso de dejación de armas y que indica sobre las personas privadas de la libertad por pertenecer a las FARC-EP o personas acusadas de serlo y que tengan condenas o procesos por delitos indultables, según lo normatizado en la Ley de Amnistía e Indulto y que cumplan con el cronograma de la dejación de armas, quedarán en libertad mediante el procedimiento de Iure consagrado en la ley en mención. De la misma manera, para las personas privadas de la libertad por pertenecer a las FARC-EP, que tengan condenas o procesos por delitos que las leyes en vigor en el momento del inicio de la dejación de armas no permitan indultar, serán trasladadas a las Zonas Veredales Transitorias de Normalización, con nosotros, en cumplimiento del acuerdo del 23 de junio de 2016.
Siendo así y superados los impasses generados desde la refrendación de octubre, aun nos encontramos frente a un panorama, que si no es de incertidumbre jurídica, si lo es de incertidumbre legislativa, por las trabas que colocan los legisladores y ponentes del Gobierno en los debates iniciados en el Congreso bajo el procedimiento de Fast track, concretamente con la Ley de Amnistía. Sin embargo, fieles a los acuerdos, empiezan a otorgar libertad mediante Indulto a los guerrilleros condenados por el delito de Rebelión y sus conexos antiguos. Ellos serán multiplicadores de los Acuerdos de La Habana, visitantes asiduos a la población carcelaria que padece los vejámenes de la justicia punitiva. Para todos los indultados, que sean la continuación de nuestra lucha política.
Anotamos de manera rigurosa la supremacía del principio de prevalencia y el principio del Delito Político para destacar que las amnistías, indultos y demás tratamientos penales establecidos en la Jurisdicción Especial para la Paz, incluidos los diferenciados para agentes del Estado, prevalecerán sobre las actuaciones de cualquier otra jurisdicción, por conductas ocurridas directa o indirectamente en el marco del conflicto interno. Aplicada la teoría del caso en nuestro ámbito, la amnistía será́ un mecanismo de extinción de la acción penal cuya finalidad es otorgar seguridad jurídica a los integrantes de las FARC-EP.
Prisioneros y nosotros compartimos afanes y el tedio de esperar las definiciones jurídicas, padecemos mutuamente el temor del mundo desconocido de las Zonas Veredales, pero permanece intacta nuestra valentía con la que enfrentamos fusil contra fusil, para en un futuro cercano, enfrentar argumentos que discrepen, las razones sociales de la lucha política y nuestros disensos frente a la política social y económica del Estado neoliberal que combatimos. Ese mundo que soñamos ayer sigue intacto en nuestros planes y tareas para desarrollar en el mañana.
Siendo así y con la terquedad de garabato los seguimos esperando, ahora sí, casi que es realidad, nos encontraremos en las ZVTN, o por lo menos aquellos que les imputen delitos no amnistiables, sin temores y con la verdad como guía, pues si alguna vez fuimos participes de este tipo de conductas punibles fue en el marco del conflicto, en función del delito de rebelión, y de ello jamás nos avergonzaremos.
Camaradas, que esta sea la última navidad en prisión, con fervor revolucionario,
Secretariado Nacional de las FARC-EP