Guillermo Thorndike. El novelista que cubrió el asesinato del magnate Banchero, la derrota peruana ante Chile, el fusilamiento de 5000 apristas en Trujillo, la caída de Velasco Alvarado, ahora narra la espectacular historia del túnel por el que el MRTA escapó de Canto Grande, el último día del mundial de fútbol de 1990.
Los topos. Parecía una locura cavar un túnel de casi cuatro cuadras de largo, de afuera para adentro de la cárcel. Se metieron bajo tierra y casi no salieron hasta terminar. Mientras en la superficie la vida transcurría como siempre, ellos cavaron como nunca. Nadie oyó los ruidos del túnel, y cuando fueron escuchados en la cárcel, ya era demasiado tarde.
Víctor Polay. El túnel fue para rescatarlo a él y a sus seguidores. El error de una colaboradora le había costado la libertad. Alan García, su antiguo amigo de París, lo tenía preso, y el túnel también fue la manera de terminar de demostrar que sus caminos se habían separado. Cuando llegaron los topos el senderista Osmán Moróte dormía plácidamente a pocos metros libre de toda sospecha.
Guillermo Thorndike. El aclamado autor de “El año de la barbarie”, “No, mi general” y “Abisa a los compañeros”, pronto» vuelve a revelarse como el ojo más agudo y la pluma más certera de la narrativa histórica peruana. Como lo fue la excavación del propio túnel, la lectura de estas páginas demostrará ser indetenible, y no por casualidad: leer a Thorndike es una compulsión nacional desde por lo menos 1969.
Los topos. El tema universal de la fuga subterránea cobra en este libro ágil y documentado un rostro peruano, espectacular. Esta es la historia, minuto a minuto, centímetro a centímetro, del túnel que capturó la imaginación del país y lanzó a las primeras planas mundiales a quienes volvieron a ser libres gracias a él.