Conscientes de la necesidad de encontrar una solución política al conflicto que vive Colombia, y para contribuir a superar las dificultades últimamente presentadas, que han obstaculizado la dinámica de preparación y desarrollo de la Convención Nacional, propuesta por el Eln y sectores de la sociedad, nos hemos reunido para intercambiar diferentes ideas que hagan viable la concreción de las esperanzas de paz, que en este proceso tenemos todos los colombianos.
Para continuar en estos esfuerzos, consideramos importante crear los escenarios idóneos que permitan la participación de la sociedad, el gobierno y la insurgencia, para analizar con profundidad y sin limitaciones, los temas fundamentales que hagan posible el tránsito de Colombia hacia una sociedad con justicia social, necesaria para la convivencia que exige la actualidad y las proyecciones del próximo milenio.
En consecuencia, nos parece pertinente que se generen las condiciones que permitan llevar a buen término la Convención Nacional y el inicio del diálogo entre el Gobierno Nacional y el Eln que buscaría como primer paso, establecer un acuerdo humanitario.
Para tales fines, pensamos que es necesario que se produzcan acuerdos -Gobierno y Eln- que permitan entre otros:
1.- Que existan condiciones de seguridad para los asistentes a la Convención Nacional, y el diálogo entre el Gobierno y Eln en territorio colombiano. Esto implica contar con un área de distensión que facilite estos procesos.
2.- Esta área de distensión, implicaría el retiro de la fuerza pública y la permanencia de las autoridades políticas y judiciales, para el normal desarrollo de las actividades cotidianas de la sociedad que allí reside.
3.- Consideramos indispensable la creación temporal de organismos civiles que ejerzan vigilancia y apoyo a las autoridades locales, para el cumplimiento de las funciones que les son propias.
4.- Se entiende, una vez culminados los procesos de Convención Nacional y diálogo, se retomará al estado inicial en que se encontraba el área del país, antes de acordarse su distensión.
Para la viabilización de estas iniciativas, es indispensable examinar con creatividad las alternativas aquí planteadas, todas tendientes a lograr el fin último con que soñamos todos los colombianos, para ejercer nuestro legítimo derecho a vivir en paz.
Venezuela, 10 de marzo de 1999
Jaime Bernal Cuéllar, Procurador General de la Nación.
José Fernando Castro Caycedo, Ciudadano Defensor del Pueblo.
Antonio García, Comandante Militar del Eln.