País
Nosotros, los Santucho
Biblioteca
Fondos bibliográficos
Autor
Santucho, Blanca Rina
ISBN
--
Localizador
Bib-01/1
Datos de Edición
Córdoba : Publigraf, 2002.
Contenido
La historia de los Santucho roza lo novelesco. Todo comienza con la figura del padre. Procurador Francisco Santucho y de sus matrimonios con dos hermanas. Aún cuando no se pueda determinar históricamente si lo de sus amores fue una sucesión natural, el paso de su corazón por manos de dos hermanas determinó el carácter irredento del hombre que pasaría a la historia como Il Papa Cervi Argentino, en alusión a los Cervi, familia de siete hermanos que desaparecieron en manos del fascismo italiano durante la última guerra mundial.
Del segundo matrimonio nació el séptimo hijo varón, Mario Roberto, Robi Santucho, quien con el tiempo devendría en uno de los líderes más indiscutidos de la lucha argentina. Lo de indiscutido, visto desde la perspectiva del tiempo cobra un realce fundamental, dado que no pocos fueron los cabecillas que asumieron una suerte de doble rol.
Es sólo cuestión de mirarlos, un pantallazo a todos los hermanos uno a uno, con sus vástagos y descendencia, para rescatar de sus rostros y formas un denominador común.
Estatura baja, actitud calma, narices afiladas, ojos orientales entre tristes y eternamente profundos como perdidos entre pensamientos que llevan a ese tiempo ahora incomprensible en la dimensión de la razón. Es que han pasado rasando las lágrimas y las ausencia y el dolor que une, ha dado más características de clan, de tribu a los integrantes de esta familia signada por un apellido que fue casi como un mandato: Los Santucho, los santos, inmolados y héroes, pero apóstatas al fin, rebeldes sin esquemas ni dioses, más bien ungidos por la propia sangre derramada, no sólo de Robi, sino de varios otros hermanos y más aún de quienes lo sobrevivieron.
El relato emotivo de Blanca Rina Santucho, es un testimonio, una cicatriz, un grito surgido de un profundo sentimiento de deber hacia su familia y hacia su país.
María Rita Oubiña, revista "La Columna", de Santiago del Estero, abril de 1997.
Del segundo matrimonio nació el séptimo hijo varón, Mario Roberto, Robi Santucho, quien con el tiempo devendría en uno de los líderes más indiscutidos de la lucha argentina. Lo de indiscutido, visto desde la perspectiva del tiempo cobra un realce fundamental, dado que no pocos fueron los cabecillas que asumieron una suerte de doble rol.
Es sólo cuestión de mirarlos, un pantallazo a todos los hermanos uno a uno, con sus vástagos y descendencia, para rescatar de sus rostros y formas un denominador común.
Estatura baja, actitud calma, narices afiladas, ojos orientales entre tristes y eternamente profundos como perdidos entre pensamientos que llevan a ese tiempo ahora incomprensible en la dimensión de la razón. Es que han pasado rasando las lágrimas y las ausencia y el dolor que une, ha dado más características de clan, de tribu a los integrantes de esta familia signada por un apellido que fue casi como un mandato: Los Santucho, los santos, inmolados y héroes, pero apóstatas al fin, rebeldes sin esquemas ni dioses, más bien ungidos por la propia sangre derramada, no sólo de Robi, sino de varios otros hermanos y más aún de quienes lo sobrevivieron.
El relato emotivo de Blanca Rina Santucho, es un testimonio, una cicatriz, un grito surgido de un profundo sentimiento de deber hacia su familia y hacia su país.
María Rita Oubiña, revista "La Columna", de Santiago del Estero, abril de 1997.