¡HONOR Y GLORIA AL DÍA DE LA HEROICIDAD EN SU 33 ANIVERSARIO!
¡POR LA UNIDAD REVOLUCIONARIA DE LOS PUEBLOS DE AMÉRICA!
1. La resistencia feroz de los prisioneros de El Frontón, Lurigancho y El Callao, contra el infame genocidio del 19 de junio de 1986, conquistó el ¡Día de la Heroicidad!, monumento imperecedero para el proletariado y los pueblos del mundo.
La heroicidad de los prisioneros de guerra se aúna a la heroicidad de numerosos hijos del pueblo, hombres y mujeres del campo y la ciudad que combatieron en la guerra popular, el más grande movimiento revolucionario de la historia peruana hasta hoy, guiada por el marxismo-leninismo-maoísmo, pensamiento gonzalo, dirigida por el Partido Comunista del Perú, bajo la jefatura del Presidente Gonzalo y para transformar el viejo orden de opresión y explotación en beneficio de las amplias masas populares, luchando por el socialismo rumbo al comunismo. Guerra popular que nos deja importantes logros que enarbolamos y defendemos: con la guerra popular hemos servido al barrimiento de la semifeudalidad en el campo principalmente; hemos golpeado como nadie lo hizo antes al imperialismo norteamericano, avivando el espíritu nacional; hemos desenmascarado y golpeado al capitalismo burocrático y al Estado terrateniente burocrático que lo sostiene, desenmascarándolo cabal y completamente como opresor y explotador de la clase y del pueblo y mostrando su debilidad estratégica y finalmente se ha desarrollado la conciencia política de las masas. Así, la guerra popular es el hito imperecedero que solo el futuro superará.
2. Rechazamos y condenamos la vil e infame destrucción de los nichos de los prisioneros de guerra por el Estado peruano.
Hace treinta y tres años, en un solo día, un 19 de junio como hoy, asesinaron a trescientos prisioneros, secuestraron sus cuerpos por más de tres décadas y cuando ocho familiares lograron la entrega de los restos y los enterraron dignamente, el Estado reeditó los más retrógrados y repulsivos momentos de la historia de la humanidad con la Inquisición desenterrando cuerpos para azotarlos, al igual que la monarquía inglesa con Cromwell; y en nuestro propio país, cuando los conquistadores españoles quemaron las momias de los Incas para borrar la memoria histórica de su pasado y, como los represores de la rebelión de Túpac Amaru y Micaela Bastidas, descuartizaron sus cuerpos, quemaron sus restos para que no sean recordados, ordenaron que nadie llore sus muertes ni recuerde su memoria, en el vano intento de ahogar en sangre la rebelión contra el dominio colonial.
Los represores de hoy actúan igual: destruyen nichos, prohíben a los familiares sepultar y honrar la memoria de los prisioneros de guerra; niegan a los exprisioneros trabajar en la administración pública, pero los persiguen con cobros coactivos de reparación civil, embargando su pobreza; decenas de investigaciones policiales por ejercer el derecho de opinión y expresión; procesos judiciales para negar el derecho de participación política; lanzan a sus esbirros de la DIRCOTE a perseguir y hostigar a hijos del pueblo: toda una persecución política para proscribir sin ley y excluir de la sociedad, persecución propia de los regímenes fascistas, policiacos y autoritarios.
El PCP rechaza y condena la innoble persecución política contra los hijos del pueblo marxista-leninista-maoístas, pensamiento gonzalo conscientes de que la represión no ahoga la revolución, sino que más bien la riega, pues mientras haya explotación habrá revolución y revolucionarios que la concreten.
3. La lucha de los prisioneros de guerra es parte de la lucha del proletariado y los pueblos de América, la sangre vertida se aúna a la de miles de héroes de nuestra América que claman ¡REVOLUCIÓN! Y si ayer, hace doscientos años, nuestros pueblos se unieron para combatir el dominio colonialista español por la independencia, hoy con más razón, debemos forjar la unidad revolucionaria de los pueblos de América por la verdadera emancipación del sistema de explotación capitalista y del dominio imperialista, por el sagrado derecho a construir un nuevo mundo sin opresión ni explotación.
Honrando la memoria de los héroes y siguiendo su luminoso ejemplo, los comunistas y revolucionarios del Perú y el mundo luchemos por ¡Poner al mando el marxismo-leninismomaoísmo como la ideología del proletariado! para ¡Combatir por la Revolución Proletaria Mundial!
¡Honor y Gloria al Día de la Heroicidad!
¡Gloria al marxismo-leninismo-maoísmo!
¡Viva el Partido Comunista del Perú y su jefatura, el Presidente Gonzalo!