Como ya es conocido nacionalmente, en horas de la noche del día de ayer, 25 de mayo del corriente año, la Comuna El Maizal fue objeto de una nueva agresión.
En esta oportunidad, el asalto provino del CONAS, ente adscrito a la Guardia Nacional Bolivariana, el cual bajo el argumento de la lucha contra el bachaquerismo procedió, sin orden judicial alguna, a allanar la Unidad Socioproductiva de la citada comuna en función de arrebatarle o despojarle un conjunto de insumos y materiales que se emplea en la actividad agroproductiva (herbicidas).
Las Comuneras y los Comuneros de El Maizal, con valentía y firme posición de combate, han decidido en asamblea popular no permitir que se lleven los insumos y, consecuencialmente, proceder a su distribución, como estaba previsto, entre los productores y campesinado de la región.
Este nuevo ataque se suma a la larga lista de agresiones y permanente hostilidad que sectores burgueses, latifundistas y gubernamentales han venido desarrollando contra la Comuna El Maizal, a objeto de obstaculizar, truncar y destruir esta experiencia en proceso popular de construcción, habida cuenta que se ha convertido en ejemplo y referencia de lucha contra el latifundio, la economía de puertos y, por tanto, en un destacamento del Pueblo en Lucha con mira a la edificación del Estado Comunal.
En tal contexto es que las Fuerzas Bolivarianas de Liberación –FBL- sostiene categóricamente que en la Comuna de El Maizal se debate el devenir de la Revolución Bolivariana, toda vez que con su ejemplo y consecuente voluntad de combate ha sido capaz de animar a amplios sectores populares a retomar y reimpulsar la lucha contra el reformismo, el burocratismo, la corrupción y el aburguesamiento que hoy carcome a la dirección política de la revolución, la cual, irrefutablemente, es responsable de haber convertido al Estado Democrático y Social de Derecho y de Justicia en una entelequia, en un instrumento o herramienta incapaz de enfrentar y solucionar los graves problemas que confronta la sociedad venezolana.
Por ello, la lucha popular es la línea justa para avanzar en la defensa y profundización de la Revolución Bolivariana, vale decir, para enfrentar abiertamente a los sectores que desde adentro y fuera del gobierno pretenden definitivamente reducir o convertir la revolución en una caricatura, en una frase vacía, en un simple discurso para que todo siga igual, es decir, donde las compañías trasnacionales continúen saqueando las riquezas naturales de la patria; la burguesía comerciante siga expoliando el tesoro público por la vía de las fraudulentas importaciones; sectores castrenses en vez de resguardar las fronteras del país, continúen haciendo de ellas su negocio a través del contrabando de extracción; bandas criminales sigan gobernando en nuestros barrios, campos y comunidades en desmedro de la sana convivencia social; sicarios pagados por representantes de la burguesía asesinando impunemente a dirigentes campesinos, indígenas, obreros y populares; banqueros devaluando y disponiendo, sin límite alguno, del cono monetario nacional en provecho exclusivo de sus antisociales ambiciones de clase; tribunales que han convertido a la administración de justicia en una mera actividad comercial en la que el que mejor paga tiene la razón; en fin, una "revolución" en la que los amplios sectores populares que conforman la sociedad venezolana vivan en la decadencia, el colapso, sin instrumentos organizativos que les permitan defender sus derechos e intereses, en el que el razonamiento dominante sea el individualismo, el egoísmo, el sálvese quien pueda, en suma, un pueblo dependiente espiritual y materialmente de unas élites despatriadas, antisociales y radicalmente antirrevolucionarias.
He aquí el valor y significado de la Comuna de El Maizal, pues, su lucha representa un aliento de esperanza en la perspectiva de la reorganización y reactivación del Movimiento Popular Revolucionario Venezolano, por consiguiente, su victoriosa consolidación o su derrota a manos de la aburguesada dirección de la revolución, supone avanzar o retroceder en el proceso de construcción de la Patria Socialista, de allí que, en estas cruciales horas, la solidaridad militante debe manifestarse activa y ampliamente a favor de las Comuneras y los Comuneros de El Maizal, en el marco de la lucha contra los sectores reformistas, revisionistas y aburguesados que hacen parte del gobierno nacional.
De otra parte, es necesario tener en cuenta que la lucha de la Comuna de El Maizal está inscrita en el proceso de lucha que vienen librando heroicamente los sectores más avanzados del campesinado nacional en aras de la concreción del derecho a la tierra, o sea, en el combate frontal contra el latifundio. En este sentido, no se trata de acciones aisladas, de actos productos de los desmanes de tal o cual funcionario público, sino de una línea política dirigida a neutralizar y contrarrestar la justeza y legitimidad de sus demandas, de aplacar y acallar a sangre y fuego su anhelo de hacer de Venezuela un país productivo, capaz de satisfacer sus necesidades agroalimentarias, lo cual, evidentemente choca y niega los interés de la burocracia y burguesía importadora. Esto es lo que explica la constante y criminal represión contra el movimiento campesino, quien en los últimos tiempos ha venido resurgiendo como una fuerza que, una vez más, pone en evidencia los compromisos del reformismo gubernamental con los sectores latifundistas y dedicados al comercio importador.
Hoy, cuando la nación entera está expectante frente a la designación del nuevo gabinete ministerial, a propósito de las promesas realizadas por el Presidente Nicolás Maduro durante la campaña electoral y una vez reelecto, las FBL considera que la conformación política que a éste se le dé, determinará el rumbo que seguirá la Revolución Bolivariana en esta nueva etapa de su existencia. En consecuencia, todas las organizaciones populares y revolucionarias del país estamos en el deber de intensificar nuestros esfuerzos para garantizar que ese nuevo gabinete sea conformado por auténticas y auténticos militantes de la Causa Bolivariana y Socialista, es decir, por hombres y mujeres que en su accionar hayan dado muestra fehaciente de su compromiso e identidad con los sectores populares, con el Proyecto Bolivariano, con el Legado Chavista y el Socialismo Revolucionario, por consiguiente, nadie que esté vinculado a los interés del latifundio, de la burguesía importadora y que haya hecho parte directa o indirectamente de la represión y crímenes contra el movimiento comunero y campesino venezolano puede ser aceptado como integrante del nuevo gabinete por el movimiento comunero, campesino y popular. Es la hora del protagonismo popular, es la hora del Poder Popular. Basta de discursos, pasemos a la acción revolucionaria.
¡¡¡PROLETARIOS DE TODOS LOS PAÍSES, UNÍOS!!!
¡¡¡A ORGANIZAR LA GUERRA A MUERTE AL CAPITAL!!!
¡¡¡A ORGANIZAR LA SOLIDARIDAD MILITANTE CON EL MAIZAL!!!