La paz del pueblo

LA PAZ DEL PUEBLO
 
En Colombia existe una dictadura mafiosa, antidemocrática y antipueblo. Es una dictadura neoliberal, como lo son Santos o Vargas lleras o Gaviria. Esa dictadura que hace que usted no se vaya a pensionar porque unos negociantes ricos se adueñan de todo, que hace que Colombia no sea capaz de producir vacunas porque la educación la salud y la ciencia son negocios para los mismos ricos de siempre. Esa que se ha venido forjando en los últimos 40 años con facciones de esos millonarios en el poder.
 
Esas familias y esa institucionalidad mafiosa quieren seguir favoreciendo sus negocios particulares y seguir haciéndose ricos con la plata de impuestos y negocios del Estado. A eso súmele la alianza de esos neoliberales con los traquetos.
 
Hoy esa dictadura se consolida con la facción narcotraficante y paramilitar encabezada por Uribe Vélez y su partido. Que pretenden mantenerse en el poder como sea.
 
De otro lado el pueblo colombiano sometido a la dictadura de la corrupción, el hambre, la falta de servicios de salud, el desempleo, la violencia, la falta de oportunidades y toda la miseria generada en campos y ciudades por esas elites mafiosas. Estalla de rabia e indignación haciendo reclamos apenas justos ante la situación desesperada y ante la burla de la más descarada corrupción del mal gobierno, autoritario, censurador, corrupto y mentiroso.
 
El pueblo colombiano demuestra que existe, que quiere decidir, que tiene voz e ideas. y el mal gobierno responde con masacres, asesinatos selectivos, desapariciones, descuartizamientos, detenciones masivas, montajes judiciales. Demostrando que su orden es sostenido por la violencia contra los más débiles. Es justo entonces organizarse, defenderse. Solo el pueblo salva al pueblo
 
Los grandes negocios de la comunicación ocultan y tuercen estas realidades que el pueblo conoce y al tiempo colaboran en la campaña electoral que los que gobiernan ya iniciaron como saben hacerlo; con violencia, intimidación, mentiras.
 
El fascismo en el poder empieza su campaña asesinando y encarcelando, mientras se aceita la maquinaria de los clanes narcoparamilitares en las regiones, en el congreso y en los organismos de control. En las grandes ciudades quieren controlar los barrios con bandolas que acallan la voz de los que quieren manifestarse y desde ya meten miedo para que la gente no participe en la política.
 
En esas condiciones el pueblo colombiano no cede ante el terror de Estado, el pueblo colombiano se organiza para defenderse de la agresión injusta del malgobierno, para luchar contra esta dictadura fraudulenta y mafiosa.
 
Lo que está en juego en esta época es la construcción de una verdadera democracia en Colombia. Y la lucha por la democracia exige la participación política de un pueblo capaz de defender de manera independiente sus propios intereses; un pueblo capaz de reconocer los intereses que le son favorables y los que le son contrarios, sin estar detrás de partidos tradicionales ni de políticos profesionales del oportunismo y mucho menos de los asesinos que nos han gobernado en los últimos años y que nos tienen en esta situación de crisis y sin futuro.
 
Como pueblo, como fuerza política y social fundamental del país, debemos hacer valer nuestra voluntad. La participación política en las urnas debe ser de denuncia y condena contra la dictadura mafiosa neoliberal. La participación política en las calles debe defenderse de las agresiones del mal gobierno y salvaguardar la voluntad del pueblo tantas veces burlada.
 
Es un momento histórico para construir un país democrático y en paz en el que nuestros hijos puedan crecer como ciudadanos, en el que sea el pueblo el que orienta los destinos de esta nación. El llamado del MRP es a la organización, a la unidad, a la defensa de los intereses del pueblo porque la dictadura mafiosa ya ha demostrado su capacidad de ejercer la violencia, el fraude, el robo, el engaño para mantenerse en el poder y mantener a los colombianos en la miseria. ante eso hay que defenderse.
 
Ante eso hay que luchar por construir una nación realmente democrática. Eso es lo que está en juego. Seguir así o abrir las posibilidades de cambios reales en el país.
 
Porque la democracia es salud, educación, pan, paz trabajo y justicia para las mayorías empobrecidas de nuestro país.
 
Porque la paz es democracia para el pueblo.
 
¡La Paz de los Ricos, No es la Paz del Pueblo!
 
MOVIMIENTO REVOLUCIONARIO DEL PUEBLO