.jpg)
País
La primavera salvadoreña recuerda España
Biblioteca
Fondos bibliográficos
Autor
Ramírez, César
ISBN
9789992373156; 9992373156
Localizador
Bib-03/3-2
Núm. Páginas
590 pp.
Procedencia
[Donación de César Ramírez]
Datos de Edición
San Salvador: Ricaldone, 2010.
Contenido
La primavera salvadoreña, recuerda España, pretende ser un relato-conversatorio, bajo el peso de los acontecimientos sociales de El Salvador en los últimos 40 años.
El relato es voluntario y confesional, audaz y decisivo como el de muchos jóvenes fotografiados para la posteridad en múltiples formas.
La boca se amarga, el destino es estéril. Te queda la alegría de participar.
Me ajusto cuentas.
Aquellos años juveniles poseían un ideal prístino e inmaculado, era material y ese “otro” en realidad deseaba morir y morir escrito en carne y hueso, no solo en esas líneas… tiempo después desde el exilio había tiempo para escribir y desde la distancia en otro tiempo aquellos “dos” me conmovían… uno por juvenil y rebelde, el otro por su perseverancia de anotar todo y finalmente el tercero y “último” por tomarse el tiempo de confesarse, como San Agustín, llanamente hombre, que acepta su destino, por el cual luchó junto a miles de cuzcatlecos y de otras nacionalidades, la mayoría anónimos.
La renuncia del exilio fue una decisión personal en plena guerra, pero construir la democracia ha sido el evento más grandioso en la historia de El Salvador y su costo implicó la vida de miles de salvadoreños y las voluntades de personalidades como Ignacio Ellacuría y sus compañeros españoles, su aporte es un legado para la historia universal, el conjunto inicia la primavera salvadoreña…Los motivos de Ignacio Ellacuría, la Fuerza Armada, las fuerzas populares, en un mosaico de combate por la verdad individual, sin conocer el destino cada quién optó por su camino.
El relato es voluntario y confesional, audaz y decisivo como el de muchos jóvenes fotografiados para la posteridad en múltiples formas.
La boca se amarga, el destino es estéril. Te queda la alegría de participar.
Me ajusto cuentas.
Aquellos años juveniles poseían un ideal prístino e inmaculado, era material y ese “otro” en realidad deseaba morir y morir escrito en carne y hueso, no solo en esas líneas… tiempo después desde el exilio había tiempo para escribir y desde la distancia en otro tiempo aquellos “dos” me conmovían… uno por juvenil y rebelde, el otro por su perseverancia de anotar todo y finalmente el tercero y “último” por tomarse el tiempo de confesarse, como San Agustín, llanamente hombre, que acepta su destino, por el cual luchó junto a miles de cuzcatlecos y de otras nacionalidades, la mayoría anónimos.
La renuncia del exilio fue una decisión personal en plena guerra, pero construir la democracia ha sido el evento más grandioso en la historia de El Salvador y su costo implicó la vida de miles de salvadoreños y las voluntades de personalidades como Ignacio Ellacuría y sus compañeros españoles, su aporte es un legado para la historia universal, el conjunto inicia la primavera salvadoreña…Los motivos de Ignacio Ellacuría, la Fuerza Armada, las fuerzas populares, en un mosaico de combate por la verdad individual, sin conocer el destino cada quién optó por su camino.